Mirar profundamente hacia dentro y abandonar el apego de la envidia

(Minghui.org) Cuando llegué a la sección "Corazón de envidia" en Zhuan Falun mientras memorizaba el Fa, comprendí que debía abandonar la envidia. Para profundizar mi comprensión, dediqué dos días más memorizando esta sección. Shifu, fundador de Falun Dafa, hizo arreglos para ayudarme a mejorar de inmediato.

Vivo con mi madre, de 88 años. Un día mi cuñada volvió de viaje. Su marido, mi hermano pequeño, le pidió que viniera a cuidar de mi madre durante unos días para mostrar piedad filial. Pensé que podría relajarme unos días.

Mi cuñada vino a mi casa. A pesar de mis expectativas, no se levantó hasta pasadas las 10 de la mañana. Tiene altos niveles de azúcar en sangre y evita muchos alimentos. No podía comer lo mismo que nosotros. Tuve que preparar comida especial sólo para ella. En lugar de relajarme, tuve que trabajar más con ella estando en casa. La toleraba en apariencia, pero me sentía muy desequilibrada en mi interior. Ella parecía estar de vacaciones en lugar de cuidar de mi madre. Después de soportarlo durante unos días, no pude aguantar más y me quejé a mi madre. Mi madre me entendió, pero tenía miedo de criticar a su nuera. Se limitó a aconsejarme que aguantara. Mi corazón se inquietó durante unos días.

Un día, de repente, pensé: ¿no es esto una muestra de la envidia? Shifu nos enseñó:

“Una persona malvada es dominada por el corazón de la envidia. A raíz de su egoísmo y despecho personal, se queja que no le tratan justamente. Una persona virtuosa siempre mantiene un corazón de compasión. Sin ninguna queja ni odio, toma la dificultad como alegría. Un ser iluminado no tiene ningún apego en el corazón. Él contempla tranquilamente a la gente mundana extraviándose en las ilusiones”(Grado de conciencia, Escrituras esenciales para mayor avance).

¿Estaba alegre? Más bien sentía que sufría. Después de tantos años de cultivación, todavía estaba en el nivel de una persona malvada.

De repente comprendí de por qué una persona no puede alcanzar la Perfección cuando no se elimina la envidia. ¿Cómo puede uno alcanzar el Fruto Recto en el reino de una persona malvada?

Shifu dijo:

“Aquí hay una regla: si el hombre, en el transcurso del xiulian, no elimina el corazón de envidia, no puede obtener el Fruto Recto, absolutamente no puede obtener el Fruto Recto” (Séptima Lección, Zhuan Falun).

Me dije que cultivaría la benevolencia y tomaría las dificultades con alegría. También, reflexioné que nada es accidental y que nada de lo que le ocurre a un cultivador es accidental. Shifu vio mi apego y dispuso que mi cuñada me ayudara a mejorar mi carácter, y que ya no puedo desaprovechar esa oportunidad. A pesar de que me decía esto y pensaba lo mismo en mi corazón, los malos pensamientos seguían surgiendo. Los reprimía y volvían a surgir. No podía contenerlos. Los suprimía y volvían a surgir, una y otra vez. Realmente me sentía incómoda en mi corazón. El apego era realmente una sustancia de existencia material. Así que seguí recitando el jingwen del Shifu Grado de conciencia, Escrituras esenciales para mayor avance. Pensé dentro de mí que los principios humanos son al revés, que soy una practicante, que debo actuar según los estándares de un cultivador y no debo ver las cosas con los principios de la gente común. Poco a poco, los malos pensamientos dejaron de surgir.

Mientras leía el Fa, entendí este principio: "Así que ya ganas por cuatro" (Cuarta Lección, Zhuan Falun).

Pensé que soportar el comportamiento de mi cuñada no era suficiente. Debo darle las gracias. Al principio no pude hacerlo. Me obligué a darle las gracias de corazón. Debo agradecérselo. Sin su actuación, mis celos no habrían salido a la luz. Shifu vio que me cultivaba de verdad, así que disolvió esa sustancia mala para mí. Ahora me siento tranquila cuando miro a mi cuñada, y mi corazón ya no se inquieta. Más bien, pensé: No es fácil para ninguna de nosotras; déjala descansar un par de días.

Al estudiar el Fa y al mirar más profundamente hacia dentro, descubrí que detrás de este corazón desequilibrado estaba el apego al beneficio, la búsqueda de recompensa, el gusto por los cumplidos, el alarde, querer validarme, la mentalidad competitiva y la cultura del Partido, entre otros.

Agradezco a Shifu por su minucioso arreglo desde el fondo de mi corazón. Había perdido muchas oportunidades de este tipo en el pasado y realmente me avergüenzo de ello. Shifu tuvo que esforzarse más por mí, ya que mi cualidad de iluminación aún sigue siendo muy pobre después de cultivarme tantos años. Estudiaré atentamente el Fa en el futuro, cultivaré verdaderamente mi corazón, me cultivaré sólidamente y seguiré a Shifu de regreso a casa.