(Minghui.org) Comencé la práctica de cultivación en Falun Dafa mientras estaba encarcelada en 2013. Antes de ir a prisión, era propietaria de un negocio por cuenta propia. Para complacer a mis clientes y hacer crecer mi negocio, emitía facturas falsas siempre que los clientes me las pedían. A principios de la década de 2000, un familiar denunció esta actividad a las autoridades. Vinieron agentes de policía y me llevaron a la comisaría para interrogarme. Cooperé con ellos. Sin embargo, no me permitieron ir a casa ni decirle a mi familia dónde estaba, y acabé detenida durante dos años. Al final me condenaron a 10 años de prisión.

Antes de empezar a cultivarme, el beneficio personal era muy importante para mí. No dormía bien por la noche porque me preocupaba mi negocio y, en consecuencia, tenía mala salud. Siempre tenía frío y, cuando dormía, me sentía como en una cueva de hielo. Mi cuerpo tenía una malformación del cuello para abajo, tal que mi torso se doblaba hacia la derecha y hacia atrás. Me costaba andar y necesitaba ayuda para subir y bajar escaleras. Busqué ayuda para corregir mi postura y acudí a médicos de medicina tradicional china, medicina occidental y también remedios populares; pero no conseguí curarme.

Durante el tiempo que estuve detenida, me sentí muy triste y lloré mucho. Pensé que estaría mejor muerta.

Afortunadamente, conocí a practicantes de Falun Dafa en el centro de detención. Eran buenas personas y, gracias a su amabilidad, vi la belleza de Dafa. Jiang Zemin, exjefe del Partido Comunista Chino (PCCh), los difamó y persiguió. Estaban detenidas ilegalmente, ya que no habían infringido ninguna ley. Aunque fueron duramente perseguidas, se mantuvieron muy amables y no mostraron odio ni resentimiento. Vi que siempre pensaban primero en los demás. Dondequiera que iban, llevaban paz y calidez, y a todas las presas comunes les gustaba estar con ellas.

Mi milagrosa recuperación

Las practicantes de Falun Dafa se preocupaban por mí y me ayudaban en mi vida diaria. Me hablaron de los principios de Verdad, Benevolencia y Tolerancia. También enseñaron a otras detenidas a recitar los poemas del Maestro Li y a leer Lunyu. Dejé de llorar cuando conocí a las practicantes. Por su bondad, vi que "Falun Dafa es bueno" y "Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno" son afirmaciones verdaderas. También empecé a practicar y me convertí en practicante de Dafa. Me sentí bendecida.

En cuanto aprendí los ejercicios, el Maestro Li empezó a cuidarme. Varios días después de hacer la primera serie de ejercicios, sentí un Falun (Rueda del Fa) girando sobre mis hombros. De repente, todo mi cuerpo se enderezó. Ya no estaba doblada, y a partir de entonces me moví libremente. El Maestro Li había purificado mi cuerpo. Fue un milagro. El Maestro también me dio los mecanismos de energía necesarios para la cultivación. Sentí que estos mecanismos giraban automáticamente todos los días. El Maestro abrió mi ojo celestial y empecé a ver flores. Finalmente, a la edad de 42 años, sentí calor y dormí bien por la noche.

Cuando me trasladaron a la prisión después de ser condenada, algunas presas comunes y los guardias me preguntaron qué delito había cometido. Les dije que había emitido facturas falsas. Sin embargo, no me creyeron. Alguien dijo: "Veo que eres practicante de Falun Dafa".

Una vez que empecé a cultivarme en Falun Dafa, dejé de discutir y golpear a la gente; me volví más tranquila y empecé a ayudar a la gente y a pensar en las necesidades de los demás. Quería ser una verdadera practicante de Dafa y ser una buena persona dondequiera que fuera. Quería que mi conducta mostrara a la gente que "Falun Dafa es bueno" y que "Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno".

También dejé de preocuparme por las ganancias y pérdidas personales, dejé de discutir con mis familiares por razones triviales y dejé de luchar por sentimentalismos. Siguiendo las enseñanzas del Maestro, miré en mi interior cuando me enfrentaba a problemas y consideré los sentimientos de los demás; traté a todo el mundo con amabilidad. Dejé de llorar y deseché mi resentimiento hacia el familiar que me denunció a la policía. Cuando salí de la cárcel, hablé con todos mis parientes y les conté la verdad sobre Falun Dafa. Todos ellos renunciaron al PCCh y sus organizaciones afiliadas.

Aprendiendo lo que se necesita para cultivarme de verdad

Mientras estaba en el centro de detención y en la cárcel, no leía mucho el Fa y no me cultivaba bien -mi cualidad de iluminación era pobre-. Sin embargo, el compasivo Shifu no me abandonó y me animaba.

Una vez soñé que había cumplido mi condena pero no me ponían en libertad. Le pregunté al alcalde: "He cumplido mi condena, ¿por qué no me sueltan?". El alcalde respondió: "Déjame comprobarlo". Entonces fui a prepararme para salir de la prisión e irme a casa, pero no encontré ropa adecuada que ponerme. Una reclusa tuvo la amabilidad de quitarse la ropa y dármela. Antes de que pudiera ponérmela, un hombre vestido de negro la agarró de repente y, al mismo tiempo, me roció con escoria maligna.

