(Minghui.org) A finales de diciembre de 2023 se supo que una mujer de 53 años de la ciudad de Baoding, provincia de Hebei, había sido sentenciada a dos años por su fe en Falun Dafa, una práctica de cuerpo y mente perseguida por el Partido Comunista Chino desde julio de 1999.

La sentencia de la Sra. Zang Yongjian se deriva de su arresto el 26 de septiembre de 2022. Los agentes de la Estación de Policía de Jiezhuang la acosaron días antes y confiscaron su ordenador, impresora y demás objetos personales durante su arresto. La llevaron al Centro de Detención de la ciudad de Baoding.

La Procuraduría del distrito de Jingxiu devolvió su caso a la Estación de Policía de Jiezhuang, citando pruebas insuficientes, pero esta última inventó más pruebas en su contra y consiguió que la Procuraduría la acusara.

El Tribunal de la ciudad de Baoding escuchó el caso de la Sra. Zang el 17 de agosto de 2023 y solo permitió que dos de sus familiares y amigos asistieran a la audiencia. Las pruebas de la acusación incluían los registros de los interrogatorios de la policía, que ella señaló que eran totalmente inventados ya que ella nunca había hecho esas "confesiones".

Su familia confirmó su sentencia en diciembre de 2023, pero aún no conoce la fecha exacta de su sentencia. Es probable que todavía esté detenida en el Centro de Detención de la ciudad de Baoding en el momento de escribir este artículo.

Una nuera que siempre está dispuesta a ayudar

El esposo de la Sra. Zang se divorció porque no podía hacer frente a la persecución que ella sufrió por su fe en Falun Dafa. Ella se mudó de la casa familiar y alquiló un lugar para vivir sola. Su anciana exsuegra necesitaba ayuda con las actividades diarias y la Sra. Zang iba a cuidarla cuando tenía tiempo.

Más tarde, su exsuegra contrató a dos asistentes domésticos, pero la Sra. Zang todavía ayudaba cuando los asistentes se tomaban tiempo libre. Semanas antes de su arresto, volvió a cuidar a su exsuegra. La anciana estaba desconcertada de porqué la Sra. Zang repentinamente dejó de visitarla un día. Al enterarse del arresto de su exnuera, dijo que Falun Dafa le dio un gran corazón, pero que el régimen comunista la detuvo por defender su fe.

Antes de su divorcio, la Sra. Zang también se ofreció como voluntaria para ser la cuidadora principal del padre de su esposo y de sus dos hermanos, que fueron hospitalizados con años de diferencia por enfermedades terminales. Ofreció ayuda porque nadie en su extensa familia tenía tiempo o estaba dispuesto a cuidar a los pacientes. Ella cuidó de los tres hasta que fallecieron uno tras otro.

La Sra. Zang estuvo allí nuevamente cuando el hijo del segundo hermano de su esposo tuvo un accidente automovilístico y fue hospitalizado. Ella le cuidó hasta que le dieron el alta del hospital.