(Minghui.org) Vivo en Vietnam. A finales de 2015 me presentaron a Falun Dafa. Antes de empezar a practicar tenía malos hábitos y un cuerpo lleno de enfermedades. Como me atormentaba la enfermedad, mi nieto me sugirió que probara Falun Dafa.

Al principio leí los libros Falun Gong y Escrituras esenciales para mayor avance, e hice los cinco ejercicios de Falun Gong. Cuando leí los libros, me conmovieron mucho las enseñanzas del Maestro Li Hongzhi (el fundador de Falun Dafa). Comprendí que la enfermedad y la infelicidad provienen del yeli.

El Maestro dijo:

“Porque en este universo existe un principio como este: los asuntos entre la gente común, de acuerdo con la Escuela Fo, todos tienen relación causal y predestinada; el nacimiento, el envejecimiento, las enfermedades y la muerte existen simplemente de esta manera entre la gente común. El yeli producido por los actos malos cometidos por el hombre en el pasado es lo que causa las enfermedades o las tribulaciones. Al padecer sufrimientos, uno está justamente pagando deudas del ye, por eso nadie puede cambiarlo casualmente, pues cambiarlo equivale a que las deudas no tienen que ser pagadas; tampoco puede hacerse de manera casual y arbitraria, de otro modo, equivale a hacer cosas malas" ( Primera Lección, Zhuan Falun).

Después de leer ambos libros, mi nieto me entregó Zhuan Falun (el libro principal de Falun Dafa). Las enseñanzas del Maestro respondieron a todas las preguntas que había tenido durante años. Las dos primeras semanas de mi práctica, el Maestro purificó mi cuerpo. Tuve eliminación de yeli durante dos días seguidos. Estaba preocupado, pero mi nieto me dijo que el Maestro estaba purificando mi cuerpo, así que no debía tener miedo. Los síntomas cesaron de repente y todo volvió a la normalidad a primera hora del día siguiente. Estoy muy agradecido al Maestro.

Persistí en leer el Fa, hacer los ejercicios y cultivar mi xinxing. Antes, la relación entre mi esposa y yo era muy tensa. Rara vez hablábamos y teníamos conflictos cada tres días. Ninguno de los dos cedía ni siquiera por la más mínima cosa. Los conflictos de larga duración me hacían sentir miserable y me provocaban todo tipo de dolencias físicas. Incluso me planteé el divorcio.

Después de que empecé a practicar Falun Dafa, todos los conflictos disminuyeron cuando actué de acuerdo con el Fa. No discutía como antes, y siempre consentía a mi esposa. Al cambiar mi temperamento, desaparecieron mis dolores de estómago, de espalda, de columna y de cabeza. Hace años que no toco una pastilla, y siempre estoy lleno de energía. Cuando camino siento como si alguien me empujara.

El Maestro dijo:

“Con la elevación de tu xinxing, a tu cuerpo le ocurre un gran cambio; al elevar tu xinxing está garantizado que ocurre una transformación en la materia de tu cuerpo” (Primera Lección, Zhuan Falun).

El Maestro también abrió mi tianmu. Vi escenas en otra dimensión que aumentaron mi fe en la práctica espiritual. A cambio de la salvación del Maestro, salí a aclarar la verdad y hablé de los beneficios para la salud de la práctica de Falun Dafa a mis amigos, colegas, clientes, etc., y todos lo recibieron muy bien.

En el camino de la cultivación me encontré con muchas pruebas que a veces pasé y a veces no pasé, pero mi firmeza en Falun Dafa siempre ha sido la misma. Mi familia es armoniosa y mi esposa me apoya. Ella siempre me recuerda cuando es el momento de enviar pensamientos rectos. Gracias a que ella me anima a practicar, mi esposa estuvo a salvo y no se lesionó cuando sufrió un accidente de moto.

