Al mirar hacia adentro, se disuelven las grandes tribulaciones (Parte II)

(Minghui.org) (Continúa de Parte I) Durante años, no miré hacia adentro para encontrar mis propios defectos y esto provocó muchas tribulaciones en mis relaciones interpersonales con mi familia.

Se reflejó especialmente en mi problemático matrimonio. Desde un trato silencioso hasta discusiones acaloradas y peleas físicas, mi esposo y yo siempre tuvimos conflictos. Esta fue una prueba constante en mi cultivación.

La situación llegó a un punto crítico en 2018 después de que mi marido sufriera un derrame cerebral y comenzara a acusarme de tener aventuras.

El estudio del Fa me ayudó a mejorar

Sabía que tenía que leer el Fa y examinar mi estado de cultivación. Pasé horas leyendo las enseñanzas y finalmente pude calmarme. Me vinieron a la mente estos pasajes del Fa:

“Cuando encuentren conflictos, los cultivadores deben soportarlos. Además, tú mismo debes ser capaz de soportar, y sólo entonces puedes ascender realmente” (Exponiendo el Fa en el Fahui de Houston).

“A menudo digo que cuando otra persona se aprovecha de ti o te causa problemas, o cuando sufres, no debes guardar rencor contra esa persona, porque tú estás practicando la cultivación” (Exponiendo el Fa en el Fahui de Houston).

“El Ren, es la clave para mejorar el xinxing de uno. El aguantar con odio, quejas o lágrimas es el Ren de una persona común que está apegada a sus recelos. Solo el aguantar completamente sin ningún odio ni queja alguna es el Ren de un cultivador” (Qué es Ren?, Escrituras esenciales para mayor avance).

Si fuera una persona común, definitivamente buscaría venganza. Sin embargo, como cultivador, debo escuchar al Maestro. El Maestro nos dijo que aguantáramos, entonces debo aguantar. Solo cuando podemos responder a las malas acciones con bondad estamos siguiendo las normas de Dafa. Busqué en mi interior, pero no pude encontrar lo que hice mal, lo que me hizo aún más difícil aguantar.

En los meses siguientes, no importaba lo mucho que mi marido intentara compensarme, cocinando, lavando la ropa o apoyándome en la aclaración de la verdad, no podía perdonarlo.

La tensión entre nosotros se fue acumulando y finalmente explotó unos meses después. Esta vez, nos peleamos y discutimos durante dos días. Hacíamos nuestras propias comidas y comíamos por separado. Pedí que me devolviera la tarjeta del seguro médico y dejé de apoyarlo económicamente. Él no tenía seguro médico y había estado utilizando el dinero de mi tarjeta. Recibe muy poca pensión de jubilación, así que la deja en su cuenta de ahorros y se gasta mi dinero.

Presenté la demanda de divorcio en el juzgado local y encontré un abogado que conoce la verdad sobre Dafa y apoya a los practicantes. Después de escuchar mi historia, me preguntó con cautela: "¿No crees que estás siendo un poco autoritaria? Quizá deberías calmarte, pensarlo bien y preguntarte si has hecho todo bien. Si realmente quieres el divorcio, por favor, trae una declaración escrita la próxima vez". Sabía que el abogado estaba tratando de retrasar el proceso para darme tiempo para pensarlo. También sentí que no estaba lo suficientemente tranquila, así que decidí esperar un poco.

No sabía qué hacer a continuación. Le pedí al Maestro Li (fundador de Dafa) que me orientara en la dirección correcta. ¿Dónde está mi camino?

El Maestro dijo:

“Decimos que si frente a un conflicto uno puede dar un paso atrás, se encontrará con un vasto mar y un cielo sin límites; está garantizado que habrá un escenario diferente” (Novena Lección, Zhuan Falun).

Solo cuando uno da un paso atrás puede encontrar una salida. Necesitaba dar un paso atrás. Si seguía empujando hacia adelante, estaría al borde del colapso. Cuando tuve este pensamiento me vino a la mente el poema del Maestro:

“La compasión puede disolver Cielo y Tierra y traer la primavera

Los pensamientos rectos pueden salvar a la gente en el mundo”

(El Fa rectifica el cosmos, Hong Yin II).

De repente me di cuenta: ¿Lo que estoy haciendo es realmente cultivación? ¿Dónde está mi compasión? ¿Dónde están mis pensamientos rectos?".

