(Minghui.org) Sentenciaron a una vecina de la ciudad de Shenyang, provincia de Liaoning, a cuatro años de prisión después de arrestarla a mediados de junio de 2021. La Sra. Liu Huarong está cumpliendo condena actualmente en la prisión de mujeres de la ciudad de Shenyang.

Esta es la octava vez que la Sra. Liu, de alrededor de 70 años y exbibliotecaria de la región militar de Shenyang, se ha visto arrestada por su fe en Falun Gong, una disciplina espiritual que persigue el régimen comunista chino desde 1999.

A la Sra. Liu ya la habían encarcelado varias veces, con anterioridad, en varios campos de trabajos forzados, en centros de lavado de cerebro y en prisiones, por un total de 12 años.

La arrestaron por primera vez en junio de 2000, porque fue a Beijing a apelar por el derecho a practicar Falun Gong. Estuvo detenida en el Campo de Trabajos Forzados de Longshan, y luego en el Centro de lavado de cerebro de Shenyang, que está dentro del Campo de Trabajos Forzados de Zhangshi.

La Región Militar de Shenyang, para la que trabajaba, la envió dos veces a un centro de lavado de cerebro. Primero en 2001 y luego en 2002.

Para evitar la persecución, vivió alejada de su casa durante cinco meses. Sin embargo, la volvía a arrestar en agosto de 2003. Y le impusieron tres años de trabajos forzados. Primero la recluyeron en el Campo de Trabajos Forzados de Longshan antes de transferirla al Campo de Trabajos Forzados de Masanjia, el 18 de noviembre de 2003. La esposaron antes de encerrarla en un almacén sin luz ni ventilación, durante varios días. Entonces, los guardias la sacaron a rastras de su celda, a un pasillo, y la golpearon.

La llevaron al Centro de lavado de cerebro de Pingluo Shan Zhuang, en la ciudad de Fushun, el 10 de diciembre de 2006.

Tras salir en libertad, la volvían arrestar en septiembre de 2009, por distribuir materiales informativos sobre Falun Gong. Más tarde, el Tribunal de Distrito de Shenhe la sentenció a tres años, y cumplió la condena en la prisión de mujeres de la provincia de Liaoning. La pusieron en libertad el 16 de septiembre de 2012.

La volverían a arrestar por presentar una denuncia penal contra Jiang Zemin, el exjefe del régimen comunista que lanzó la persecución, el 3 de noviembre de 2015. La internaron en el centro de detención de la ciudad de Shenyang, antes de que el tribunal del distrito de Heping la sentenciara a tres años y medio de cárcel.