Realmente comencé a cultivarme después de que cambié mis nociones

(Minghui.org) Después de que fui arrestada en 2001, entendí que sólo leyendo las enseñanzas (Fa) y dejando de lado mis nociones humanas, podría salir de las tribulaciones. Recordé un artículo de intercambio de experiencias publicado en el sitio web Minghui: Un practicante fue arrestado, pero pudo encontrar la llave de la entrada de la estación de policía y pudo escapar esa noche.

Cuando la policía se fue a dormir, comencé a buscar la llave, pensando que podría escapar como lo hizo ese practicante. Un policía entró y preguntó: "¿Qué quieres?". Tuve que abandonar la idea de escapar. Me di cuenta: “Simplemente seguir lo que hicieron otras personas no sería suficiente”. Más tarde me llevaron a un centro de detención. Lamenté no haber atesorado Dafa y todo el tiempo que perdí, cuando podría haber leído el Fa.

Afortunadamente, una practicante que era mi compañera de celda pudo recitar el libro completo de Hong Yin. La seguí mientras recitaba y lo memoricé. Pude recitar Hong Yin. Como resultado, mis pensamientos rectos se fortalecieron y mi mente se volvió mucho más clara.

Pensaba constantemente en cómo salir del centro de detención. Una noche soñé que se abrían las pequeñas ventanas de nuestra celda. Entonces, alguien salió, seguido por muchas personas que salieron. Cuando miré por la ventana, era tan pequeña que sólo se podía sacar un brazo o una pierna. Me pregunté: “¿Cómo pudieron salir por esa pequeña abertura?” Recordé un cuadro religioso occidental en el que el ángel le dice a María que concibió a Jesús. La idea principal era que no se debían utilizar los conocimientos y las nociones de la gente corriente para pensar sobre las cosas.

Me di cuenta de que Shifu me estaba dando una pista para dejar de lado mis nociones humanas y usar los principios de Dafa para superar esta tribulación. Después de levantarme por la mañana, una joven practicante, que era mi compañera de celda, me susurró: "Tengo los nuevos artículos de Shifu". Dije emocionada: "¡Quiero leerlos!" La celda tenía un dispositivo de vigilancia y la policía registraba las celdas con frecuencia. Pero cuando sostuve un grueso rollo de los nuevos artículos de Shifu, no me asusté. Agradecí a Shifu por permitir que otra practicante me pasara sus nuevos artículos. Sabía que él me estaba ayudando a tener más Fa en mi mente y me estaba mostrando cómo recorrer mi camino de cultivación sin usar nociones humanas.

Cada vez que nos decían que nos sentáramos, yo recitaba los nuevos artículos de Shifu. Había 19 artículos en total, que fueron escritos en servilletas por practicantes que ya abandonaron el centro de detención. Cuando hojeé las páginas, no emitieron ningún sonido. También fueron muy fáciles de conservar. ¡Le agradecí a Shifu por sus minuciosos arreglos! Gracias a las practicantes, a quienes nunca conocí, por dejar los preciosos artículos nuevos de Shifu.

Me dediqué a memorizar y recitar estos artículos.

Shifu dijo:

“… durante los años de [su] práctica de cultivación, no sólo que he sobrellevado una gran cantidad [de cosas] para ustedes, sino que también, entre tanto, les he dado insinuaciones constantemente para su mejoramiento, he cuidado de su seguridad y he saldado las deudas que ustedes deben en diferentes niveles para que puedan alcanzar la perfección…”. (Eliminen la interferencia, Escrituras esenciales para mayor avance II

Cada vez que recitaba este pasaje, las otras practicantes y yo siempre nos conmovíamos hasta las lágrimas. Me sentí agradecida por la benévola gracia salvadora de Shifu y también lamenté no haberme cultivado diligentemente.

En julio de 2001 me trasladaron a un campo de trabajo forzado, donde estuve retenida durante dos años. Las conferencias de Shifu me ayudaron a recordar que era una practicante. En el campo de trabajo, recibí uno más de los nuevos artículos de Shifu, titulado El efecto de los pensamientos rectos . Cuando los guardias no estaban cerca, lo recitaba pasaje por pasaje, lo que me ayudó a obtener una comprensión clara de los problemas que encontré en la cultivación de la rectificación del Fa. A medida que mi comprensión del Fa se profundizó, ya no quise soportar pasivamente la persecución y comencé una huelga de hambre. Dos semanas después, en diciembre de 2001, las guardias del campo de trabajo me llevaron a casa.

Me iluminé al hecho de que no importa qué tipo de tribulación nos encontremos, Shifu ha hecho arreglos para que pasemos la prueba. No importa si estuve encarcelada o en otro lugar, Shifu está a mi lado y me ilumina con compasión. Pero si no tuviera una comprensión suficientemente profunda del Fa, no entendería su sugerencia.

