(Minghui.org) Después de que el Partido Comunista Chino (PCCh) iniciara la persecución contra Falun Dafa el 20 de julio de 1999,l Chen (seudónimo), vicesecretario del Comité de Asuntos Políticos y Jurídicos de mi ciudad se convirtió en jefe de la Oficina 610. Ocupó el cargo hasta 2012. Durante su mandato, siguió al PCCh en la brutal persecución contra los practicantes de Falun Dafa y cometió muchos actos atroces.

Cuando coordiné con otro practicante la tarea de generar conciencia sobre Falun Dafa y la persecución en 2016, vimos a Chen caminando por el paseo peatonal de su barrio. Llevaba auriculares y estaba escuchando algo.

Con la compasión de Dafa, le saludamos sinceramente y le pregunté: "¿Cómo te encuentras?". Respondió: "Algo pasa, pero está bien, me pondré mejor". La gente nos dijo que le habían diagnosticado cáncer de páncreas.

Sabíamos que sólo Dafa podía salvarlo, así que decidimos que la próxima vez que lo viéramos, le explicaríamos qué es Dafa y le ofreceríamos ayuda para renunciar al PCCh y a sus organizaciones juveniles. Comprendimos que su salvación dependía de si se daba cuenta de que había cometido crímenes y comprendía de verdad que Falun Dafa es bueno.

La siguiente vez que vimos a Chen nos saludó y nos dijo que llevaba una vida idílica, dando a entender que ya no trabajaba en la Oficina 610. Me felicitó por mi buena salud y mi espíritu. Le dije que era porque nunca había dejado de practicar Falun Dafa. Le expliqué qué es Falun Dafa y aproveché la oportunidad para ayudarle a renunciar a las organizaciones del PCCh.

La tercera vez que nos encontramos con  Chen fue este octubre, y tenía buen aspecto. Se mostró amable y me elogió por estar de buen humor y no aparentar mi edad, que rondaba los 70 años. Me preguntó cómo estaban mi marido y mis hijos, y le dije que bien. Juntó las manos y nos deseó buena salud y longevidad.

Recientemente, un amigo de Chen me dijo que se había dado cuenta de que, en más de 10 años de interacción con los practicantes de Falun Dafa, había descubierto que eran realmente diferentes de la mayoría de la gente: eran generosos y amables, decentes, rectos y corteses. Les admiraba por mantenerse firmes en su creencia, explicar la verdad a quienes les perseguían y arriesgar su propia seguridad en medio de la persecución para informar al público de la situación. Dijo que los practicantes de Falun Dafa son un grupo de personas altruistas con una moral elevada.

Dafa es compasivo. El Shifu es compasivo. No importa que malas acciones uno haya cometido, mientras uno se arrepienta, corrija sus errores y haga buenas acciones, uno puede ser salvado por Dafa y tener un futuro brillante, ya que los dioses lo bendecirán.

Espero que aquellos que siguieron al PCCh y persiguieron a Falun Dafa aprovechen la fugaz oportunidad de comprender la verdad y despierten lo antes posible, y no sean considerados responsables de los crímenes del PCCh.