​Superando un calvario de enfermedad

(Minghui.org) Ying es una practicante de Falun Dafa de 69 años en nuestro grupo de estudio del Fa. Desde que empezó a practicar Falun Dafa en 1997, ha estado haciendo lo que debe hacer un practicante: estudiar el Fa, enviar pensamientos rectos y aclarar la verdad sobre la persecución a Falun Dafa a la gente.

Ying se sintió mal la noche del 16 de julio y vino a verme a la mañana siguiente. No tenía buen aspecto, ya que sus labios y su boca se habían vuelto de color morado oscuro y tenía manchas negras y moradas por todo el cuerpo. Tenía muchos otros síntomas. Le dolía el estómago, tenía sangre en la orina, no podía levantar la mano derecha y se sentía agotada e incómoda. Su marido se alarmó por los síntomas y la instó a ir al hospital de inmediato.

Le pregunté a Ying por qué le había comunicado sus síntomas a su marido. Ella pensó que podría superar el yeli de enfermedad con pensamientos rectos, y que así su familia sería testigo del milagro de Dafa. Más tarde, se dio cuenta de que no debería haber dicho nada a su familia. La consolé y le dije que no se preocupara por lo que ya había sucedido y que resolveríamos juntas los obstáculos.

Ying y yo nos calmamos y estudiamos el Fa, enviamos pensamientos rectos y compartimos nuestras experiencias de cultivación. Ella se sintió mejor después de eso y volvió a su casa. Fui a ver cómo estaba alrededor de las 6 de la tarde, pero no había nadie. Según su vecina, Ying estaba muy enferma y su hijo la había llevado al hospital.

Informé a otros practicantes de nuestro grupo de estudio sobre el estado de Ying. Entonces enviamos pensamientos rectos. Creíamos que ella podría superar esta tribulación y validar Dafa con sus pensamientos y acciones rectas.

Fue una noche dramática para la familia de Ying en el hospital. Resultó que su hijo se enteró por su padre de los graves síntomas de Ying. Se apresuró a llegar a casa e insistió en llevarla al hospital. Ying aceptó finalmente someterse a una revisión, pero no quiso quedarse en el hospital. Sin embargo, su hijo pagó los honorarios del hospital para que se quedara en él.

Tras examinar a Ying, el médico pidió a su familia que la llevara rápidamente al Hospital Provincial de Shijiazhuang. Dijo que las consecuencias de cualquier retraso serían desastrosas. Mientras tanto, la pantalla del ordenador del hospital mostraba: "paciente en estado crítico en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI)". Su hijo se conmocionó y llamó de inmediato al resto de la familia. Muchos de ellos corrieron al hospital esa noche. Pensaban obligarla a ir al Hospital Provincial en cuanto estuvieran listos los resultados de las pruebas.

Sin embargo, Ying sabía que no estaba realmente enferma y empezó a pensar en un plan de escape. Pidió salir de la habitación para tomar un poco de aire fresco y abandonó el hospital. Sin embargo, su nuera no tardó en alcanzarla. Sus familiares la reprendieron por no cooperar en el tratamiento.

Ying sabía claramente que no estaba enferma y que no quería ser una paciente en el hospital. Decida se marchó de nuevo y volvió a casa. Sus familiares la siguieron poco después y se quejaron de su comportamiento.

Ying me dijo que esa noche no se comportó bien. Su actitud fue estrepitosa con sus parientes después de que estos hicieran algunos malos comentarios. La consolé diciéndole que tendría oportunidades de hacerlo mejor cuando los volviera a ver. Me pidió que fuera a su casa al día siguiente para poder aclarar los hechos a sus familiares.

Los tres hermanos menores de Ying y sus esposas fueron a su casa al día siguiente e insistieron en que la examinara un médico de nuevo. Juntas, Ying y yo explicamos a los familiares la realidad de Falun Dafa y aclaramos sus malentendidos. Ying les dijo: "Shifu nunca dijo que la gente no debía tomar medicamentos. Aprendí de las conferencias del Maestro Li que todo tipo de desastres, incluyendo las enfermedades, se deben a las cosas malas que la gente hizo en vidas anteriores, incluyendo el pecado de herir a otros. Estar enfermo es pagar esos pecados. Creo en lo que dice el Maestro Li, así que estoy dispuesta a soportar las consecuencias de mis pecados pasados. Además, el Maestro ha soportado mucho más por mí. ¿Pueden ver que me siento muy bien ahora?".

Sus parientes finalmente entendieron nuestros puntos después de que Ying y yo habláramos calmadamente con ellos. Uno de los hermanos de Ying todavía quería que le hicieran un chequeo para asegurarse de que estaba bien. Le expliqué: "Ya ves que ella está normal ahora, ¿por qué insistes en que se haga un chequeo? Como ya ha tomado la decisión de no ir al hospital y todos vosotros le desean lo mejor, hay una forma de ayudarla". Estaban interesados en saber cómo podían ayudar. Les dije: "Recitemos 'Falun Dafa es bueno'. Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". Nos beneficiará a todos para formar un campo de energía positiva". Ellos respondieron: "¡Está bien!".

Con los pensamientos rectos de Ying, la tribulación de su enfermedad se rectificó y su orina ya no contenía sangre. A través de este incidente, sus familiares fueron testigos del poder maravilloso de Falun Dafa.