Mi misión es salvar a la gente

Tomé acciones legales para procesar al exlíder del Partido Comunista Chino (PCCh), Jiang Zemin, por perseguir a Falun Dafa y sus practicantes, al presentar una denuncia ante la Procuraduría Suprema y la Corte Suprema de mi área. Después de eso, la gente de la División de Seguridad Nacional hizo que los agentes de la policía local me arrestaran y me llevaran a un centro de detención. Me negué a cooperar. Después de hacer una huelga de hambre me enviaron a casa.

Aunque resistí la persecución, tenía mucho miedo. Tenía miedo de que me detuvieran ilegalmente otra vez. Entonces si tuviera que salir de casa, no serviría. Cuando no sabía qué hacer, decidí quedarme en casa para leer el Fa.

Al principio, estudiaba el Fa sólo para estudiar el Fa. Después de leer una Lección, todavía no sabía de qué estaba hablando Shifu. Continué y seguí leyendo. Cuando leí la Tercera Lección de Zhuan Falun mi mente dejó de divagar. Cuando estaba en la Sexta Lección, disfrutaba leyendo. Al leer intensamente el Fa todos los días, mi miedo a ser arrestada desapareció.

Una practicante del campo me visitó y me contó cómo aclaró los hechos a los policías locales y habló sobre llevar a Jiang ante la justicia. Me sentí tan inspirada que sentí que Shifu la envió para animarme. Comencé a aclarar los hechos a los agentes de la policía local.

Primero fui a hablar con los que me arrestaron. Inesperadamente, dijeron que admiraban a los practicantes que no cooperaban con ellos. Dijeron: “Lo hiciste muy bien. De lo contrario, habrías sido sentenciada”. Tampoco estaban en contra de que les aclarara la verdad. Seguían explicando que seguían órdenes para ganarse la vida, pero no estaban de acuerdo con la persecución. Conocí a más agentes de policía y ellos también escucharon de mí la verdad sobre Dafa.

Al final, el director y el subdirector de la estación de policía leyeron nuestro material informativo. El director me dijo: “Falun Dafa es bueno, sigue adelante y practica. Pero, por favor, cuide su propia seguridad y no resulte herida”.

Un subdirector que me arrestó antes vio las fotos en el sitio web Minghui de los practicantes locales que habían sido perseguidos y quedó impactado por cómo mantenían sus creencias. Él dijo: "Ve a casa y practica". Cuando otro subdirector vio a personas comunes y corrientes arrestadas por pelear entre sí, dijo: “¡Esto es la ausencia de Verdad-Benevolencia-Tolerancia!”.

Aclaré los hechos a ocho policías de esta estación de policía de forma individual. Le expliqué por qué era necesario renunciar al PCCh para garantizar su seguridad. Cada vez que terminaba de hablar, siempre preguntaba: "¿Te parece bien si te ayudo a renunciar al Partido?". Algunos dijeron: "¡Claro!" Otros dijeron: "¡Genial!" Algunos dijeron: “¡Falun Dafa es bueno! ¡Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno! Al final, todos renunciaron al PCCh y a sus organizaciones afiliadas.

En el verano de 2016, un subdirector me dijo que la División de Seguridad Nacional quería que fuera a la procuraduría para atender una investigación pendiente. Dije que no iría. Él dijo: “Ya que te lo he dicho, mi tarea está cumplida. Si vas o no, depende de ti. Si me envía a la División de Seguridad Nacional, tendré que volver a llamar a tu puerta. Simplemente tomaré una foto frente a tu entrada para mostrar que vine aquí”. También me dijo: “Una investigación pendiente significa que el caso seguirá adelante. Si tienes que ir a la procuraduría, tendrás que ir tú sola, porque no te llevaremos”.

Lo que intentaba decirme era que no debería ir a la estación de policía por la investigación pendiente y que la policía local no se involucraría.

Después de que se fue, pensé que ir a la estación de policía para aclarar los hechos no era suficiente, también debía ir a la Suboficina de Policía para hablar con los oficiales de la División de Seguridad Nacional. Luego fui allí a buscar al líder del equipo. Inesperadamente, estaba muy asustado y temeroso de quedar expuesto. Sólo habló conmigo por teléfono y se negó a reunirse conmigo.

Más tarde envió a un joven policía a hablar conmigo. Le conté sobre La farsa de la Autoinmolación de la plaza Tiananmen y cómo fue orquestado por el PCCh con el propósito de incriminar a los practicantes de Falun Dafa, para justificar la brutal persecución. También le hablé de la cruel persecución a los practicantes en los campos de trabajos forzados y en las prisiones, y de cómo Falun Dafa es una hermosa enseñanza de alto nivel.

Me preguntó en voz baja: “¿Por qué no te vas a los Estados Unidos? Puedes practicar libremente allí”. Dije: “Debido a que tanta gente en China todavía no sabe la verdad sobre Falun Dafa, ¿por qué debería irme? Si tuviera que hacer eso, ¿quién te diría la verdad? Él sonrió, dijo que tenía otras cosas que hacer y se fue.

Después de regresar a casa, escribí una breve carta de aclaración de la verdad a los dos líderes del equipo de la División de Seguridad Nacional, con la verdadera esperanza de que no volvieran a participar en la persecución a Falun Dafa.

