​Reconociendo mi apego a escuchar conferencias que socavan el Fa

(Minghui.org) Dar conferencias que socavan el Fa es un asunto muy serio. Los practicantes que lo han hecho o que han dado oportunidades a tales conferencistas deben minimizar el impacto y eliminar abiertamente sus apegos. Esta es la única manera de romper con las pruebas dispuestas por las viejas fuerzas, y seguir al Maestro a casa. Yo fui uno de los practicantes que dio audiencia a los oradores que socavan el Fa.

Alguien de nuestra zona invitó a varias personas de Qinhuangdao (una ciudad de la provincia de Hebei) a tener un "intercambio de experiencias" en la primavera de 2012. Alguien me dijo que el ambiente de cultivación de ellos era muy bueno y que debíamos ir a escucharlos. Fui y me di cuenta de que no estaban compartiendo sus experiencias en absoluto. En cambio, uno de los invitados dio un discurso. Se jactó de que en su zona de Qinhuangdao había muy poca interferencia y pocos actos de persecución. Me dio envidia escuchar que sus circunstancias eran mejores que las nuestras, ya que la persecución en nuestra región era bastante severa, con más de 200 practicantes enviados a campos de trabajo entre 1999 y 2012.

Más tarde me di cuenta de que, en lugar de ayudarnos como decía el orador, su conferencia tuvo una mala influencia y causó disturbios entre nuestros practicantes locales. Lo que ocurrió después de su conferencia fue un buen ejemplo. La persona que convocó a él y a sus compañeros a visitarnos los invitó al campo para tener otra "discusión" por la tarde después de la conferencia de la mañana. Yo los seguí e incluso hice que el coordinador del campo reuniera a los practicantes para que escucharan la conferencia, lo que también causó interferencias en la cultivación de los practicantes del campo.

De camino a casa esa noche, me di cuenta de que no era correcto y de que el mal se había aprovechado de nuestras brechas.

Al día siguiente, otro practicante local me dijo que los de Qinhuangdao se dirigían a otra zona de nuestra ciudad para tener una "discusión". Le dije que no debíamos dejar que esto continuara. Inmediatamente notifiqué al coordinador de esa zona que no debían dejar que los practicantes escucharan tal "conferencia". Al tercer día, los practicantes locales tuvieron una discusión al respecto y todos estuvieron de acuerdo en que había que poner fin a esto. Esas personas se marcharon entonces.

Han pasado diez años desde aquel incidente. Yo solo sabía que estaba mal, pero no reconocí la gravedad de dar conferencias que socavan el Fa. Desde entonces he sido detenido por la policía y la Oficina 610 muchas veces. No me di cuenta realmente del daño y del peligro hasta las recientes insinuaciones del Maestro y la publicación del artículo "El pecado de socavar el Fa", así como por los recordatorios de los practicantes locales.

Tras el incidente de la primavera de 2012, fui arrestado en octubre de ese año y recluido en un centro de lavado de cerebro durante 50 días. Aunque no pudieron "transformarme", esto tuvo un efecto negativo en mi familia y amigos; como dice el Maestro:

"Los discípulos del Fa sufren la tribulación demoníaca
Los que son arruinados son las multitudes de seres".
("Vida tras vida naciendo por ello", Hong Yin III)

Fui arrestado de nuevo en 2017. Después de salir en libertad bajo fianza, me vi obligado a salir de casa para esconderme de la policía. Durante la festividad del Año Nuevo chino, en febrero de 2019, me empezó a doler de repente la pierna derecha sin motivo. Enviar pensamientos rectos a veces ayudaba, pero no eliminaba completamente el dolor. Luego, me lesioné la pierna izquierda en un accidente de coche el pasado mes de abril y aún no me he recuperado. Encontré muchos de mis apegos y pensé que tal vez se debía a mi yeli de vidas anteriores.

Durante este periodo, personas de la Oficina 610 local y de nuestra oficina de gestión de calles vinieron a mi casa dos veces para intentar "transformarme". Con el fortalecimiento del Maestro, les aclaré la verdad.

Mirando hacia atrás, mis tribulaciones en los últimos diez años fueron principalmente por mi propia irracionalidad y falta de estudio serio del Fa. No fui capaz de considerarme siempre como un practicante. Tenía apego al fanatismo, a la ostentación y a la búsqueda de la novedad. Mi corazón se conmovió cuando escuché al mencionado orador presumir de su entorno local, lo que a su vez alimentó su arrogancia. No solo me perjudiqué a mí mismo, sino que también perjudiqué a nuestros compañeros practicantes locales y consentí a los oradores.

El pecado de socavar el Fa es grave. Necesito afrontar y admitir mis errores abiertamente. Tengo que eliminar mis apegos a salvar la cara y buscar la fama y así poder superar las pruebas.

El Maestro dijo:

“Como tu Shifu, nunca llevé la cuenta de las cosas incorrectas que hiciste en tu cultivación; solo recuerdo las cosas buenas que hiciste y tus logros. Los Dafa dizi atravesaron la cultivación y la incomparablemente malvada persecución, así que son profundamente conscientes de las penalidades en la cultivación, y no fallarán en entender a los estudiantes que bajaron por el camino equivocado. Así que aquí les digo una vez más: todos los estudiantes que cometieron este tipo de errores [de espionaje], desde ahora será mejor que declaren públicamente que están deshaciéndose de esa asquerosa carga y regresando a Dafa. Solo cuando revelen abiertamente todo lo que hicieron mal serán capaces de liberarse de los enredos y las amenazas de los agentes secretos. Y solo cuando revelen abiertamente esas cosas serán capaces de eliminar vuestros apegos y miedos”. (“Pasen la prueba mortal”. Escrituras esenciales para mayor avence III)

“Espero que los estudiantes que bajaron por el mal camino no sigan cometiendo errores. Esta puede ser la última vez que Shifu enseña el Fa a estudiantes como estos. Aprovechen vuestra oportunidad. Incontables dioses los están observando, y los Dafa dizi y yo esperamos vuestro regreso”. (“Pasen la prueba mortal” Escrituras esenciales para mayor avance III)

Utilizaré el Fa para purificar mi mente y compensar las pérdidas y las malas influencias que he causado.

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