La magia de mirar hacia adentro

(Minghui.org) Mi madre de 88 años y yo hemos estado practicando Falun Dafa durante casi veinte años. Antes de practicar, éramos débiles y enfermizas. Ahora estamos libres de enfermedades y nunca hemos necesitado tomar medicamentos ni recibir inyecciones. Todos en nuestra familia han sido testigos del poder de Dafa. Al enfrentarnos a las pruebas de yeli de enfermedad, creímos firmemente en Shifu y en el Fa , y las superamos sin problemas bajo su protección e iluminación.

En la primavera de este año, mi madre pasó dos veces la prueba del yeli de enfermedad.

Ella vive en un apartamento para personas mayores. No quiere molestar a sus hijos, para que puedan trabajar sin preocupaciones. El apartamento para personas mayores también es un buen ambiente de cultivación donde puede conocer gente y aclararles la verdad sobre la persecución.

Me llamó y me pidió que fuera, diciendo que no podía abrir la boca. Corrí hacia allí y vi a mi madre acostada en la cama. Tenía los dientes apretados. Le pregunté si podía sentarse. Ella asintió. La ayudé a levantarse y ambas comenzamos a enviar pensamientos rectos. Aproximadamente media hora después, mi madre se sentía bien. La llevé a mi casa, donde descansó unos días. Luego la llevé de regreso a su apartamento.

Mi madre volvió a llamarme menos de cinco días después y me dijo que sentía mucho calor. Corrí y la ayudé enviando pensamientos rectos para ella. Después de un tiempo, su temperatura corporal volvió a la normalidad. La llevé de regreso a mi casa y le recordé que necesitaba mirar hacia adentro. Dijo que tuvo un pensamiento erróneo: “Algunas personas mayores que fallecieron fueron sacadas de mi complejo y me preguntaba si sus almas todavía estarían allí”. Mientras pensaba en esto, se sintió débil de inmediato. Al regresar a casa, tuvo que subir las escaleras agarrándose de la barandilla de la escalera. Ella creía que este pensamiento incorrecto le había causado problemas.

Tenía fiebre por la noche, se sentía letárgica y tenía la cara roja. Envié pensamientos rectos para ella, pero los pensamientos no eran fuertes. Me preocupé. Mi madre está en una edad tan avanzada. Si no usaba medicamentos para ayudarla, como la mayoría de la gente espera, mis hermanos no iban a estar contentos conmigo si algo le sucediera.

Me quedé con ella hasta el amanecer y estaba mucho mejor. Cuando era casi mediodía, llegó otra prueba. Mi cuñada, mi sobrino y su esposa vinieron de visita. Al ver su situación, mi sobrino se apresuró a tomarle la temperatura. Tenía 38,5 grados. Me preguntaron por qué no le di medicina. Rápidamente le expliqué: “La gente tiene una variedad de formas de tratar las enfermedades. Algunos usan inyecciones y drogas, algunos usan masajes, algunos usan qigong, etc. Somos practicantes de Falun Dafa. Mientras practiquemos, estaremos bien. Está mucho mejor ahora que anoche”.

En ese momento, mi cuñada y mi sobrino comenzaron a buscar medicamentos. Le echaron un poco de agua a mi madre para que tomara la medicación. Nunca los había visto preocuparse tanto por ella. Me enfurecí y pensé: “Hay cosas que deberías hacer por ella, pero no las haces. Ahora no hay necesidad de preocuparse, ¡pero [de repente] estás muy preocupado!

Quería alejarme y dejar que ellos se ocuparan de ella, pero pensé que se sentirían heridos si realmente me alejaba. Con calma dije: "Si mamá quiere tomar el medicamento, dáselo". Mi madre tomó el medicamento para demostrar que apreciaba su atención.

La acción incorrecta de mi madre de tomar medicamentos le trajo problemas esa noche. Tenía un fuerte dolor de cabeza y empezó a gemir. Me pidió que le buscara más medicamentos. Estaba apretando los dientes, sin embargo, no pude evitarlo y dije: “Te lo daré ya que crees que estás enferma. ¡No tomaste la decisión correcta hoy y provocaste este problema!