La urgencia de salvar vidas durante la pandemia

A finales de 2019, la epidemia de COVID estalló en China. Debido a que el Partido Comunista Chino (PCCh) ocultó información sobre el virus, este se extendió a todo el mundo. En ese momento, pocas personas en Vietnam fueron infectadas. Los que enfermaron se recuperaron, por lo que todos pensaron que la medicina vietnamita era buena. Pero yo sabía que la Divinidad estaba dando a los vietnamitas la oportunidad de cambiar su actitud hacia Dafa.

En un sueño, vi que la gente corría presa del pánico. No sabía qué hacer. Cuando miré al cielo, vi que el lado que limitaba con China era negro. Enormes nubes portadoras del virus se dirigían hacia nosotros, así que también empecé a correr. Alguien me paró y me dijo: "Eres un practicante de Falun Dafa. ¿Por qué corres? ¿No se supone que debes salvar a la gente?". Volví a entrar en razón. Muchos vietnamitas seguían creyendo en las mentiras difundidas por el PCCh y no tenían una buena actitud hacia Dafa.

Creer en el Maestro me salvó

Cuando la epidemia empezó a estallar en Ciudad Ho Chi Minh y Binh Duong, algunos de mis compañeros de trabajo se infectaron. La empresa estuvo en cuarentena durante dos días para realizar pruebas y los trabajadores fueron enviados a casa.

Todavía no había aclarado la verdad a todos mis compañeros de trabajo. Aproveché el tiempo libre para reparar la pared de detrás de nuestra casa porque las ratas podían entrar por un agujero. Me enfadé al subir la escalera. Entonces empecé a tener dificultades para mantenerme en pie. De repente, me sentí mareado y enrojecido. Me temblaban las manos y las extremidades. Me faltaba el aire y me costó mucho trabajo aferrarme a la escalera. Mi respiración era superficial y casi me desmayo. Me di cuenta de que era un error que me alterara.

En mi lucha le pedí al Maestro que me salvara; sabía que las viejas fuerzas me perseguían. Me di cuenta de que las viejas fuerzas no podían perseguirme porque soy un discípulo de Dafa. ¿Qué me falta en mi cultivación? Sabía que tenía que rectificarme en el Fa. Todavía tengo la misión de salvar a la gente, y hay muchos que esperan que los salve. Después de un rato, me recuperé gradualmente hasta estar completamente consciente. Bajé inmediatamente la escalera y entré en la casa. Mi mujer vio que estaba pálido y le conté lo sucedido. Si no fuera por la ayuda del Maestro, no habría sobrevivido. Miré hacia dentro y descubrí que aún tenía muchas carencias y apegos que debía eliminar.

Salvar a la gente durante la pandemia

La empresa celebró tres actividades in situ, por lo que llevé tarjetas con las nueve palabras auspiciosas "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno" para distribuirlas entre mis compañeros de trabajo. Aclaré la verdad, empezando por el origen de la pandemia, la verdadera naturaleza del PCCh y la persecución a Falun Dafa. Entregué a mis compañeros las tarjetas y les aconsejé que recitaran las nueve palabras, que muchos dijeron que les protegían. Todos aceptaron las tarjetas. Anteriormente, algunas personas seguían sin querer escuchar y se creían las calumnias del PCCh cuando yo hablaba del Partido y de la pandemia. Esta vez me escucharon y estuvieron de acuerdo.

Como hago los ejercicios por la mañana temprano en mi empresa, todos querían saber más sobre Dafa. Les hablé de los beneficios para la salud y de cómo seguir los principios de Falun Dafa elevaba mi moral. Señalé que la buena salud refuerza el sistema inmunológico y que se puede evitar la pandemia. Uno de los trabajadores siempre me observaba hacer los ejercicios desde lejos. Un día, cuando terminé los ejercicios, me acerqué a él. Me dijo que me había observado muchas veces y que quería hablar conmigo, pero que no quería molestarme.

