(Minghui.org) Soy el agente de compras de nuestra empresa, y a menudo tengo dificultades para comprar mercancías. Afortunadamente, he encontrado una manera de resolver el problema, y es seguir las enseñanzas de Shifu.
La compra de bienes es parte de mi responsabilidad en el trabajo, y a menudo me encuentro con problemas al tratar con los proveedores. Por ejemplo, los proveedores pueden haber entregado un pedido equivocado, o la calidad de sus mercancías no cumple nuestros requisitos. No me dejaban seleccionar la mercancía de antemano, diciendo que si me llevaba toda la mercancía buena, no les quedaría nada que vender. Además, suben sus precios con frecuencia, lo que a su vez aumenta nuestros costes y afecta a nuestras ventas.
A pesar de todo, acepto sus exigencias poco razonables. Por ejemplo, yo quería que el color de la mercancía fuera negro, pero me conformaba con el azul si eso era lo que me daban. Si necesitaba uno fino y me obligaban a llevar uno grueso, también lo aceptaba. Les compraba la mercancía incluso cuando subían el precio un 50%. Cuando no me dejaban subir a seleccionar la mercancía, bajaba a comprar lo que hubiera. Anteponía las necesidades de los proveedores, ¡y dejaba que ellos se beneficiaran!
Un día, la dueña de una tienda me dijo: "Me parece extraño que no te enfades cuando te pongo problemas. ¿Por qué?".
Sonreí y le respondí desde la perspectiva de un practicante de Dafa: "¿Por qué iba a enfadarme? Me estás ayudando a deshacerme del yeli y me estás dando virtud. No podría estar más feliz". Y compartí con ella la enseñanza de Shifu:
Shifu nos enseñó:
"Cuando otra persona se aprovecha de ti, él o ella te dará de. Al mismo tiempo que esa persona se está aprovechando de ti, tú de hecho estás soportando dificultades, y tu ye será eliminado, lo que a su vez produce de" (Exponiendo el Fa en el Fahui de Houston).
Tanto ella como su esposo me miraron estupefactos. "¿Te estamos dando virtud y ayudándote a eliminar el yeli?", preguntó ella. Comprendieron el concepto porque son budistas.
La mujer quería operarse para librarse del dolor de rodilla, pero su esposo no quería. Preguntaron si Dafa podía ayudarles, así que le enseñé a recitar: "¡Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno!".
Más tarde, contó que la situación en el trabajo y en su vida había cambiado radicalmente. Ya no le molestaban sus problemas anteriores. Dijo: "Mis rodillas hicieron un par de ruidos fuertes una mañana y me despertaron, y se sintieron mucho mejor después de levantarme. Si no me hubiera levantado de la cama esa mañana, ¡probablemente Shifu me habría curado las rodillas!". Dijo que su esposo dejó de maltratarla verbalmente después de que ella empezara a recitar diariamente: "¡Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno!".
Le sugerí que leyera Zhuan Falun, el libro principal de Falun Dafa, para comprender realmente la práctica y volver a su verdadero ser. Así, consiguió un ejemplar de Zhuan Falun.
A partir de esta experiencia, descubrí cómo manejar el yeli y resolver los problemas. Aprendí a establecer buenos canales de comunicación con los proveedores, y ya no me centro en buscar el interés propio. Todo lo que tengo que hacer es seguir las enseñanzas de Shifu, buscar en mi interior, ¡y asimilarme a los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia!
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