(Minghui.org) Nací a principios de la década de los cincuenta. En la escuela me adoctrinaron con la educación atea del PCCh (Partido Comunista Chino). No aceptaba nada que tuviera que ver con la espiritualidad o las creencias religiosas. La campaña "Rompiendo los cuatro viejos" durante la Revolución Cultural reforzó mi ateísmo. Cuando una colega me habló de Falun Dafa en 1996, le dije que no me hablara de esas cosas porque no creía en ellas. Le dije que era miembro del PCCh y ateo, así que ¿cómo iba a creer algo de lo que me dijera? Ya no me habló de Falun Dafa.

A principios de 1997 me convertí en el inspector de calidad de mi taller. El salón era grande. Una practicante de otro departamento me preguntó si podía usar la mitad de nuestro salón para practicar Falun Dafa al mediodía. Acepté. Cuatro o cinco practicantes venían a hacer los ejercicios al mediodía todos los días. Me invitó a practicar con ellos. Me dijo que era una pena que yo no practicara porque era una buena persona. No le di importancia a lo que dijo.

Esta colega volvió a acudir a mí en marzo. Me dijo que esa noche había una videoconferencia y me invitó a ir. Al ver su sinceridad y entusiasmo, acepté la invitación a regañadientes.

Pero le dije: "No practicaré los ejercicios ni leeré las enseñanzas porque soy miembro del PCCh". Yo consideraba la teoría del PCCh del ateísmo como la verdad y la cultivación como la superstición. Envenenado por el PCCh, estaba engañado y tenía poca iluminación. No conocía el valor de Falun Dafa y no valoré esta oportunidad de cultivación. Ahora me avergüenzo cuando recuerdo lo que dije.

Fui a ver las videoconferencias del Maestro esa noche. Cuando vi al Maestro, sentí que lo conocía de alguna parte porque me parecía muy familiar. ¿Era el jefe de un taller? ¿Era el jefe de un departamento? No podía recordarlo. Pensé que solo era una conferencia sobre qigong. Cuando terminé de ver la primera conferencia, mis pensamientos cambiaron totalmente. Acepté completamente lo que dijo el Maestro. Lo que decía era diferente a lo de otras personas. No es de extrañar que mi colega intentara repetidamente presentarme Falun Dafa.

Mi perspectiva del mundo y de la vida cambió fundamentalmente después de ver las conferencias del Maestro.

Experiencias asombrosas

Empecé a ir a un parque local para hacer los ejercicios con otros practicantes. Las enfermedades que me atormentaron durante más de 20 años desaparecieron. Cuando tenía 20 años, empecé a tener fiebre constante sin motivo y me sentía muy débil. Si hablaba mucho, mi temperatura corporal subía. Acudí a médicos de medicina china y occidental, pero no pudieron encontrar la causa. Tuve esta fiebre durante más de 20 años.

Me sentía ligero y con energía y no tenía ninguna enfermedad después de empezar a practicar Falun Dafa. Mi temperatura se normalizó. La gente decía que tenía mucho mejor aspecto. Los miembros de mi familia estaban muy agradecidos con Falun Dafa y con el Maestro cuando fueron testigos de mis cambios. Apoyaron mi práctica de Falun Dafa incluso después de que comenzara la persecución del PCCh.

Yo solía ser una persona descuidada y no podía perseverar. Debido a mis nociones ateas, tenía poca calidad de iluminación. Nuestro compasivo Maestro me dio consejos en repetidas ocasiones cuando acababa de empezar a practicar. Me mostró la naturaleza extraordinaria y los milagros de Falun Dafa y me ayudó a romper mi visión atea del mundo.

La mañana que decidí asistir a los ejercicios de grupo vi un Falun de un metro de ancho. El Maestro abrió mi tercer ojo mientras practicaba los ejercicios. A menudo veía escenas en otras dimensiones. Vi montañas, un pabellón y una gran libélula. También vi que la sociedad humana estaba cubierta de olas negras de yeli.

