Con Benevolencia un secretario del Partido finalmente renuncia al Partido Comunista Chino

(Minghui.org) Después de muchos años y múltiples intentos, finalmente pude ayudar a un Secretario del Partido a renunciar al Partido Comunista Chino (PCCh).

Yo trabajaba para una agencia gubernamental. Después de jubilarme, fui a casa del ex Secretario del Partido para hablar con él sobre Falun Dafa por primera vez. Envié pensamientos rectos para limpiar sus pensamientos negativos, así como su entorno familiar. También pedí al Maestro Li (fundador de Falun Dafa) que lo despertara.

Me dio la bienvenida y me mostró poemas y prosa que había escrito. Es aficionado a la literatura y sigue escribiendo incluso después de su jubilación. Leyó Zhuan Falun en 1998, pero no se hizo practicante porque no podía dejar de beber, fumar y cazar conejos. Me dijo: "No aprendí la práctica, pero compré el libro para mi hermana".

Le dije: "Ya puedes renunciar al Partido Comunista Chino. Recitando a menudo 'Falun Dafa es bueno y Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno', estarás a salvo".

Él respondió: "He sido miembro del partido durante 40 años, no puedo renunciar así como así". Entonces llegaron sus invitados, así que tuve que despedirme.

Le visité dos meses después y estaba leyendo unos folletos de esclarecimiento de la verdad que le habían dado unos practicantes. Comentó: "Esta es una buena información que enseña a la gente a hacer el bien, y los practicantes están arriesgando sus vidas para difundirla".

Le dije: "Puedes compartirla con los demás cuando termines, ya que ayudará a que más gente conozca a Dafa y la persecución".

Le hablé del "engaño de la autoinmolación en la plaza de Tiananmen" y de por qué Jiang Zemin (difunto exlíder del PCCh) inició la persecución a Falun Dafa. También le hablé de los 5.000 años de historia de la cultura china y de que los seres divinos lo crearon todo. Luego expliqué que el PCCh es una entidad atea que mató a 80 millones de personas y que será eliminada por el cielo. Así que renunciar al PCCh le traerá protección.

Me respondió: "Ya lo sé, y sé más que tú. Todo lo que has dicho son cosas del pasado. El PCCh tiene ahora el poder y nadie puede desobedecerlo. He leído libros sobre enseñanzas budistas y taoístas, pero sigo escuchando al Partido porque me pagan. No estoy en contra de Falun Dafa, y si quieres practicarlo, que así sea".

Estaba claro que el PCCh le había adoctrinado y lavado el cerebro, así que me excusé y me fui. Pero yo quería despertarle, así que pedí ayuda al Maestro.

Cuando le visité por tercera vez, nada más entrar, exclamó: "¡Ha venido un practicante de Dafa! Entra, por favor. ¡Tengo una historia asombrosa que contarte! ¡Es asombrosa! ¡Los seres divinos existen!

"Hacía frío. Mis hijos estaban ocupados, así que fui a la habitación del lado norte de la casa y utilicé una lámina de plástico para cubrir la ventana. El alféizar era alto y yo no tenía escalera. Puse un pie encima de la pared exterior y el otro en el alféizar. Entonces resbalé y caí con fuerza. Se me doblaron las piernas y me golpeé contra el suelo; también me golpeé la cabeza contra la pared.

"Pensé que todo había terminado. Pero inmediatamente pensé: "¡No, debo gritar rápidamente que Falun Dafa es bueno! Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". Seguí repitiendo esas palabras. Me levanté lentamente 15 minutos después. Primero levanté los brazos, luego estiré las piernas y la espalda. Y estaba bien".

Sonreí: "¿De verdad te lo crees ahora? El Maestro te protegió. Deberías renunciar al PCCh".

Finalmente despertó seis meses después de mi primera visita y renunció al PCCh. Ahora tiene 86 años y goza de buena salud y ánimo.

Había otros cuatro secretarios del partido en mi unidad de trabajo. Se negaron a escuchar y continuaron siguiendo al PCCh; todos murieron hace unos años. Tenían 51 y 57 años, y dos rondaban los 70.