(Minghui.org) Desde la perspectiva de una persona común, ya soy de mediana edad, ya que nací en la década de los ochenta. La razón por la que me considero un practicante joven es doble. En primer lugar, como he practicado Falun Dafa desde que era niño, parezco mucho más joven que la gente de mi edad. En segundo lugar, la mayoría de los practicantes locales tienen entre 70 y 80 años y, a sus ojos, sigo siendo un hombre joven. Todos me llaman "joven practicante".
Practico Falun Dafa desde 1998. Por aquel entonces, todavía era un niño y no sabía mucho. Sólo leía el Fa y hacía los ejercicios con mi madre. Después de que el Partido Comunista Chino (PCCh) lanzara la persecución contra Falun Gong en julio de 1999, mi madre fue detenida y llevada a un campo de trabajo forzado por ir a Beijing a apelar. Perdí mi entorno de cultivación y poco a poco me fui perdiendo en la sociedad común.
Mi madre continuó practicando diligentemente después de que la liberaran del campo de trabajo y regresara a casa. Con su ayuda, reanudé la cultivación, pero no siempre fui diligente. Tal vez el Maestro Li (fundador de Falun Dafa) vio mi estado de cultivación y se preocupó por mí, así que organizó muchas oportunidades para que yo me cultivara y mejorara.
Establecimiento de un lugar de producción de materiales
Hace unos 12 años, el practicante local que estaba a cargo de la producción de materiales fue arrestado, y el sitio de producción de materiales fue destruido. Nos quedamos sin materiales. El coordinador local estaba muy preocupado y me preguntó si podía encargarme de restablecer el lugar. En ese momento estaba escuchando los artículos de la Conferencia de Falun Dafa en línea de China continental que descargué del sitio web de Minghui. Oí a muchos practicantes hablar de su experiencia en la creación de un sitio de producción de materiales familiares, y yo también quería hacerlo. Justo entonces, surgió la oportunidad. Así que acepté sin dudarlo.
No tenía experiencia en cómo hacer materiales informativos de Dafa, y había muy pocos practicantes locales que supieran hacerlo. Así que leí artículos de la página web de Minghui sobre cómo poner en marcha centros de producción de materiales. Guiado por otros practicantes, encontré el "Rincón de los sitios de producción de materiales" en Minghui, y también aprendí a ir al Foro Tiandixing.
Estoy muy agradecido por la dedicación desinteresada de los técnicos. Han elaborado unos tutoriales tan buenos y fáciles de entender para gente como yo, que era novato en este tema. Además, cada vez que hacía una pregunta, recibía muchas respuestas detalladas de practicantes experimentados. Todo esto me conmovió tanto que sentí que los discípulos de Dafa son realmente un solo cuerpo. Así pues, seguí los pasos indicados por otros practicantes y construí un sitio de producción de materiales desde cero.
Lo más importante es que el Maestro me dio muchas pistas y ayuda, y ocurrieron muchas cosas increíbles. Una vez, fui a otra región a comprar provisiones. Como no conocía la zona, no encontraba el mercado. Justo cuando estaba perdido, se me acercó una persona y me preguntó adónde quería ir. Cuando se lo dije, me respondió que él también iba a ir y que podía acompañarle. Cuando por fin llegamos a la puerta del mercado, justo cuando empecé a darle las gracias, había desaparecido. Me quedé sorprendido, pero más tarde comprendí que aquella persona debía de haber sido enviada por el Maestro.
En otra ocasión, el cabezal de impresión de una impresora tenía problemas y no imprimía correctamente los colores. Me coordiné con otro practicante para hacer materiales, y probamos muchas maneras de corregir el problema. Los demás colores mejoraron, pero el azul seguía sin estar bien.
Nos sentamos y miramos hacia dentro. De repente, el otro practicante dijo: "Azul... Azul... ¿No es eso pereza? ¿Has estado más relajado últimamente y tienes apego a la facilidad y la comodidad?". [Nota del traductor: El carácter chino para "azul" tiene una pronunciación similar a la del carácter para "pereza"]. Me sentí un poco avergonzado, y admití: "Últimamente ha estado haciendo frío, y a menudo no podía levantarme temprano por la mañana para hacer los ejercicios". El otro practicante dijo: "Últimamente pareces cansado y siempre estás bostezando. El apego a la facilidad es peor que el veneno. ¡Cuanto más duermas, más perezoso te volverás! Hacer los ejercicios es la mejor forma de descanso". Estuve de acuerdo. Decidí levantarme temprano y hacer los ejercicios por la mañana.
Cuando encendimos la impresora y volvimos a intentarlo, todos los colores estaban bien. Nos miramos asombrados. La máquina se había arreglado después de que cultiváramos nuestro xinxing. Fue realmente milagroso.