Me dijo que practicaba la religión Cao Dai, que incluía el culto a Jesús. Le hablé de la pandemia de la época romana que fue el resultado de la persecución del imperio romano a Jesús y sus seguidores. Le dije que mucha gente cree que esta pandemia de COVID es causada por la persecución del PCCh a Falun Gong. Todos los países que interactúan con el PCCh se han visto afectados por ella. Luego hablé de los beneficios para la salud de los cinco ejercicios.

Cuando los otros trabajadores se enteraron de que la lectura de Zhuan Falun además puede mejorar su xinxing, también quisieron intentar practicarlo. Así que, después de la cena, estudié el Fa hasta las 8 de la noche, y luego fui al campus de la empresa para enseñar los ejercicios y descargar las Nueve Conferencias del Maestro. Mis compañeros cargaron las conferencias en sus teléfonos para poder escucharlas. Unos días después dijeron que su salud estaba mejorando y que disfrutaban escuchando las Nueve Conferencias. Cuando terminó la cuarentena de tres días, pudieron ponerse en contacto con los practicantes de Falun Dafa de sus localidades. Esta experiencia me mostró que cuando deseamos salvar a la gente, el Maestro traerá a los seres conscientes hacia nosotros.

Ver una erupción cataclísmica de un volcán en un sueño

Soñé que oía una fuerte explosión. Cuando salí corriendo, vi que una montaña explotaba y que se levantaban cenizas. Los árboles eran arrancados y lanzados al cielo con sus copas vueltas hacia el suelo. Todo el mundo empezó a correr. Les dije que gritaran Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno, pero nadie abrió la boca. Estaban tan aterrorizados que ni siquiera podían hablar. Cuando me desperté, recordé cada detalle de mi sueño y reflexioné si la rectificación del Fa había llegado a su fin. Entonces el Maestro publicó un nuevo Jingwen "Despierten" donde decía:

“La Fa-rectificación de los cuerpos celestes ha terminado, y actualmente se está en la transición hacia la Fa-rectificación del mundo humano” (Despierten).

Tuve otro sueño muy realista. Vi que las viejas fuerzas atrapaban a la gente y la metían en campos de trabajo como si fueran esclavos. Los golpeaban y los trataban con mucha crueldad. Usé mis habilidades sobrenaturales para disolver el mal. En ese momento vi que el cielo ardía en rojo, el suelo temblaba y un volcán escupía lava que cubría todo el mundo. El agua del mar subió arrastrando lava fundida que engulló ciudades enteras. El agua seguía subiendo hasta cubrir una montaña tras otra, y allá donde iba, todo estallaba en llamas. Llevé a mi familia y a mis parientes a correr hacia la montaña más alta, mientras el agua seguía corriendo detrás de mí.

Les pedí a todos que gritaran Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno, pero eran como almas perdidas-indiferentes. Cuando llegué a la montaña más alta, vi que las personas a las que había aclarado la verdad antes ya estaban en ella. Cuando el agua llegó a mis pies, miré al cielo y grité con lágrimas: "¡Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno, Maestro, por favor, detén esto!". Vi una imagen borrosa del Maestro vistiendo una túnica amarilla con muchos otros Budas en el cielo. El Maestro extendió su mano y el agua se retiró inmediatamente. Allí donde el agua retrocedía, se veía un paisaje de desolación en el que no quedaba nada. La gran inundación lo arrasó todo y solo quedaron unos pocos sobrevivientes que conocían la verdad.

A través de esta visión, quiero decir a los practicantes que sean más diligentes y salven más vidas. Los que escuchan la verdad son los que se salvarán y sobrevivirán.

Doy las gracias al Maestro por haberme salvado. Gracias a los practicantes por escuchar lo que he compartido. Si hay algo inapropiado, por favor corríjanme.

Todo el contenido publicado en este sitio web tiene derecho de autor y pertenece a Minghui.org. Minghui realizará compilaciones de su contenido online de forma regular y/o en ocasiones especiales.