(Minghui.org) El 11 de septiembre de 2023, una mujer de 75 años de la ciudad de Xi'an, provincia de Shaanxi, fue condenada a tres años y dos meses con una multa de 10.000 yuanes (7.000 USD) por su fe en Falun Gong, una práctica de cuerpo y mente perseguida por el Partido Comunista Chino desde julio de 1999.

El Tribunal Intermedio de la ciudad de Xi'an vio el caso de apelación de Li Xuesong el 18 de diciembre de 2023. La jueza Zhang Yanping (+86-13571911661) presidió la audiencia y la jueza Luo Chengxing (+86-18702938281) la asistió. No notificaron a la Sra. Li sobre la celebración de la audiencia con tres días de antelación, como exige la ley.

El propio abogado de Li exigió la anulación de su veredicto de culpabilidad. Fue detenida el 23 de agosto de 2021 tras ser denunciada por distribuir folletos de Falun Gong entre los pasajeros de dos autobuses urbanos. El Tribunal del distrito de Lianhu la condenó el 11 de septiembre de 2023 acusándola de utilizar una organización de culto para socavar el cumplimiento de la ley. Su abogado de apelación argumentó que ninguna ley china criminaliza a Falun Gong ni lo califica de secta, por lo que la distribución de material de Falun Gong es completamente legal. También señaló que Falun Gong no tenía listados ni organización formal.

El abogado argumentó entonces que el procurador del caso de Li no había probado los cuatro elementos necesarios de su presunto "delito". Según el derecho penal chino, para condenar a un sospechoso de cualquier delito, el procurador debe soportar la carga de las pruebas y debe demostrar que: 1) el sospechoso es mentalmente competente y comprende las consecuencias de sus actos; 2) el sospechoso debe haber tenido la mente criminal (o intención criminal) de causar daño a otros; 3) el sospechoso debe haber cometido un acto criminal; 4) el acto criminal debe haber violado los derechos legales de otros (por ejemplo, el acto criminal de asesinato viola el derecho legal de la víctima a vivir).

Aunque el procurador pudo demostrar que Li era mentalmente competente para ser juzgada, no pudo probar los otros tres elementos. La Sra. Li nunca se propuso hacer daño a otros cuando entregó folletos de Falun Gong a sus compañeros de viaje. Sólo quería informarles de la ilegalidad de la persecución a Falun Gong y de los beneficios para la salud de Falun Gong. Su acción de distribuir folletos de Falun Gong no tenía carácter delictivo, ya que ninguna ley china criminaliza a Falun Gong. Además, su acción no violó los derechos legales de nadie ni causó ningún daño a nadie.

Tian Cheng, abogado de oficio del bufete Lide, coincidió con el abogado de Li y reiteró que su acto de repartir folletos de Falun Gong no causó ningún daño a nadie ni a la sociedad en general.

La jueza Zhang preguntó a Li de dónde había sacado los folletos. Ella no respondió. Zhang le pidió entonces que hiciera una demostración de algunos ejercicios de Falun Gong. Ella accedió, pero Zhang le ordenó que renunciara a Falun Gong. Aunque desconocía la intención de Zhang para que le pidiera que hiciera una demostración de los ejercicios, ella expresó su determinación de no renunciar a Falun Gong.

No está claro si Li sigue retenida en el Centro de Detención de Xujiawan, en el distrito de Weiyang, ciudad de Xi'an. Para más detalles sobre su detención, acusación, juicio y sentencia, véanse los informes relacionados que figuran al final de este artículo.

La jueza Luo viola la ley

El abogado Tian fue designado para representar a la Sra. Li antes de que esta tuviera la oportunidad de contratar a un abogado. Se le ordenó que no solicitara la anulación de su veredicto de culpabilidad. Li contrató entonces a su propio abogado.

Según la ley, un abogado de oficio debe renunciar cuando su cliente contrata a su propio abogado. Tian conocía bien la ley y le dijo a la jueza Luo que abandonaría el caso de Li. Luo, sin embargo, insistió en que siguiera asistiendo a la audiencia. Tian dijo que no había ninguna razón válida para hacerlo y Luo puso como excusa que la señora Li sólo tenía un abogado, no un defensor de familia que no fuera abogado. De hecho, ningún acusado está obligado a recurrir a un abogado o a un defensor de familia.

Luo también se quejó de que el propio abogado de la Sra. Li presentó una vez una queja contra ella junto con otro abogado, por mantener el veredicto de culpabilidad contra otro practicante de Falun Gong.

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