(Minghui.org) "A día de hoy, los practicantes de Falun Dafa siguen siendo objetivo de estos sistemas, incluso fuera de China. Los practicantes pueden sentirse seguros en América, ¿pero sus señales electrónicas? Están ahí para cualquiera que quiera mirarlas, a menos que estén protegidas", dijo Ethan Gutmann.

Ethan Gutmann es un galardonado analista de China e investigador de derechos humanos, autor de Losing the New China: A Story of American Commerce, Desire and Betrayal y The Slaughter: Mass Killings, Organ Harvesting, and China's Secret Solution to Its Dissident Problem. Escribió para publicaciones como The Wall Street Journal Asia, The Weekly Standard, National Review e Investor's Business Daily, y ofreció testimonios y sesiones informativas al Congreso de Estados Unidos, la CIA, el Parlamento Europeo y las Naciones Unidas.

En la década de los noventa, Gutmann trabajó como consultor empresarial en China. En julio de 2001, habló con dos ingenieros de Cisco en China, que le dijeron que Cisco ganaba a sus competidores construyendo a medida una "caja especial". Esta caja podía utilizarse para examinar los paquetes de información transmitidos por internet.

En 2002, Gutmann asistió a una conferencia sobre vigilancia en Shanghái y habló con vendedores de Cisco. Un vendedor de Cisco le explicó que, con determinados dispositivos móviles, la policía podía detener a los practicantes de Falun Dafa en la calle. Con solo introducir el nombre de un practicante y algunos identificadores en el dispositivo móvil, podían leer la información sensible del practicante, como correos electrónicos, de los tres meses anteriores.

Las palabras clave que buscaba la Oficina de Seguridad Pública china incluían "agitación", "Xinjiang", "Falun Dafa", "catolicismo" y "Cristo".

Gutmann obtuvo información de primera mano sobre las capacidades de Cisco de los representantes de ventas en el estand de Cisco y de los folletos chinos de Cisco. Gutmann habló con un vendedor de Cisco y le preguntó: "¿Esto puede apuntar a Falun Dafa?". El vendedor respondió: "Sí, está hecho para eso. Puede apuntar a Falun Dafa a través de su correo electrónico".

Gutmann dijo que China necesitaba ayuda de Occidente para implantar este nivel de seguimiento. Al proporcionar esta capacidad, Cisco pudo entrar en el mercado chino de routers.

Gutmann dijo: "Hay muchos refugiados de Falun Dafa que estuvieron en ese centro de detención y fueron severamente perseguidos gracias a lo que hizo Cisco". Cisco proporcionó la red para que la Oficina de Seguridad Pública china capturara a estos practicantes".

El 7 de julio de 2023, el Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito de EE. UU. dictaminó que un tribunal de distrito inferior podía seguir adelante con la audiencia de una demanda presentada por practicantes de Falun Dafa que acusaban a Cisco y a dos de sus antiguos ejecutivos de ayudar al régimen del PCCh a rastrear y perseguir a los practicantes de Falun Dafa.

Al conocer la sentencia del Noveno Circuito, Gutmann declaró: "Me quedé con la boca abierta. Estaba realmente sorprendido y satisfecho por la decisión del Noveno Circuito".

Gutmann dijo que el caso es un recordatorio de cómo las empresas se corrompieron en China pensando solo en los intereses a corto plazo; se sintieron atraídas por el crecimiento de la economía china y cometieron errores muy estúpidos.

Abogada Kathy Roberts: Un poco de luz en un cielo oscuro

"Me entusiasmó conocer la sentencia. Los demandantes llevan mucho tiempo esperando que se haga justicia, y esta decisión indica que su caso por fin avanzará", dijo la abogada Kathy Roberts.

Roberts es codirectora fundadora de Partners in Justice International. Durante casi dos décadas, Roberts representó ante los tribunales a víctimas y supervivientes de violaciones de derechos humanos y atrocidades internacionales. Su trabajo en favor de las víctimas de Somalia ha sido ampliamente difundido en Estados Unidos y África, incluso en el programa 20/20 de la cadena ABC y en CNN Investigates.

