(Minghui.org) Soy practicante de Falun Dafa desde hace más de 20 años. Empecé a aprender Falun Dafa con mis padres cuando era niña. Sin embargo, mi apego a las emociones estuvo a punto de llevarme por mal camino. Shifu no me abandonó, sino que me iluminó repetidamente y me dio oportunidades. El campamento de verano 2023 para jóvenes practicantes fue una gran oportunidad que me brindó Shifu.

Al asistir al campamento de verano, me di cuenta de lo que no había hecho bien y adquirí una comprensión más profunda de la cultivación. Me gustaría compartir algunas de mis experiencias, con la esperanza de que más jóvenes practicantes participen en el futuro.

Un entendimiento más profundo de la cultivación

Pedí una semana de permiso en el trabajo para asistir al campamento de verano. El campamento duraba cuatro días, pero yo me apunté para trabajar siete días como miembro del personal. Aproximadamente un mes antes del campamento, el personal empezamos a estudiar el Fa y compartíamos nuestras experiencias en línea una vez a la semana. El primer tema fueron las experiencias sobre la superación de la prueba de la lujuria. Me sentí presionada porque no me había ido bien en este tema. El intercambio de experiencias me dio la oportunidad de reflexionar sobre mí misma y eliminar mucho material degenerado.

No pude terminar mi trabajo la semana anterior al campamento de verano, y pensé en no ir este año, pero mi esposo me recordó: "¿Por qué no, si ya has pagado el campamento y has pedido permiso?". No tuve más remedio que ir. El día antes de partir, pensé mientras estudiaba el Fa: "¿Cuánto sueldo voy a perder por mi permiso?". Sin embargo, corregí mis pensamientos y decidí concentrarme en el estudio, puesto que ya había invertido el dinero y el tiempo para mejorarme.

El campamento tenía un horario muy apretado. Todos los días nos levantábamos a las 5 de la mañana y hacíamos los ejercicios antes del desayuno, luego estudiábamos el Fa hasta el mediodía. Las tardes se dedicaban principalmente a compartir experiencias. Después de cenar, seguíamos estudiando el Fa y compartiendo experiencias.

Me costó acostumbrarme a la apretada agenda de actividades durante los primeros días del campamento. Quería irme a casa pronto. Empecé a hablar con mi esposo sobre cuándo vendría a recogerme. Mi esposo me preguntó: "¿No te has inscrito como jefa de equipo? ¿Qué hará tu equipo si te vas? Que será de tu equipo". Tenía razón. Decidí quedarme hasta el final. Empecé a concentrarme mejor.

Me di cuenta de mis brechas en la cultivación

Nuestros temas de intercambio de experiencias eran específicos, como la importancia de enviar pensamientos rectos, qué interferencias habíamos experimentado, cómo eliminar las interferencias, cómo cultivar diligentemente, etc.

Solía tener problemas para concentrarme mientras enviaba pensamientos rectos. Me di cuenta, a través de las experiencias compartidas, de que esto se debía a diversas formas de interferencia, como mis apegos.

Shifu nos ha dicho:

“En realidad, esto es el resultado de un entendimiento inadecuado del Fa por su parte humana. Así la parte divina, es decir, la parte que ustedes han cultivado exitosamente es reprimida artificialmente y su rectificación del Fa es obstruida. ¿Cómo puede la parte que ustedes no han cultivado exitosamente reprimir los pensamientos primarios o la parte que ya ha obtenido el Fa? Es porque los demonios perversos que han sido engendrados artificialmente se han aprovechado del Fa” (Dao y FaEscrituras esenciales para mayor avance).

Tras darme cuenta de que mis apegos interferían, dejé de seguir los pensamientos que me distraían e intenté eliminarlos mientras enviaba pensamientos rectos. No había prestado mucha atención a la importancia de limpiarme durante los primeros cinco minutos, y eso fue aprovechado por el mal. Repasé el editorial de Minghui "Las esencias para enviar pensamientos rectos y los horarios para enviar pensamientos rectos a horas establecidas alrededor del mundo (Actualizado)” y me concentré mucho mejor.

Sentir sueño mientras se estudia el Fa también era un problema común. No podemos tolerarlo, sino que debemos rechazarlo. Podemos levantarnos o sentarnos con las piernas cruzadas durante el estudio del Fa.

El no haber eliminado mis apegos había causado mis problemas de concentración. Estos apegos se convirtieron en pensamientos de distracción mientras estudiaba el Fa.

Las viejas fuerzas se aprovecharon de estas brechas y me hicieron cada vez menos diligente en mi cultivación. Descubrí este problema y empecé a enviar pensamientos rectos y a estudiar el Fa con toda mi atención. Fue lo mejor que aprendí del campamento de verano.

Apreciar el entorno de la cultivación

Era la segunda vez que participaba en el campamento. La primera vez fue hace cuatro años, pero no aprendí tanto como esta vez. Probablemente porque esta vez me apunté para trabajar en el campamento.

Me enteré de que el campamento del año pasado tuvo más de 100 asistentes y que Taiwán era probablemente el único lugar del mundo que tiene esa cantidad o más de asistentes para un campamento. Este año, cerca de 70 personas de entre 13 y 40 años vinieron a nuestro campamento desde Taiwán, Hong Kong, Vietnam, Malasia, Japón y otros países. Atesoramos esta escasa oportunidad de hacer mejoras colectivas.

Me gustaría hacer un llamamiento a los practicantes de todos los países para que organicen este tipo de campamentos, que proporcionan una oportunidad única para que los jóvenes practicantes estudien el Fa juntos e intercambien sus experiencias. La mayoría de ellos han seguido a sus padres en la cultivación desde su infancia. Algunos padres pueden no tener experiencia en guiar a sus hijos a compartir experiencias de cultivación. Algunos simplemente decían a sus hijos lo que tenían que hacer, pero no explicaban bien las cosas.

Shifu cuidó de mí cuando era pequeña. Sabía por qué debía cultivarme y qué significaba la cultivación, pero me perdí en este confuso mundo de gente corriente a medida que crecía. Las exigencias de mis padres se convirtieron en una carga para mí, y me volví más rebelde. No fue hasta que participé en un proyecto de esclarecimiento de la verdad que aprendí a mirar hacia dentro.

El campamento de verano me permitió experimentar un campo de energía pura y un entorno de cultivación, y aprendí algo nuevo cada día. Atesoraré mi entorno de cultivación en Taiwán y me cultivaré con diligencia.