(Minghui.org) Para mantener su control sobre la gente y evitar que conozcan la verdad sobre Falun Dafa, el Partido Comunista Chino (PCCh) asignó personal para monitorear a la gente en cada aldea de nuestra área, día y noche. Querían impedir que los practicantes de Dafa distribuyeran materiales informativos para que la gente supiera sobre Falun Dafa y la persecución. Intentan arrestar a los practicantes que distribuyen materiales.
Una tarde, mientras estaba en un pueblo pequeño y tranquilo, sin alumbrado público, de repente una luz deslumbrante me iluminó. Un hombre gritó: "¿Qué estás haciendo?". Rápidamente, me di la vuelta y me fui, pero él me persiguió mientras gritaba. Los perros del pueblo empezaron a ladrar. Parecía que mucha gente salió pronto para ver de qué se trataba el alboroto.
Tenía miedo porque todavía tenía materiales conmigo. Me di cuenta de que esto no estaba bien. Me di cuenta de que estaba haciendo lo más correcto y que los materiales que tenía ayudaban a la gente a aprender sobre Falun Dafa. Tengo la protección de Shifu y nadie puede hacerme daño. El hombre no estaba aquí para arrestarme. Shifu hizo arreglos para que él aprendiera la verdad sobre Dafa y recibiera la salvación. Debo hablar con él.
Mi miedo desapareció y caminé hacia él. Se quedó paralizado, mirándome con su luz brillando en mi rostro. Bloqueé la luz con mi mano y le miré. Le dije suavemente: “Señor, no es necesario que me fulmine con la luz. Yo no soy una mala persona. Estoy aquí para entregar materiales para ayudar a las personas a recibir la salvación”.
Me preguntó qué materiales tenía, así que le dije: "Materiales de Falun Dafa". Envié pensamientos rectos para eliminar las sustancias malas que le controlaban y, al mismo tiempo, mantuve la calma. Le pregunté: “Señor, ¿parezco una mala persona?”.
Él respondió: “¡No! Pareces una buena persona”.
Le dije que solía sufrir múltiples enfermedades y vivía una vida desesperada. “Desde que comencé a cultivar Falun Dafa, todas mis enfermedades desaparecieron y me volví saludable. Mi vida ahora está llena de esperanza”.
Continué: “Falun Dafa se ha extendido a más de 100 países y regiones alrededor de todo el mundo. Mucha gente se ha beneficiado de la práctica de Falun Dafa. Todos se oponen y condenan la persecución del PCCh a los practicantes de Dafa. El Shifu de Dafa requiere que los practicantes sean buenas personas y traten a todos con compasión y tolerancia. Debemos contarle a la gente sobre Dafa y la persecución, ayudarles a comprender que Dafa es bueno y que Falun Dafa está aquí para salvar vidas".
“Hoy estoy aquí para entregarles materiales a ustedes y a sus vecinos para ayudarles a conocer la verdad, para que puedan recibir la salvación de Dafa. Por favor, no se opongan a Dafa. Por favor, crean que Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno”.
Me dijo que entendía y me pidió que me sentara con él. Le di algunos materiales y le conté más sobre Dafa. También expliqué por qué es necesario renunciar al PCCh y sus organizaciones juveniles. Aceptó los materiales, renunció al Partido y dijo con sinceridad: “Ya es muy tarde. ¡Por favor, ven a mi casa a tomar una taza de té! ”.
“Es muy amable de su parte”, respondí: “pero todavía tengo materiales que entregar. Una vez que termine aquí, todavía tengo que ir a otras aldeas [para entregar materiales]”.
Todavía trató de detenerme, diciendo que era muy tarde, así que le dije: “Señor, no puedo sólo ayudar a los de su aldea e ignorar a los de otras aldeas. Mi Shifu nos enseñó a salvar a todas las personas”. Sonrió con admiración y preguntó cuándo podríamos volver a encontrarnos. Respondí: "Shifu hará los arreglos para que nos reunamos cuando llegue el momento".
Cuando me iba, me recordó repetidamente que prestara atención a mi seguridad. Me dijo qué pueblos tenían un seguimiento estricto y cuáles eran menos estrictos. También me dijo cómo llegar sano y salvo al siguiente pueblo. Me acompañó hasta la salida del pueblo y me señaló un camino seguro hacia el siguiente pueblo.
Terminé de entregar los materiales en ese pueblo y lo vi todavía de pie en la entrada del pueblo anterior. Dije en mi mente: "¡Por favor, agradece al compasivo Shifu por organizarnos para encontrarnos, para que recibas la salvación de Dafa y elijas un futuro brillante para ti!".
Limpiar las juntas de propaganda del PCCh
Un año, el PCCh instaló grandes tableros de anuncios en cada ciudad, municipio y aldea de nuestra zona. Colocaron carteles que difamaban a Falun Dafa y también instalaron cámaras de vigilancia frente a cada cartel.
Para evitar que la propaganda difamatoria envenenara la mente de la gente, decidí quitar los carteles de los tableros. Una noche, me acerqué a un tablón de anuncios al lado de una tienda. Se había acumulado mucha nieve frente a él y no sabía que había una zanja profunda debajo de la nieve. Caí en la zanja haciendo un fuerte ruido.
La nieve cayó encima de mí y me cubrió. Al escuchar el ruido, la gente en la tienda salió a comprobar, pero no pudieron ver a nadie. Salí de la zanja después de que volvieron a entrar. Mientras limpiaba los carteles, el silbido del viento cubrió el sonido de mi limpieza del tablero y nadie volvió a salir a comprobarlo.
Esa noche caminé por diez pueblos y quité todos los carteles de propaganda de los tableros. Más tarde, el personal del PCCh revisó las cámaras de vigilancia, tratando de descubrir quién lo había hecho. Sin embargo, las grabaciones no eran claras y no podían determinar quién era. El Compasivo Shifu me protegió.
¡Gracias Shifu por su gracia salvadora!
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Categoría: Aclarando la verdad