(Minghui.org) Una residente de la ciudad de Changchun, provincia de Jilin, ingresó en la prisión de mujeres de la provincia de Jilin en enero de 2024 para cumplir una condena de 4.5 años por practicar Falun Gong, una disciplina espiritual perseguida por el régimen comunista chino desde 1999.

La Sra. Liu Liying, de 54 años, fue detenida por agentes de la estación de policía de Qitamu el 19 de julio de 2023. Le confiscaron libros de Falun Gong, el retrato del fundador de Falun Gong, un ordenador portátil, una impresora, un teléfono móvil, un documento de identidad, tarjetas bancarias, una maleta de viaje y más de 30.000 yuanes en efectivo. Más tarde, la policía le devolvió el carné de identidad y las tarjetas bancarias a petición de su hermana. La policía dejó la casa de la Sra. Liu hecha un desastre, con una tabla de la cama levantada y puertas de armarios, bisagras y cajones de escritorio rotos. Su ropa y edredones estaban tirados por el suelo. El frigorífico y el congelador estaban desenchufados.

La Sra. Liu fue recluida en el centro de detención de Xinglongshan. A principios de enero de 2024, su familia confirmó que había sido condenada a 4.5 años de prisión por el tribunal del distrito de Kuancheng y que había ingresado en la prisión de mujeres de la provincia de Jilin.

Persecución anterior

No es la primera vez que la Sra. Liu es perseguida por practicar Falun Gong, disciplina a la que atribuye la recuperación de su salud. Antes de empezar a practicar Falun Gong en mayo de 1996, caía enferma con frecuencia y sus migrañas eran especialmente debilitantes. Cada vez que tenía un brote de migraña, se sentía tan mareada que no podía caminar, comer ni beber, además de vomitar continuamente. Su sufrimiento terminó con su práctica de Falun Gong, pero se convirtió en blanco de la persecución tras el inicio de esta en 1999. La policía local y el comité de calle la acosaron tanto en casa como en el trabajo. Para no implicar a su empleador, dejó su trabajo y se esforzaba por llegar a fin de mes.

A mediados de junio de 2000, la Sra. Liu fue a Beijing a apelar en favor de Falun Gong y fue detenida. Tras pasar un día detenida en Beijing, la llevaron de vuelta a Changchun, donde permaneció detenida 15 días y le impusieron una multa de 2.000 yuanes.

Wang Dali, agente de la comisaría de Gongnong, detuvo a la Sra. Liu el 28 de septiembre de 2001. La retuvieron en un centro de lavado de cerebro durante un tiempo desconocido. Wang reveló que las autoridades la detuvieron para impedir que regresara a Beijing a apelar durante las vacaciones del 1 de octubre, Día Festivo Nacional.

Una noche de principios de marzo de 2002L, la policía de Changchun realizó una detención en grupo, a practicantes locales de Falun Gong, antes de las reuniones políticas anuales del régimen comunista. Más de diez agentes brincaron la cerca de la señora Liu y saltaron a su patio. Golpearon la puerta y ella les dejó entrar. Registraron todo y la madre de la Sra. Liu, que vivía con ella, estaba tan aterrorizada que sufrió un ataque de su padecimiento cardiaco.

La policía no detuvo a la Sra. Liu esa noche por alguna razón desconocida, pero ella decidió vivir fuera de casa para evitar que la volvieran a acosar.

La Sra. Liu fue detenida de nuevo el 26 de noviembre de 2002 por cinco agentes de la Oficina de Seguridad Interior del distrito de Jiutai. La llevaron al Centro de Detención del Distrito de Jiutai, donde la interrogaron torturándola. La obligaron a sentarse en un banco grande con las piernas apoyadas en él, la espalda recta y los brazos atados a la espalda. Luego le vendaron los ojos y le cubrieron la cabeza con una bolsa de plástico. Entonces, le presionaron con fuerza la cabeza hacia abajo y apretaron la bolsa de plástico. Casi se asfixia. Mientras tanto, la policía le tiró de los brazos todo lo que pudo, causándole un dolor insoportable. Sus brazos no se recuperaron hasta pasado un año. La policía le ordenó que les dijera los nombres de otros practicantes de Falun Gong. Se negó a obedecer y le dieron bofetadas y puñetazos en la cabeza, mientras la insultaban verbalmente.

Ilustración de la tortura: Sofocamiento

El 9 de enero de 2004, el tribunal del distrito de Jiutai condenó a la Sra. Liu a nueve años de prisión, y poco después la trasladaron a la prisión de mujeres de la provincia de Jilin. Allí, los guardias la obligaron a ver vídeos contra Falun Gong y la sometieron a diversas formas de tortura, como permanecer sentada en un pequeño banco durante largos periodos, descargas eléctricas, aislamiento, el lecho de la muerte (le ataban las cuatro extremidades a los postes de la cama en posición de águila extendida suspendida en el aire mientras los guardias la empujaban hacia abajo), privación del sueño y prohibición de ir al baño. Vivía atemorizada todos los días.

Ilustración de la tortura: el lecho de muerte

Otras tres practicantes encarceladas en la misma prisión, entre ellas las señoras Yu Cuilan, Xiang Lijie y Yu Yongzhen, sufrieron la tortura del lecho de la muerte. La Sra. Yu Cuilan quedó lisiada para caminar y la Sra. Xiang no pudo levantar más los brazos.

Por presentar una denuncia penal contra Jiang Zemin, el antiguo líder del régimen comunista que inició la persecución contra Falun Gong, la Sra. Liu fue detenida de nuevo el 3 de septiembre de 2015 por agentes de la comisaría de Gongnong. Estuvo detenida en el calabozo de Jiutai durante diez días.

Anterior a su última detención, fue secuestrada nuevamente por los agentes de la estación de policía de Gongnong , el 8 de junio de 2017, y retenida por tiempo indeterminado.

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