Sabía (en mi sueño) que era el demonio de la lujuria; grité: "¡Falun Dafa es bueno! ¡Verdad, Benevolencia, Tolerancia es bueno!". La escoria seguía cayendo sobre mí como gotas de lluvia. Entonces grité: "¡Maestro! Maestro!". Inmediatamente la escoria desapareció, y todo mi campo dimensional se volvió más brillante que antes. Las personas de mi campo parecían más energéticas y cada una tenía un cutis saludable. Comprendí que el Maestro me había salvado a mí y a las demás vidas de mi campo dimensional. También llegué a comprender que el Maestro me dio a entender que debía desechar el deseo físico.

Después de salir de la cárcel, leí diligentemente el Fa, hice los ejercicios y me uní a otros para hablar a la gente sobre Falun Dafa y la persecución. Como nos pide el Maestro, hice las tres cosas y me cultivé con mis mejores esfuerzos. Quería ser una verdadera practicante de Dafa.

Al principio, cuando salía a pegar carteles, no sabía qué hacer, así que acompañé a una compañera practicante para poder aprender de ella. Era invierno y se me congelaron las orejas. Cuando colgué un cartel, sentí que un trozo de yeli (karma) salía volando de una oreja. Cuando colgué otro, otro trozo de yeli (karma) salió volando. Cuando colgué el tercer cartel, la congelación de mis orejas desapareció. Desde entonces, nunca he sufrido congelaciones en las orejas. Este es solo uno de los muchos milagros que he experimentado. El Maestro siempre está a nuestro lado cuidándonos, animándonos y protegiéndonos.

"Te daré el apodo de 'Sabio'"

Cuando hablo a la gente de la persecución, trato a todos los que conozco como si fueran parientes. A un joven le dije: "Hola hermano, aquí tienes un dije. Tiene los caracteres de Verdad, Benevolencia y Tolerancia y es para tu seguridad". Lo aceptó y preguntó: "¿Eres practicante de Falun Dafa?". Le contesté: "Sí, lo soy. Falun Dafa es una práctica de la Escuela Fo y los practicantes somos buenas personas; no somos los ‘contrarrevolucionarios’ que dice la propaganda”.

"Soportamos las dificultades y nos cultivamos siguiendo los principios de Verdad, Benevolencia y Tolerancia. Mostramos la belleza de estos principios al mundo y somos ejemplos morales para la humanidad. Cultivar Falun Dafa ayuda a elevar la moral de la sociedad humana". Dijo: "Sé que ustedes no son 'contrarrevolucionarios'".

Le comenté: "Jiang Zemin difamó a Falun Dafa y comenzó la persecución. El régimen engaña a la gente, persigue las creencias rectas y calumnia a Dafa. Está cometiendo crímenes contra los dioses". Entonces le pregunté: "Hermano, ¿te has afiliado alguna vez al Partido, a la Liga de la Juventud o a los Jóvenes Pioneros?". Respondió: "Me uní a todos ellos".

Seguí hablando: "En estos tiempos, todavía puedes distinguir entre el bien y el mal. Eres realmente una buena persona. ¿Qué tal si te ayudo a renunciar al PCCh y sus organizaciones? Te daré el apodo de 'Sabio'. Renunciar a ellos te asegurará un futuro seguro". Respondió con entusiasmo: "Claro, ¡gracias!".

Continué: "Hermano, llevas una mascarilla protectora para evitar el COVID. De hecho, es una plaga que los dioses están utilizando para eliminar a aquellos que cometieron crímenes contra los dioses, incluyendo a aquellos que sustrajeron los órganos de los practicantes de Falun Dafa cuando aún estaban vivos. El COVID tiene como objetivo a los miembros del Partido del Mal que juraron dar su vida por él. Los practicantes están contando a la gente hechos sobre la práctica y aconsejándoles que renuncien a las organizaciones del Partido: están salvando vidas”.

"De 2013 a 2015, más de 40 cuadros dirigentes del Partido Comunista a nivel central, ministerial y provincial fueron condenados a prisión. Todos ellos cometieron crímenes contra los dioses: persiguieron a los practicantes de Dafa, les sustrajeron los órganos y los vendieron para ganar dinero".

"La pandemia está eliminando a otras personas malas como ellos. Hermano, te insto a que renuncies a las organizaciones del PCCh. Eres una buena persona y tendrás protección divina. La autoinmolación de la Plaza de Tiananmen fue una invención del régimen de Jiang Zemin para poner a la gente en contra de Falun Dafa. Todos los que entienden la verdad sobre Dafa son bendecidos. En el futuro, cuando te encuentres con situaciones difíciles o desastres, por favor recuerda recitar sinceramente 'Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno'. Definitivamente serás bendecido". Él dijo: "¡Gracias! ¡Gracias!".

Antes de que se marchara, le dije de nuevo: "Por favor, no pierdas el material informativo y el dije que te di. Por favor, comparte la información a tus parientes y amigos para ayudarles a comprender la verdad sobre Falun Dafa para que también tengan la oportunidad de salvarse". Él dijo: "Gracias Maestro Li. Gracias, gracias".

He estado levantándome a las tres de la mañana cada día para leer el Fa y hacer los ejercicios. Luego salgo a hablar con la gente sobre Dafa y la persecución. También envío pensamientos rectos a las horas establecidas. Cada semana, ayudo a por lo menos 100 personas a renunciar al malvado Partido y sus organizaciones juveniles.

Gracias, Maestro, por salvarme.