(Minghui.org) El 1 de noviembre de 2022 se celebró en línea la primera Cumbre de Enfermeras para Combatir y Prevenir la Sustracción Forzada de Órganos. Organizada por la Academia de Enfermería Forense (AFN, por sus siglas en inglés) y Médicos contra la Sustracción Forzada de Órganos (DAFOH, por sus siglas en inglés), la cumbre se centró en el delito de la sustracción forzada de órganos en China y en la promoción de prácticas médicas y de enfermería éticas.

La cumbre inaugural en línea de las Enfermeras para Combatir y Prevenir la Sustracción Forzada de Órganos el 1 de noviembre de 2022.

Doce ponentes, entre los que se encontraban profesionales de la medicina, expertos en derechos humanos y testigos, debatieron sobre la continua mala praxis de la sustracción de órganos a practicantes vivos de Falun Gong y a otros presos de conciencia en China. Entre ellos, dos testigos describieron sus experiencias en campos de trabajo chinos.

La cumbre, que duró más de cuatro horas, se dividió en tres secciones: la primera trató sobre la profundidad y el alcance de la sustracción forzada de órganos, la segunda sobre las consideraciones éticas y legales, y la tercera sobre la respuesta y la acción de la enfermería. El documental Genocidio médico: asesinato en masa oculto en la industria de trasplante de órganos de China se proyectó durante la cumbre.

DAFOH: Pruebas irrefutables

Deborah Collins-Perrica, directora de Asuntos de Enfermería de DAFOH, intervino en el acto.

Deborah Collins-Perrica es la directora de Asuntos de Enfermería de DAFOH. Afirma que es un crimen atroz extraer por la fuerza órganos de personas inocentes sin su consentimiento, pero esta práctica fue aprobada y apoyada por el Partido Comunista Chino (PCCh). Con la ayuda de la policía y el ejército, se ha desarrollado en China una lucrativa cadena de suministro de trasplantes de órganos.

Un grupo importante de víctimas de la sustracción forzada de órganos son los practicantes de Falun Gong, un sistema de ejercicios y meditación popular en China debido a sus beneficios para la mente y el cuerpo. Había unos 100 millones de practicantes en China antes de que el PCCh comenzara a perseguir al grupo en julio de 1999. Desde entonces, un gran número de practicantes de Falun Gong han sido detenidos, torturados e incluso han sido víctimas de la sustracción forzada de órganos.

"Las víctimas siguieron un camino sumamente secreto. Las víctimas explotadas, maltratadas y preparadas para la sustracción de órganos son sometidas a pruebas médicas durante su detención política. Esto creó un sistema de órganos a la carta que puede entregar órganos para trasplantes mediante una vía rápida en cuestión de días", explicó la Sra. Collins-Perrica. "A las víctimas, que son sometidas a trabajo forzado, abandonadas y torturadas, se les hace un examen médico, se les practican radiografías de tórax, ecografías y análisis de sangre en los hospitales de las prisiones y en los centros de detención. Esta disparidad en el tratamiento no tiene precedentes".

Según un informe de China Daily en 2016, China puso un precio de 46.000 dólares para un trasplante de riñón, 90.000 dólares para un trasplante de hígado y 150.000 dólares para un trasplante de corazón. Collins-Perrica afirmó que los trasplantes de órganos se encuentran entre las industrias más rentables, con unos ingresos anuales de unos mil millones de dólares.

Periodista de investigación: cronología de la sustracción de órganos en China

El periodista independiente Ethan Gutmann.

El periodista de investigación Ethan Gutmann habló sobre la historia y la situación actual de la sustracción de órganos en China. A finales de la década de los ochenta, la extracción de órganos a presos ejecutados se convirtió en una rutina. Después de que el PCCh comenzara a reprimir a Falun Gong en 1999, la persecución se convirtió en la mayor campaña en China desde la Revolución Cultural.