Cuando hice el segundo ejercicio, sentí que la parte superior de mi cabeza se abría y podía sentir la energía del universo. Cuando no hacía los ejercicios correctamente, un poder rectificaba mis movimientos automáticamente. Cuando hice el tercer ejercicio, el mecanismo guió mis brazos y sentí que flotaban. Sentía que estaba rodeado de energía cuando practicaba los ejercicios. Era magnífico.

Un día empezó a llover fuerte mientras hacíamos los ejercicios. Las demás personas que estaban en el parque se marcharon apresuradamente. Solo nos quedamos los practicantes y seguimos haciendo los ejercicios a pesar del chaparrón. Yo no me fui simplemente porque los otros practicantes se quedaron. De repente, vi varias golondrinas que venían de lejos. Se alinearon en una fila y bajaron una a una formando un Falun que giraba en el sentido de las agujas del reloj. Sabía que el Maestro me estaba animando.

En otra ocasión, mi hermana fue hospitalizada poco después de que yo empezara a practicar. Yo la cuidaba. Cuando se apagaron las luces de su sala, me dirigí al pasillo para leer "Exponiendo el Fa en los Estados Unidos". Mientras leía, las palabras de la página desaparecieron. La página se convirtió en un cristal transparente. Vi un antiguo jardín con escalones que se extendían sin fin. Cuando quería leer el Fa y no quería ver la escena, la visión se desvanecía.

La increíble sensación de hacer los ejercicios y las escenas milagrosas que veía con mi tercer ojo eliminaron por completo las mentiras del PCCh a las que me había aferrado. Creía que los dioses y los fo existían. Un ser humano puede cultivar y convertirse en un dios, un fo o un dao. Los principios del Fa que el Maestro nos explicó son reales. No es una superstición. Es la Verdad. Me he vuelto confiado en la cultivación.

Sueño inolvidable

Falun Dafa se introdujo por toda China y otras partes del mundo de persona a persona. Como había más practicantes nuevos, la asistente del sitio de práctica local organizó otra sesión de conferencias de nueve días en septiembre. Más de 40 personas asistieron a la clase. La asistente me pidió que coordinara el estudio de Fa para los nuevos practicantes. Sentí la presión y temí que pudiera hacer algo que no estuviera alineado con los principios del Fa. Solo había practicado Dafa por menos de seis meses y no entendía los principios del Fa profundamente. Pedí a la asistente que buscara otro practicante para trabajar conmigo, pero no obtuve respuesta de ella. Pensé en escaparme y no ir al día siguiente al sitio de práctica.

Esa noche tuve un sueño inolvidable. En el sueño estaba estudiando el Fa con otros practicantes de mi grupo. El ambiente era ruidoso. Oí una voz que decía: "Por favor, cállate. Ve a la página 71". Me desperté y me levanté de la cama. Abrí el libro Zhuan Falun y fui a la página 71. Leí:

"Aún hay un método que puede cambiar la vida entera del hombre, y este es el único método; es que esta persona, de ahora en adelante, transite un camino de xiulian" (Segunda Lección, Zhuan Falun).

En ese momento todas las células de mi cuerpo se agitaron. El Maestro me hizo saber el significado interno de este Fa. En ese instante se despertó lo más microscópico y lo más original de mi vida hasta lo más superficial de mi cuerpo. Comprendí que el verdadero significado y propósito de mi venida a este mundo era la cultivación. Mi sentimiento iba más allá de cualquier palabra. Me quedé en shock. Desde ese momento nunca he vacilado en mi determinación de practicar Falun Dafa.

El Maestro nos guía para mejorar juntos

Fui a estudiar el Fa con otros practicantes todos los días. Siempre llevaba cinco libros conmigo: Zhuan Falun, Zhuan Falun II, Explicando del Contenido de Falun Dafa, Exponiendo el Fa en Sidney y Exponiendo el Fa en los Estados Unidos. Los nuevos practicantes hicieron muchas preguntas. Lo sorprendente era que, siempre que abría el libro de Dafa, la respuesta estaba en esa página. Sabía que era el poder de Falun Dafa y que el Maestro me estaba fortaleciendo. El Maestro ayudaba a los nuevos practicantes y a los veteranos a mejorar juntos.