"Creo que para los supervivientes de Falun Dafa, así como para otros supervivientes en China, es un poco de luz en un cielo por demás bastante oscuro", dijo Roberts. "El mensaje es que no hay lugar donde esconderse, aunque solo se preste ayuda a este tipo de delitos aparentemente de forma encubierta. Tú también eres responsable y te van a atrapar. Si sabes que lo que haces va a contribuir a cometer atrocidades, eso es un delito. Así que no lo hagas".

"Espero que los inversores y las partes interesadas que participan en otras empresas, cuando se enteren de esta decisión, digan: 'echemos un vistazo a lo que estamos haciendo, y ¿cruzamos alguna de estas líneas? En el mejor de los casos, incitará a los que aún no lo están a mirar más allá de lo que está en juego en sus propios negocios para ver las posibles consecuencias nefastas que algunos compromisos pueden tener para otros".

"Este tipo de casos puede tener un enorme significado para personas que de otro modo no tendrían expectativas de justicia. Puede darles la esperanza de que los autores no van a salirse totalmente con la suya", afirma Roberts.

"Por un lado, este tipo de casos nunca podrán ser adecuados a la justicia que realmente merecen las víctimas. Aunque Cisco tuviera que rendir cuentas y todos los demandantes obtuvieran una enorme indemnización monetaria, ninguna cantidad de dinero puede compensar realmente este tipo de delitos. Pero las indemnizaciones monetarias son el lenguaje de la justicia en los tribunales civiles, y una indemnización monetaria puede tener un gran valor simbólico".

Abogada Sophia Cope: Esta es una victoria tremenda

"La decisión del Noveno Circuito es una gran noticia, no sólo para los demandantes, sino para todas las víctimas de abusos contra los derechos humanos facilitados por empresas estadounidenses", dijo la abogada Sophia Cope.

Cope, abogada senior del equipo de libertades civiles de la Electronic Frontier Foundation, escribió un Amicus Curiae en el caso Cisco. Trabaja en diversos temas relacionados con la libertad de expresión y la privacidad. Lleva casi dos décadas trabajando en el ámbito de las libertades civiles y tiene una amplia experiencia en litigios y defensa de políticas. Sus artículos se publicaron en The New York Times, The Guardian del Reino Unido, Slate y The Huffington Post.

"En una tremenda victoria para las víctimas de estas herramientas de represión, el Noveno Circuito abrió un camino de responsabilidad legal para las empresas tecnológicas estadounidenses que construyen herramientas que facilitan los abusos de los derechos humanos por parte de gobiernos extranjeros", dijo Cope. "La EFF presentó múltiples amicus curiae en el caso, incluso en el Noveno Circuito".

Según Cope, los trece demandantes alegaron arresto, detención y tortura, incluso de ellos mismos y de miembros de su familia, al menos uno de los cuales murió a golpes mientras estaba detenido. Los alegatos son horribles y se hacen eco de los informes del Departamento de Estado de EE. UU. y de muchas ONG de derechos humanos. En ellas se afirma que los demandantes fueron internados en campos de trabajo forzado, golpeados con barras de acero, electrocutados con porras eléctricas y sometidos a privación de sueño y alimentación forzada violenta. Los demandantes también alegaron que sus correos electrónicos privados, mensajes de texto y otra información -interceptada por el Escudo Dorado- les fueron mostrados y utilizados como parte de su tortura y conversión forzosa, incluyendo amenazas a sus familiares y a otras personas que se comunicaban con ellos.

"Hay mucho más en el dictamen, como permitir que se presente una demanda contra los altos ejecutivos de Cisco en virtud de otra ley, la Ley de Protección de Víctimas de Tortura (TVPA)", dijo Cope. "En general, la opinión del Noveno Circuito es una tremenda victoria para los derechos humanos y para aquellos que quieren asegurarse de que las empresas estadounidenses dejen de ayudar a los gobiernos represivos¨.