En la primavera de 2018, el subdirector me dijo: “El líder del equipo de la División de Seguridad Nacional fue transferido. Su caso está cerrado”.

Pensar desde el punto de vista de otras personas

A menudo tenía en mente las palabras “Ponerme en el lugar de los demás”. Vi que tenía cierto egoísmo y que no era considerada con los demás. Esto necesitaba ser rectificado para poder aclarar la verdad y salvar a la gente.

Con el inicio de la pandemia de COVID, los residentes de nuestro edificio se sometieron a pruebas de amplificación de ácido nucleico. Cuando me pincharon la garganta con el bastoncillo de algodón, sentí arcadas. Sin embargo, para adaptarme a la sociedad común, seguí adelante y lo hice. El personal era un hombre joven. Él dijo: "¿Puedes abrir la boca durante cinco segundos?" Respondí: "Ojalá pudiera".

De hecho, sólo pude mantenerla abierta durante un segundo. Tenía mucho dolor y quería vomitar. Pero le dije: "¡Buen trabajo!". Después de realizar la prueba, él estaba muy cansado y le dolía la parte baja de la espalda.

Dijo avergonzado: "¡No te preocupes, estoy bien!" Su colega preguntó: "¿Qué pasa?"

Miré hacia adentro y me pregunté por qué vi esto. Su comportamiento era mi espejo. Parecía que en mi vida cotidiana normalmente actuaba como si entendiera a las personas, cuando en realidad todo era desde mi propio punto de vista egoísta, en lugar de pensar verdaderamente por los demás. Por ejemplo, cuando escuché a un practicante decir que la máquina para producir materiales se rompió, en lugar de encontrar rápidamente una manera de arreglarla, pensé: "Necesita iluminarse y mirar hacia adentro". No sentí simpatía ni compasión.

Cuando miro hacia adentro y dejo ir un poco de egoísmo, Shifu me ayuda a conectarme con personas predestinadas.

Una vez le aclaré los hechos a un hombre de mediana edad en el autobús. Dijo: “Los líderes del PCCh piensan todo el día en cómo malversar, comer, beber, prostituirse y apostar. ¿A quién le importa la gente común?

Sentí que la razón por la que el hombre decía eso era porque se enfrentaba constantemente a la injusticia en la sociedad y en el trabajo. Se sentía insatisfecho e impotente dentro de una sociedad gobernada por el PCCh. Le dije que la causa fundamental de la corrupción social era el malvado PCCh. Le dije: “Cuando vayas al hospital para recibir tratamiento o te sometan a una cirugía, tendrás un buen resultado si eres una buena persona. Con el mismo estilo de vida, alguien puede vivir hasta los 99 años, pero otra persona sólo puede vivir hasta los 79 años. Esto lo determina el destino. Para ser una buena persona, recuerda Verdad-Benevolencia-Tolerancia y sé amable. Sigue este mandato celestial y tu vida se prolongará. Entonces ser una buena persona es para uno mismo”.

Él asintió con la cabeza en señal de acuerdo. No sólo dejó ir su negatividad, sino que comenzó a escucharme atentamente mientras hablaba sobre Dafa. Dijo que se unió al Partido cuando estaba en el ejército y aceptó renunciar al Partido. Cuando estaba a punto de bajarme del autobús, me dijo amablemente: “¡Gracias! ¡Cuidese!"

Desde que comencé a prestar atención a ser considerada con los demás y a ponerme siempre en su lugar, me di cuenta de que mientras aclaraba la verdad, me resultaba más fácil entenderlos.

De las conferencias recientes de Shifu, llegué a comprender que estábamos en transición hacia la rectificación del Fa del mundo humano. Mientras aclaraba la verdad, me di cuenta de que el lado conocedor de la gente ansiosamente quiere saber la verdad y ser salvada por Dafa. Como practicante, estudiar bien el Fa y eliminar mis apegos son de suma importancia para salvar a la gente.

La primavera pasada, debido a los cierres pandémicos, el transporte público dejó de funcionar. A veces no había peatones en las calles, y sólo puestos de prevención de epidemias, uno tras otro, ondeando la bandera roja del Partido. Fui a visitar seis puestos de prevención de epidemias y hablé con las personas de servicio. Todos ellos aceptaron renunciar al partido.

Descubrí que ninguno de ellos era miembro del Partido, a pesar de que llevaban chalecos rojos con el logo del Partido y brazaletes rojos. Todos dijeron al unísono: "¡Esto es para engañar al PCCh!". Encontraron este trabajo a través de sus contactos y solo vinieron por dinero. En un puesto en la entrada del hospital que recibía pacientes de COVID, después de que el guardia de turno entendiera la relación entre el compromiso con el PCCh y la ética, quiso escuchar más sobre Dafa y dijo: "Si tienes tiempo, por favor ven". ¡Vuelve y cuéntanos más!

¡Gracias Shifu por cuidarme siempre!