Coordinación
Hace unos años, el coordinador local fue detenido y condenado ilegalmente. Por motivos de seguridad, nuestro centro de producción de materiales siempre había sido una única línea de contacto. Sólo lo conocíamos tres personas, entre las cuales yo era el apoyo técnico. Un practicante fabricaba los materiales conmigo, y el coordinador los distribuía a otros practicantes. Ni siquiera mi madre sabía nada. Después de que detuvieran al coordinador, los materiales empezaron a acumularse en el lugar de producción de materiales. Los demás practicantes no podían conseguir los materiales para salvar a la gente. Debido a esta situación, no tuve más remedio que hacer el trabajo del coordinador además de seguir prestando apoyo técnico.
La verdad es que no quería asumir esta tarea, porque tenía un trabajo común y ya dedicaba casi todo mi tiempo libre al trabajo técnico para el centro de producción de materiales. A veces incluso tenía que quedarme despierto toda la noche para reparar las máquinas. Así que realmente no tenía tiempo ni energía para coordinar y ocuparme de todos los detalles. Además, soy una persona muy introvertida y no me resulta fácil comunicarme con la gente. Estaba bien haciendo el trabajo técnico, pero ponerme en contacto con tantos compañeros y ayudarles a resolver todo tipo de conflictos me resultaba difícil. Sin embargo, no podía imponer este trabajo al practicante que fabricaba los materiales. Como el lugar de producción de materiales estaba en su casa, no sería seguro que distribuyera materiales a los demás practicantes.
Al final, decidí que, si era necesario, lo haría por muy difícil que fuera. Ante el problema de que no tenía tiempo suficiente, me esforcé por mejorar mi eficiencia planificando con antelación. Cambié mi habitual estilo perezoso de hacer las cosas y cada día trabajaba a pleno rendimiento. Como había tantas cosas que hacer y me preocupaba olvidarme algo, solía llevar conmigo una nota para anotar las cosas que había que hacer. Después, lo ordenaba todo por orden de importancia y urgencia, programaba el tiempo para hacerlas y tachaba cada cosa una vez terminada.
Mi agenda era muy apretada y a menudo tenía que correr en vez de andar. No solía tener tiempo para comer, así que compraba bollos y bocadillos y me los comía por el camino. Si aun así no tenía tiempo suficiente, dormía menos. Ahora, he pasado de tener prisa y sentirme abrumado al punto en que puedo trabajar muy eficientemente y terminar todo. Esto es realmente asombroso.
Todavía tenía dificultades para comunicarme con otros practicantes y me encontré con muchas pruebas de xinxing. Como cada practicante tiene necesidades diferentes y un estado de cultivación distinto, tengo que hacer las cosas de forma diferente para cada uno de ellos. A menudo se producen cambios repentinos e imprevisibles en las situaciones. Durante este proceso, sentí que la capacidad de mi corazón se ampliaba constantemente. En resumen, no importaba con qué conflictos me encontrara, incluso cuando me sentía agraviado, siempre recordaba la enseñanza del Maestro:
No contender
"Si te encuentras con fuertes discusiones, no contiendas con palabras de pelea
Buscar la causa hacia adentro es xiulian
Mientras más se piensa en explicar, más pesa el corazón
Magnánimamente, sin apegos, aparece la visión clara"
(Hong Yin III)
Mirar hacia dentro es realmente una herramienta mágica para nosotros. Por la forma en que me trataban otros practicantes, descubrí muchos de mis propios apegos, como el apego a guardar las apariencias, el no querer aceptar las críticas, la mentalidad de fanfarrón, los celos, la mentalidad competitiva, etcétera. Intenté eliminarlos constantemente. Pensándolo ahora, estoy muy agradecido a aquellos compañeros que me ayudaron a mejorar mi xinxing.
Esclarecer la verdad
Tras el brote de COVID de finales de 2019, la mayoría de la gente se recluyó en sus casas y se instalaron muchas cámaras en las calles. Como resultado, mi forma habitual de esclarecer la verdad, que era distribuir materiales esclarecedores de la verdad, se vio limitada. Para ser sincero, entre las tres cosas que el Maestro pide a los discípulos de Dafa que hagan, aclarar la verdad siempre ha sido mi punto más débil. Debido a mi personalidad introvertida, nunca me resultó fácil hablar, y nunca he sido capaz de aclarar directamente la verdad a la gente por teléfono. Me propuse superar este cuello de botella y cumplir de verdad mi misión.
La primera vez que hice llamadas para aclarar la verdad estaba tan nervioso que me temblaban las manos y las piernas. Aunque leí el manuscrito innumerables veces, mi cerebro estaba en blanco y mi discurso era totalmente incoherente. Como resultado, o nadie atendía el teléfono o la persona colgaba enseguida. Sabía que mi estado no era el adecuado. ¿Cómo iba a salvar a la gente si estaba tan nervioso? Me adapté rápidamente y, en silencio, pedí ayuda al Maestro para que los seres conscientes tomaran los teléfonos, escucharan la verdad, renunciaran al PCCh y a sus organizaciones juveniles y se salvaran.
