(Minghui.org) Mientras continúe la persecución en China, no debemos dormirnos en los laureles en materia de seguridad.

Después de que algunos practicantes fueran acosados o liberados de centros de detención, sus familiares instalaron cámaras de vigilancia cerca de la puerta de su casa para estar atentos a cualquier policía que viniera a acosarlos. Aunque esto no es en sí mismo un problema, algunos de estos practicantes acogían grupos de estudio del Fa en sus casas, lo que significaba que los practicantes que venían eran grabados en vídeo al entrar y al salir. Si las grabaciones de vídeo no se borraban inmediatamente, supondrían un riesgo importante para la seguridad de cualquier persona que viniera al estudio de Fa.

Cuando traté de persuadir a estos practicantes para que prestaran atención a los posibles riesgos de seguridad de sus cámaras de vigilancia, me respondieron: “No te preocupes. Mientras enviamos pensamientos rectos, todo irá bien”.

Les recordé que Shifu nos ha advertido tantas veces que nuestros teléfonos celulares son dispositivos de rastreo, sin mencionar sus cámaras de vigilancia. Si no borran inmediatamente las grabaciones de las visitas de otros practicantes, ¿no estarán a disposición de la policía si viene? Si piensan que sus pensamientos rectos son lo suficientemente fuertes como para protegerse a sí mismos y a los demás, entonces ¿por qué fueron perseguidos en primer lugar? Pueden creer que sus pensamientos rectos superaron su propia persecución, pero ¿pensaron en cuánto tuvo que sacrificarse Shifu Li (el fundador de Dafa) por ellos? Si todos pudiéramos seguir la guía del Shifu en materia de seguridad, se eliminarían muchas tribulaciones innecesarias y le causaríamos menos problemas al Shifu.

Veo que algunos practicantes siguen llamándose por el móvil y hablando de información confidencial sobre otros practicantes o sobre nuestros proyectos. Estos practicantes no deberían excusar su comportamiento diciendo que tienen "fuertes pensamientos rectos" o acusar a otros practicantes de tener miedo, cuando se les recuerda que deben prestar atención a la seguridad de los teléfonos móviles. Ha habido demasiadas lecciones amargas en el pasado sobre esto.

Espero de verdad que todos podamos dar la máxima prioridad a las cuestiones de seguridad, de modo que causemos menos problemas al Shifu.