(Minghui.org) Una mujer de 75 años del condado de Laishui, provincia de Hebei, ha sufrido el acoso incesante de las autoridades desde que la pusieran en libertad el 9 de mayo de 2023, tras ser condenada a tres años de prisión y cuatro de libertad condicional.

Liu Yumin se convirtió en blanco de las autoridades debido a su fe en Falun Gong, una práctica para la mejora del cuerpo y la mente que persigue el Partido Comunista Chino desde julio de 1999.

El 30 de mayo de 2023, la Oficina Judicial del condado de Laishui creó un grupo de trabajo de correccionales comunitarios para "trabajar", específicamente, en el caso de Liu. Lo dirigió Zuo Cheng (director de la oficina judicial) y, entre sus miembros, se encontraban los funcionarios Hu Fenglan y Wang Baojun, de la aldea de Dongguan, en el condado de Laishui. El objetivo consistía en obligar a Liu a renunciar a su fe en Falun Gong, una disciplina espiritual de la Escuela Buda.

El grupo de trabajo le ordenó a la Sra. Liu que se presentara ante ellos con regularidad y asistiera a "sesiones de estudio" programadas. Si no podía personarse, le debía enviar fotos suyas, estando en casa.

Como la Sra. Liu aún se estaba recuperando de las torturas que sufrió durante su detención, se negó a cumplir la orden. Entonces, el grupo especial la amenazó con volver a detenerla.

Se le ordenó tanto a la Sra. Liu como a sus seres queridos que mantuvieran sus teléfonos encendidos las 24 horas del día, 7 días a la semana, para que estuvieran preparados para responder a las llamadas del grupo de trabajo. También se les ordenó que descargaran una aplicación que permitía localizarles y vigilar sus actividades.

También le prohibieron que saliera de la ciudad.

Aunque al principio se sintieron aliviados por su liberación, ahora la familia de Liu se siente bajo mucha presión debido al acoso sin cuartel.

Detención y condena

Detuvieron por su fe en Falun Gong a la Sra. Liu, una antigua maestra de primaria, en casa de su hijo el 18 de marzo de 2022. Y la recluyeron en el Centro de Detención de la ciudad de Baoding. Posteriormente, remitieron su caso a la procuraduría de la ciudad de Zhuozhou, que la acusó y trasladó su caso al tribunal de la ciudad de Zhuozhou.

En un principio, el tribunal programó una audiencia para el 27 de diciembre de 2022. Pero, la canceló después de que el presidente del tribunal, Xie Wenhai, diera positivo en la prueba de COVID-19. La audiencia se reprogramó y se celebró el 11 de enero de 2023, por videollamada.

Según su familia, la Sra. Liu parecía encontrarse en muy mal estado de salud. Había perdido gran parte de su cabello. Debido a la hipertensión, estaba mareada y le dolían las piernas. Sólo podía caminar apoyándose en dos personas.

El tribunal celebró la segunda audiencia el 7 de marzo de 2023. Dos abogados declararon la inocencia de Liu. Argumentaron que ninguna ley ha penalizado nunca a Falun Gong en China, y que no violaba ninguna ley por compartir información sobre Falun Gong con otras personas.

Tres familiares de Liu asistieron a la audiencia. Se les permitió visitarla después de la sesión. Se alegraron de saber que su hipertensión había bajado un poco desde su última comparecencia, hacía dos meses.

El juez celebró la tercera sesión el 24 de marzo, antes de condenar a Liu el 9 de mayo. Le ordenó a su familia que la recogiera en el centro de detención ese mismo día. Antes de ponerla en libertad, las autoridades del centro de detención le ordenaron que firmara una carta en la que declaraba que el centro de detención no era responsable del estado en que se encontraba.

Una semana después de regresar a casa, Liu seguía teniendo problemas para dormir por la noche y era muy sensible a cualquier sonido.

En el transcurso de los últimos 24 años de la persecución a Falun Gong, la despidieron de la escuela primaria donde trabajaba, por negarse a renunciar a su fe. También sufrió incesantes detenciones, saqueos en sus viviendas y acoso. Mientras permaneció detenida, los agentes la golpearon, la colgaron de las esposas, la alimentaron a la fuerza y la quemaron con cigarrillos.

Su marido, el Sr. Wu Yanshui, que también practicaba Falun Gong, murió el 20 de mayo de 2001 debido a las torturas que sufrió bajo custodia.

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