Cuando hice la siguiente llamada, mi tono era más estable. Saludé a la persona muy amablemente y le pregunté por su situación actual. Tal vez percibió mi sinceridad y, en lugar de colgar, charló conmigo como un viejo amigo. Me contó que se encontraba en una zona donde la situación de pandemia era muy grave, por lo que estaba encerrado en casa. En cuanto me enteré de que estaba en una zona peligrosa, me preocupé de verdad por él, e inmediatamente le dije que no tuviera miedo, y que podía mantenerse a salvo renunciando al PCCh.
Le pregunté si se había afiliado a alguna organización del PCCh. Me contestó que se había afiliado a la Unión de Juventudes Comunistas. Le dije: "Te daré un bonito seudónimo para que renuncies a las organizaciones del PCCh, Ji An, con lo que estarás a salvo. ¿Te parece bien?". Aceptó de inmediato. Estaba tan emocionado que casi se me salen las lágrimas. Estaba tan feliz por él desde el fondo de mi corazón. Le di las gracias al Maestro por ayudarme y animarme.
Con la primera experiencia exitosa, adquirí mucha más confianza para salvar a la gente. Cuando volví a llamar por teléfono, mis palabras eran naturales y pacíficas, y el efecto de salvar a la gente mejoraba cada vez más. Como mucho, pude ayudar a más de doce personas a renunciar. Pero a veces, mi apego al egoísmo y mi mentalidad de ostentación se manifestaban, y entonces me encontraba inmediatamente con personas que no querían escuchar la verdad, o incluso me maldecían. Me di cuenta de que eso me recordaba que debía mirar hacia dentro y cultivarme para eliminar esos apegos humanos.
Una vez, una señora muy amable tomó el teléfono. Al principio hablé muy bien con ella y pensé que sería fácil convencerla de que renunciara. Sin embargo, le dijera lo que le dijera, no accedía a renunciar. Insistía en que el PCCh era bueno. Incluso me aconsejó amablemente que no hablara mal del PCCh, pues me pondría en peligro. Al final, repasé todos los temas de conversación que había preparado, pero no pude hacerla cambiar de opinión.
Después de aquella llamada, me sentí muy frustrado y triste. Miré hacia dentro, reflexioné y de repente descubrí que todavía estaba adoctrinado por la cultura del PCCh y que no tenía una comprensión clara y profunda de la naturaleza malvada del PCCh. Como resultado, fracasé en ayudar a la gente a comprender realmente la maldad del PCCh. Me quedé muy sorprendido cuando me di cuenta de esto.
Me calmé y leí los Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista, Desintegrando la Cultura del Partido y La Meta Última del Comunismo. Aunque había leído muchos de estos libros, todos se habían distribuido a la gente común y nunca los había leído a fondo. Esta vez, después de leerlos cuidadosamente, sentí que la barrera en mi mente que me impedía comprender el Fa se desintegraba gradualmente.
Pude memorizar fácilmente Hong Yin VI, y finalmente comprendí que el ateísmo, la teoría de la evolución y los conceptos modernos que el Maestro menciona repetidamente en los poemas no son sólo para la gente común. También es un problema muy serio que afecta a los practicantes de Dafa.
Aunque acabo de empezar a esclarecer la verdad por teléfono, he sentido que mi cultivación ha mejorado rápidamente. Muchos de mis apegos humanos ocultos fueron expuestos, uno tras otro. Cuando alguien me pidió dinero, vi mi deseo de interés material. Cuando alguien me pidió que le buscara pareja, vi mi apego a la lujuria. Cuando se decía algo que no me gustaba, veía mi mentalidad competitiva. Cuando alguien estaba profundamente adoctrinado por el PCCh, me di cuenta de que el adoctrinamiento del PCCh seguía afectando a mi actitud.
Ahora, soy cada vez más consciente de que sólo puedo salvar mejor a la gente cultivándome bien, teniendo una mente pura y pacífica, alcanzando verdaderamente un estado desinteresado y pensando de todo corazón en las necesidades de los demás. Por supuesto, comparado con muchos practicantes, todavía estoy muy atrasado y tengo que correr hacia adelante para ponerme al día.
En realidad, sólo necesitamos tener el deseo de cultivarnos de verdad, y todo lo hará el Maestro. Sin embargo, Shifu nos da toda la gloria. Como individuos, somos incapaces y débiles, pero cuando nuestros corazones están llenos de respeto devoto hacia Shifu y a Dafa, y cuando seguimos verdaderamente los estándares del Fa en cada pensamiento, palabra y acción, el poder del Fa se manifestará en nosotros, y seremos capaces de cumplir nuestra misión sagrada de asistir al Maestro en la rectificación del Fa.
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Categoría: Caminos de cultivación