Los apegos humanos invitan a los espíritus malignos

(Minghui.org) Me gustaría compartir una experiencia de cultivación con otros practicantes.

Un secretario local del Partido Comunista Chino (PCCh) vino a pedirle a mi esposo que escribiera el llamado informe resumido de fin de año un día durante la temporada de cosecha de otoño en 2012. Sin embargo, mi esposo estaba en casa de mi hermana menor para ayudar con la cosecha de otoño. El secretario dijo: "¿Por qué no lo escribes tú?". Le dije que estaba bromeando, yo no puedo escribirlo. Luego él dijo: "Tengo una muestra aquí, solo necesitas copiarla". Esto era típico de la forma en que el malvado Partido hace las cosas: todo es "falso".

Para acabar de una vez, no pensé mucho en ello. Simplemente lo copié y lo envié. El secretario dijo: "Lo hiciste bastante rápido. Por favor, haz dos más". Dijo que las otras personas estaban demasiado ocupadas para escribir sus informes. No me negué y los llevé a casa. Rápidamente terminé de copiarlos y los envié de vuelta esa tarde.

Después de ir a casa, seguí sintiendo que algo andaba mal. Pensé: "Soy practicante de Falun Dafa; parece que no debería hacer esto". Pensándolo bien, el contenido no era mi pensamiento, y no redacté los informes. Todo lo que hice fue copiarlos, no debería ser de gran importancia.

Después de la cena, todo mi cuerpo comenzó a sentir que algo lo estaba apretando. Me dolía, incluidos mis huesos, y no mejoraba. Estaba cansada, de mal humor y comía sin control. Sentía que no podía comer lo suficiente, pero poco a poco estaba perdiendo peso. Todo mi cuerpo se volvió negro y delgado, y me sentí incómoda. Busqué hacia adentro y encontré algunos apegos. Envié pensamientos rectos para eliminarlos, pero no hubo ningún efecto. Esto duró más de 40 días, y sufrí de dolor todos los días, impotente.

Quería ir a casa y hablar con mi madre (también practicante) sobre mi situación, y pedirle que enviara pensamientos rectos por mí. Sentí que el campo de energía podría ser más fuerte con dos de nosotros enviando pensamientos rectos juntas.

El benévolo Shifu vio que yo era incapaz de iluminarme por mí misma, así que me dio una pista la noche que fui a la casa de mi madre. Cuando estaba medio dormida, me vi parada contra una pared, y estaba entrelazada por tres grandes boas constrictoras. Las cabezas de las tres pitones se sujetaron a mi cabeza, con mi cabeza en el medio. Formaron un triángulo alrededor de mi cabeza, con la boca abierta. Mis ojos parecían dolorosos e indefensos. Fue tan lamentable, tan vívido, y me asustó tanto que estallé en un sudor frío.

Ver esta horrible escena me despertó. Fue el misericordioso Shifu quien me lo mostró. Estaba poseída por el espíritu maligno del Partido Comunista porque copié el informe resumido de tres miembros del malvado Partido. Inmediatamente me levanté y me senté en la posición de loto con una palma recta para enviar poderosos pensamientos rectos, para desintegrar a los espíritus malignos.

Siento cada vez más que la cultivación es muy seria. No es un juego de niños, y no puedo hacerlo arbitrariamente. Me he dado cuenta de que debo tomarme como cultivadora en todo momento. Necesito cultivar cada palabra y acción y corregirme basándome en el Fa, y abstenerme resueltamente de hacer cualquier cosa que sea inconsistente con Dafa. De lo contrario, puedo invitar artificialmente a tribulaciones y agregar enormes obstáculos y dificultades a mi camino de cultivación.

Al resumir esta dolorosa lección, me di cuenta de que ocurrió porque no estudié bien el Fa, no me cultivé sólidamente, no entendí los principios del Fa y no pensé en el Fa cuando encontré problemas. Es decir, no me tomé este asunto en serio. Esta es una lección muy profunda para mí. Fui atrapada y perseguida por las fuerzas del mal.

Estoy escribiendo este artículo al respecto para compartir con todos. El propósito es usar mi experiencia personal para demostrar que el perverso espectro comunista realmente existe, y es muy malvado. El malvado espectro comunista hará cualquier cosa para destruir a la humanidad. Aconsejo a los miembros del malvado Partido que no sean enterrados con él, y que renuncien al Partido lo antes posible para que puedan estar a salvo.