Sintiéndose molesta, mi madre respondió: “Realmente no puedo tolerarlo. Tengo un fuerte dolor de cabeza. Incluso quería llamar a tu hermano. Hago lo que me da la gana". Tan pronto como vi que mi madre había perdido sus pensamientos rectos, supe que las viejas fuerzas se habían aprovechado de ella.

Inmediatamente me calmé y miré hacia adentro. Durante algún tiempo, a menudo tenía en lo más profundo de mi mente el pensamiento de que mi madre era vieja y que sería peligroso si sus pensamientos rectos no son fuertes. Sin querer, estaba cayendo en la mentalidad de “vejez, enfermedad y muerte”. Negué este pensamiento de inmediato. Compartí esto con mi madre y le dije: “Me equivoqué. Fueron mis pensamientos no rectos los que provocaron la interferencia. No deberíamos tener brechas. Debemos hacer lo que dice Shifu y mejorar según el Fa”.

Mi madre escuchó atentamente. Agregué: “Los verdaderos practicantes no tienen enfermedades comunes. Nuestros problemas de xinxing son los que causan los problemas. No creíamos firmemente en Shifu y en el Fa, por eso el mal se aprovecha de nosotras.

“Pedimos un deseo desde un cuerpo celestial distante de venir al mundo humano para ser discípulos de Dafa y ayudar a Shifu a salvar seres conscientes. Debemos regresar a casa juntos, siguiendo a Shifu de la mano. Ese es nuestro anhelado deseo desde hace mucho tiempo. Necesitamos escuchar a Shifu para recorrer nuestros caminos de cultivación con rectitud”. Mi madre asintió con la cabeza. Una sonrisa pacífica y compasiva apareció en su rostro.

Tenía un deseo en mi corazón en ese momento: “La ley cósmica de nacimiento, envejecimiento, enfermedad y muerte no se aplica a los preciosos Dafa dizi ancianos del mundo. ¡Avancemos juntos y caminemos firmemente por el sendero de la cultivación dispuesto por Shifu!

Esa noche dormí en casa de mi madre. Noté que tenía una mueca en el rostro debido al dolor de cabeza. Sentí que había sido demasiado dura con ella y que estaba asustada. Tuve que corregirme y le dije: "Puedes tomar un analgésico si te duele". Lo hice para ponerla a prueba. Mi madre sonrió y dijo: “Preparé unas pastillas, las partí en cuatro pedazos y las envolví en papel higiénico. Si no puedo tolerar el dolor, me levantaré y las tomaré”. Sonreí y le llevé las pastillas.

Por la mañana, mi hermano llamó de larga distancia. Estaba preocupado y quería venir. Le dije: “Mamá tomó unas pastillas anoche. Está bien. No te preocupes". Mi hermano estaba bastante feliz. Entonces volvió el dolor de cabeza de mi madre. Esta vez, dijo con pensamientos rectos: “Tomé un montón de medicina y ustedes [las viejas fuerzas] dejaron de dolerme durante unas horas. Después de que dejé de tomar la medicina, volvistes a hacerme daño otra vez. No volveré a tomar medicamentos. Dejaré que me lastimen y lastimen hasta la muerte. ¡Las eliminaré! ¡Pasaré esta prueba con pensamientos rectos!

Cuando llegué a casa del trabajo al mediodía, mi madre me dijo: “No tomé ningún medicamento. Simplemente recité sinceramente: 'Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno'”. Levanté el pulgar y me fui a casa del trabajo por la noche. Mi madre estaba bien y no tenía más dolores. Mi hermano y mi hermana la llamaron y ella les dijo: “No mejoré gracias al medicamento. ¡En cambio, mejoré sin él! ¿Cuál crees que funciona? Ambos la animaron a continuar practicando Dafa.

Parecía que esto era una prueba para mi madre, pero también lo era para mí y para mi familia. Encontré mi resentimiento, envidia y mi crueldad hacia ellos. Estoy decidida a deshacerme de esos apegos y seré amable y agradecida con todos los que conozca. Me doy cuenta de que todo lo que encuentro en el camino de la cultivación no es por casualidad y apreciaré cada oportunidad para mejorar mi xinxing.

Ahora que mi madre está de regreso en su apartamento, se está volviendo más fuerte y está mostrando la bondad de Dafa a la gente que la rodea.

¡No tengo palabras para expresar mi gratitud a Shifu! ¡Le escucharé y haré bien las tres cosas para retribuir su compasión!