Una nueva practicante de unos cincuenta años vino al grupo de estudio del Fa un día en enero de 1998. Estaba pálida y parecía no tener fuerzas. Su marido y su hijo la llevaron arriba y a la sala. Se me encogió el corazón cuando la vi. Estaba gravemente enferma. Me preguntó: "¿Puede Dafa curar mi enfermedad? Le dije: "Puedes venir con el pensamiento de curar tu enfermedad. Sabrás gradualmente qué hacer cuando entiendas más los principios del Fa".

Ella hizo muchas preguntas. Respondí desde la perspectiva del Fa. El Maestro me fortaleció. Las respuestas estaban allí cuando abrí el libro. Ella creía en Dafa y cultivaba diligentemente. Hizo los ejercicios todas las mañanas y participó en otras actividades para promover Falun Dafa.

En solo una semana ya no necesitaba ayuda para subir las escaleras. Tenía un aspecto sonrosado y saludable. Se volvió alegre. Cambió de adentro hacia afuera.

Estudiaba el Fa con atención y hacía preguntas sobre cómo mejorar el xinxing. Estaba ansiosa por mejorar. Volvió a tener su ciclo menstrual. Fui testigo de sus cambios todos los días. Su historia me conmovió mucho. Sentí el poder ilimitado de Dafa y del Maestro. Esto reforzó mi determinación de cultivar Falun Dafa.

Convertirse en un auténtico cultivador

A medida que estudiaba más el Fa, mi comprensión de los principios se volvió gradualmente racional. Comprendí cómo ser una buena persona y el verdadero significado de la vida.

Antes de practicar Falun Dafa, no me consideraba una buena persona. Era ateo y no creía que el bien se recompensa y el mal se castiga. Era egocéntrico y siempre me aseguraba de salir adelante. Me preocupaba por mis intereses personales y no tenía en cuenta los sentimientos de los demás.

Tengo cinco hermanas y un hermano. Mis hermanas acudían a mí si tenían conflictos en casa. Me peleaba con sus maridos para ayudar a mis hermanas. Incluso discutí con la persona que hizo enfadar a mi cuñada. Era competitivo y no cedía fácilmente.

Mi xinxing mejoró después de practicar Falun Dafa, y me tomé el interés personal a la ligera. Me volví considerado y pensé desde la perspectiva de otras personas. Me volví de mente abierta y no me preocupé por si perdía o ganaba algo.

Cuando mis hermanas acudían a mí por sus problemas familiares, las guiaba con los principios de Dafa. Cuando me encontraba con conflictos, me daba cuenta de que sucedían para mejorar mi xinxing y transformar mi yeli. Poco a poco me convertí en una buena persona, en una mejor persona y en un practicante genuino según los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia.

Observaciones finales

Los miembros de mi familia me apoyan en la práctica de Falun Dafa. Ellos también se benefician de ello. Mi hija sobrevivió a varios accidentes gracias a la protección del Maestro. Mi hermana menor ha cambiado fundamentalmente después de practicar Falun Dafa. Su historia asombró a mi extensa familia de más de 40 personas. Era una fumadora empedernida, pero consiguió dejar de fumar después de practicar Dafa. Mi hermana mayor consiguió una nueva vida después de practicar Falun Dafa. Mi sobrino me dijo: "Tío, tengo éxito en mi carrera gracias a tu ayuda. Me comporto según los principios que me has dicho". Le dije que los principios eran de Falun Dafa.

He practicado Falun Dafa durante 24 años. Gracias a la protección del Maestro en todo momento, me he convertido en un decidido practicante de Falun Dafa.

Gracias, Maestro, por su ilimitada compasión y sacrificio. Mi gratitud al Maestro está más allá de cualquier palabra.

...

Lo expresado en este artículo representa la opinión o entendimiento del autor. Todo el contenido publicado en este sitio web tiene derecho de autor y pertenece a Minghui.org. Minghui realizará compilaciones de su contenido online de forma regular y/o en ocasiones especiales.