"En 2001, con aproximadamente dos millones de [practicantes] de Falun Gong en el sistema chino [de campos de trabajo], los prisioneros de Falun Gong son seleccionados para exámenes de órganos con el único fin de ofrecerlos para su venta... riñones, hígado, corazón, y ocasionalmente pulmones..." explicó Gutmann en su presentación. "En 2002, el tiempo de espera para el turismo de órganos para extranjeros es de dos semanas o menos".

En 2003, también se examinaban los órganos de tibetanos y cristianos detenidos. En 2014, los agentes de policía en China fueron a los hogares de los practicantes de Falun Gong para tomar muestras de sangre y ADN compatibles con la tipificación de tejidos. Después de 2016, el PCCh también ordenó la toma de muestras de sangre de uigures para el cotejo de ADN y tejidos. Es decir, el PCCh ha ampliado la sustracción de órganos de presos ejecutados a practicantes de Falun Gong detenidos, a tibetanos, cristianos y uigures.

A principios de este año, la Sociedad Internacional de Trasplante de Corazón y Pulmón anunció una política de rechazo de artículos de investigación procedentes de China continental debido al abuso de los trasplantes. Gutmann se refirió a ello como una medida valiente. Además, propuso que los artículos de investigación de los médicos o enfermeras chinos relacionados con la extracción de órganos no aparecieran en las revistas médicas occidentales. Además, se les debería prohibir participar en conferencias médicas y colaboraciones científicas. También debería detenerse la venta de dispositivos médicos relacionados, añadió.

La sustracción de órganos continúa

Arthur Caplan, profesor de la Facultad de Medicina Grossman de la NYU.

Arthur Caplan es catedrático de Bioética, subvencionado por los Dres. William F y Virginia Connolly Mitty, en la Facultad de Medicina Grossman de la Universidad de Nueva York y es director fundador de la División de Ética Médica. También es codirector del Estudio conjunto Consejo de Europa/Naciones Unidas sobre el tráfico de órganos y partes del cuerpo.

Numerosas organizaciones internacionales y organismos médicos han constatado que en China se realiza un gran número de trasplantes de órganos cada año. Sin embargo, también existe una enorme discrepancia entre estas cifras y las donaciones de órganos que se registran en China.

En China, los órganos compatibles se prometen en dos o tres semanas. Esto es muy sospechoso, a no ser que los órganos se obtengan de forma inmoral, "dado el conjunto de pruebas de que el gobierno de la República Popular China sigue siendo el único que apoya sistemáticamente la obtención de órganos y tejidos de presos ejecutados sin transparencia", dijo.

Testimonio de la hija de una víctima

Jiang Li declaró sobre la experiencia de su padre, Jiang Xiqing.

Los miembros de la familia de Jiang Li fueron perseguidos por practicar Falun Gong. Su madre estuvo ocho años en prisión y tres en un campo de trabajo.

Su padre, el Sr. Jiang Xiqing, fue declarado muerto por el campo de trabajo de Xishanping el 28 de enero de 2009. Su familia descubrió que seguía caliente más de seis horas después de ese día. Creyendo que aún estaba vivo, intentaron reanimarlo, pero fueron arrastrados fuera de la funeraria por decenas de policías. Más tarde obtuvieron grabaciones de audio en las que se extraían los órganos del Sr. Jiang mientras seguía vivo.

Posteriormente, Jiang Li compartió las grabaciones con expertos médicos forenses y estos coincidieron en que su padre había tenido una muerte no natural.

La sustracción forzada de órganos a gran escala no solo es un delito grave, sino que también ha causado un dolor inconmensurable a las familias de los practicantes de Falun Gong. Jiang Li espera que más personas den un paso adelante para poner fin a esta atrocidad y hacer que los autores rindan cuentas.

El vídeo de la cumbre está disponible en:

https://www.ganjing.com/video/1fce257sfi42g5Dp7ollteFzA1pp1c