(Minghui.org) Vivo en un bungalow que fue construido hace más de 40 años. Hay muchos bungalows en nuestra zona residencial que están a punto de ser derribados. Nadie quiere invertir en una casa que va a ser derribada. Así que mis vecinos y yo nos enfrentamos a muchas dificultades con nuestras casas. Un problema importante es que las tuberías de agua se congelan en invierno.

Hace cuatro años, en torno al Año Nuevo Chino, incluso las tuberías de agua de algunos de los edificios residenciales más grandes de mi zona se congelaron y se quedaron sin agua. En mi barrio de bungalows de una sola planta, excepto mi casa, las tuberías de agua de los vecinos también estaban congeladas.

Eso no era natural ni normal. Quemamos carbón para calentar nuestras casas, no como los edificios de apartamentos que se calientan con tuberías de agua caliente procedentes de una central eléctrica. Yo trabajo 16 horas al día y descanso al día siguiente. Así que mi casa se calienta cada dos días, mientras que las de mis vecinos se calientan todos los días.

El invierno pasado fue el más frío de los últimos años. La temperatura más baja fue de 30 grados bajo cero. Mis vecinos mantenían las estufas de carbón encendidas todos los días para calentarse, pero sus tuberías de agua seguían congeladas. Utilizamos el mismo sistema de agua y vivimos en el mismo tipo de casa. Hace más de 10 años que vivo allí, pero mi tubería de agua nunca se ha congelado, ni siquiera durante el invierno más frío del año pasado.

En cuanto llegaba a casa después del trabajo, mis vecinos venían a buscar agua. Nunca me molesté por ello e incluso los ayudé a cargar agua. Mis vecinos me elogiaban por ser un practicante de Falun Dafa tan bondadoso.

Una mujer de 84 años vive sola en un bungalow porque ella y su nuera están enemistadas. Sus hijos la ayudaban a sacar agua de mi casa cuando su tubería se congelaba en el pasado. El año pasado, uno de sus hijos se fue al extranjero y otro tuvo que cuidar a su suegro enfermo y no pudo venir a ayudarla. Desde entonces, he llevado agua a su casa cada dos días durante el invierno. Su hijo mayor me trajo 5 kilos de huevos para agradecerme. Los rechacé. Su hija menor vino a darme las gracias. Me dijo que yo había hecho el trabajo que deberían hacer los propios hijos de la anciana. Y mi anciana vecina me llamaba "su ángel".

Cada vez que la gente me daba las gracias, yo sonreía y decía que todos somos buenos vecinos. Les digo que mi Maestro -el Maestro Li Hongzhi, fundador de Falun Dafa- me enseñó a ser una buena persona que piensa en las necesidades de los demás antes que en las mías. He aclarado la verdad sobre Dafa y he hablado de la persecución a la vecina de 84 años, a sus hijos y a otros vecinos. Todos ellos estuvieron de acuerdo en renunciar al Partido Comunista Chino (PCCh) y a sus organizaciones juveniles.

Deben estar agradecidos a nuestro gran Maestro. En este mundo caótico, el Maestro Li difunde Dafa, enseña a la gente a cultivarse y los ayuda a volver a su verdadero ser original.

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