(Minghui.org) Una vecina de 52 años del condado de Qingyuan, provincia de Liaoning, será juzgada el 28 de noviembre de 2024 por su fe en Falun Gong, una práctica de cultivación de cuerpo y mente que persigue el Partido Comunista Chino, desde julio de 1999.
La Sra. Li Junfei atribuye a Falun Gong la curación de su fuego de hígado (exceso de calor y energía dentro del meridiano del hígado según la medicina tradicional china), de la hinchazón de estómago y la ciática (dolor que se irradia desde la espalda baja hasta la pierna). En abril de 2024, publicó en su cuenta de redes sociales –desde su celular– algunos videos haciendo los ejercicios de meditación de Falun Gong y recibió varios miles de me gusta. Su compañía de telecomunicaciones, poco después, le bloqueó su servicio telefónico. Los agentes de la Estación de Policía de la ciudad de Wandianzi también fueron a acosarla a su domicilio. La obligaron a firmar una declaración en la que prometía dejar de publicar vídeos de los ejercicios de Falun Gong en Internet.
El 15 de julio de 2024, alrededor de las 15:00 horas, tres agentes irrumpieron en la casa de la Sra. Li. Dos eran del Departamento de Policía de la ciudad de Fushun y el otro de la Estación de Policía de la ciudad de Wandianzi. Fushun supervisa el condado de Qingyuan. La policía confiscó un ejemplar de Zhuan Falun, el libro principal de Falun Gong, y se llevó a la Sra. Li al Primer Centro de Detención de la ciudad de Fushun.
Un agente de la Estación de Policía de la ciudad de Wandianzi llamó al contable del gobierno de la aldea de Kanyuangou y le pidió que avisara al esposo de la Sra. Li para que se personara ante la policía.
Su esposo fue y le ordenaron que firmara un documento que difamaba a Falun Gong. Como estaba aterrorizado, lo firmó.
El abogado de la Sra. Li la visitó en el centro de detención el 22 de agosto, y se enteró de que la Procuraduría del distrito de Shuncheng, en la ciudad de Fushun, le había extendido una orden de arresto oficial y le había tomado declaración. También le dijo que no podía ver con claridad debido a sus cataratas.
Con su esposa detenida, el esposo de la Sra. Li está encontrando dificultades para cuidar de su madre de 80 años, que es ciega y sorda.
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