(Minghui.org) He cultivado Falun Dafa durante 15 años. En todo este tiempo, siempre he estado preocupado por el hecho de que no he podido cultivar la verdadera y pura compasión que Shifu requiere de nosotros. Muchas de mis nociones y apegos humanos parecían imposibles de eliminar.

Sin embargo, finalmente hice un gran avance después de leer el nuevo artículo de Shifu “Por qué existen los seres humanos”

Shifu dijo:

“Para salvar al cosmos celestial, el Creador llamó a las multitudes de dioses y Señores a descender al mundo humano para ser seres humanos en este entorno, soportar amarguras, elevarse, eliminar los pecados, reconstruirse y luego regresar al cielo” (Por qué existen los seres humanos).

La frase "reconstruirse" me abrió la mente. Me hizo comprender, desde lo más profundo de mi ser, el sentido y el propósito de la vida. En ese momento, sentí que nada en el mundo humano era tan importante para mí.

Anteriormente intenté desprenderme de mis apegos, pero no pude. Ahora he comprendido que lo importante para mí es reconstruirme de nuevo para poder cumplir la misión de ayudar a Shifu en la rectificación del Fa y la salvación de los seres conscientes.

Shifu ha hablado del sentido de la vida en muchas conferencias. Comprendía los principios del Fa, pero en realidad no podía desprenderme de los apegos. Me aferraba a la vida humana mientras anhelaba un mundo divino. Cuando leí la frase "reconstruirse", me di cuenta de que estas nociones y apegos adquiridos postnatalmente no pueden mezclarse en absoluto con mi cultivación. Si la mente de uno no está a la altura del estándar requerido de pureza, uno no será capaz de regresar a su hogar celestial, y su propio mundo celestial no durará mucho (que es mi entendimiento en mi nivel actual). Uno debe asimilarse incondicionalmente al Fa.

En el pasado, cuando quería deshacerme de ciertos apegos humanos, siempre recitaba el Fa de Shifu e intentaba utilizar el poder del Fa para ayudarme a aclarar estas nociones postnatales. Los apegos eran eliminados temporalmente, pero cuando me encontraba con otros problemas, mi resentimiento, mentalidad competitiva, envidia, arrogancia y otros apegos aparecían de nuevo. Por esta razón, sentía que la cultivación era muy ardua y agotadora.

También recordé algo más que dijo Shifu:

“No siempre pueden depender de mí para eliminar su ye, mientras que ustedes mismos no hacen un mejoramiento real en el entendimiento del Fa ni se elevan por encima del entendimiento y los conceptos humanos” (Palabras de advertencia, Escrituras esenciales para mayor avance).

No es de extrañar, incluso después de cultivarme durante tantos años, que siguiera sin poder deshacerme de mis muchos apegos. Es como pedirle a otra persona que limpie mi habitación cuando no sé cómo hacerlo yo mismo.

Después de darme cuenta de esto, empecé a ver más de mis propios defectos. Vi cuán grande era la brecha entre mi xinxing y el estándar de Shifu. Shifu ha dado a sus discípulos todo para la cultivación y vela por nosotros en todo momento; todo depende de cómo nos cultivemos.

Tengo que tomar la iniciativa de eliminar esos apegos y nociones que se han ido formando a lo largo de los siglos, tanto si interfieren activamente conmigo como si no. Los apegos y las nociones son como una gruesa capa de polvo, y cada vez serán más gruesos si no los limpio. Al eliminar el polvo, también estoy restaurando mi naturaleza innata y transformando la esencia de mi ser en algo divino.

Cuando comprendí este nivel de la enseñanza de Fa de Shifu, empecé a enviar pensamientos rectos para limpiar mi propio campo cada día desde el momento en que me despertaba. Aparte de estudiar el Fa y hacer los ejercicios, no me permitía pensar en otra cosa, sólo enviar pensamientos rectos y limpiar mi campo.

Shifu dijo:

“¿Saben todos por qué hay muchas, muchas cosas y muchos corazones de apegos que ustedes no pueden eliminar aunque pongan mucho empeño en ello? ¿Por qué es tan difícil? Siempre les he dicho que las partículas componen partículas, nivel tras nivel, desde el microcosmos hasta la superficie material. Si miraras en el extremo microcósmico a la materia formada por los apegos que tu mente tiene, te vas a encontrar con montañas, montañas gigantescas compuestas de piedra como granito, y una vez formadas, simplemente no hay manera que un ser humano las mueva” (Exponiendo el Fa en el Fahui de Chicago, 2004, Colección de Enseñanzas del Fa, Vol. IV).

Frente a una montaña tan grande, no puedo aflojar más. La rectificación del Fa de Shifu está alcanzando el reino humano. No sé si todavía podré alcanzarla incluso si corro.

Sigo enviando pensamientos rectos para limpiar mi espacio y vivir mi existencia para los demás. Shifu ha visto que estoy decidido a mejorar y, como resultado, me ha ayudado a eliminar gran parte de las sustancias degeneradas. Siento que por fin he empezado a salir del nivel humano. En lugar de contenerme a la fuerza cuando encuentro problemas o conflictos, ahora puedo hacerlo sin sentirme movido o afectado. Después de cultivarme durante tantos años, siento que apenas he aprendido a hacerlo. Lo siento, Shifu, por hacer que te preocupes tanto.

¡Gracias, Shifu, por cuidarme y apoyarme!

Nota del editor: El artículo representa únicamente la opinión del autor y está destinado a compartir entre los practicantes según la enseñanza del Fa: “…comparte en el aprendizaje y comparte en la cultivación…”  (Cultivación sólida, Hong Yin).