Mi abogado se reunió con mi marido al día siguiente y la conversación fue bien. Le dijo a mi esposo que Falun Dafa no está en contra de la ley en China y que la práctica es aceptada por países de todo el mundo.

Escarbé más profundamente y me examiné a mí misma. Admití delante del abogado: "A lo largo de los años, he sido arrogante, egoísta y he despreciado a mi marido. No le he dado el respeto que se merece. He hablado mal de él delante de su familia y ahora ni siquiera su familia lo quiere. Durante las dos últimas décadas de persecución, ha vivido en un estado constante de preocupación y miedo, todo por mi culpa. Ha sufrido enormemente por mis decisiones. Pobre hombre. Sin embargo, nunca me había puesto en su lugar ni había considerado sus sentimientos. Solo me centré en mi propio perjuicio. Fui egoísta". Mi marido también prometió no volver a pelearse conmigo.

Eliminando la raíz de mi odio

Al eliminar mis apegos, mi nivel subió. Sin embargo, no me iluminé a los principios superiores del Fa y todavía no me había deshecho de mi apego fundamental. No estaba a la altura de los requisitos más elevados que el Maestro tenía para mí. Sabía que la tribulación estaba destinada a mejorarme, lo cual era bueno, pero ¿cómo me había provocado esta tribulación? ¿Por qué mi resentimiento era cada vez más fuerte?

Le comenté estas preocupaciones a otra practicante y me dijo: "Sigues estando influenciada por la cultura del Partido Comunista Chino (PCCh). La tendencia a controlar a los demás, la competitividad, la lujuria y el resentimiento son todos de la cultura del Partido, al igual que el deseo de divorciarse. Es desviarse de la norma y de la tradición para hacer lo que uno desea, por ejemplo, seguir casado como le da la gana y divorciarse cuando le apetece. Piensa en los valores que se presentan en Shen Yun: volver a encarrilar a la humanidad con los valores y las tradiciones antiguas. Como cultivadores, tenemos que ser los pioneros en este sentido".

Me sorprendió escuchar esas palabras. Es cierto que todavía estaba muy influenciada por la cultura del Partido. Desde que nací y durante toda mi vida adulta, he estado inmersa en la cultura del Partido. Ha impregnado nuestra sociedad desde que el PCCh tomó el poder y ha inculcado al pueblo chino una serie de normas retorcidas sobre el bien y el mal y una forma de pensar enrevesada. Al crecer en este entorno, se nos ha expuesto a las mentiras, la violencia, la competitividad, el resentimiento y el contenido sexual.

El odio y las sustancias corruptas del nivel más bajo del universo constituyen la verdadera naturaleza del espíritu perverso comunista. Este considera a la humanidad como su enemigo y su objetivo final es destruir a la humanidad derribando la moral humana con la cultura afín del Partido Comunista. Como resultado, la moral de nuestra sociedad en su conjunto está decayendo rápidamente. Las viejas fuerzas planean destruir a los cultivadores fortaleciendo nuestros apegos que no han sido eliminados por completo.

He repartido todos los días ejemplares de Los nueve comentarios sobre el Partido Comunista y El propósito final del comunismo, pero no he comprendido verdaderamente su contenido. No me di cuenta de que mi forma de pensar estaba todavía muy influenciada por la cultura del Partido y tampoco me di cuenta de que necesitaba limpiar mi campo de tales sustancias. Precisamente por eso, aunque pasé mucho tiempo leyendo el Fa y enviando pensamientos rectos y me examiné en busca de apegos, mi resentimiento siguió creciendo y finalmente se convirtió en odio. Yo misma me he provocado esta tribulación. Finalmente, me di cuenta de que la causa fundamental es la cultura del Partido.

Aprendiendo de las experiencias de otros practicantes, empecé a escuchar los audiolibros de Los nueve comentarios sobre el Partido Comunista, El propósito final del comunismo y Cómo el espectro del comunismo rige nuestro mundo. Los escuché mientras hacía folletos de aclaración de la verdad y también por la noche. Además de escuchar estos audiolibros una y otra vez, también enviaba pensamientos rectos durante largos períodos de tiempo para limpiar mi campo del veneno de la cultura del Partido, las viejas fuerzas y mi naturaleza de imposición, egoísmo, competitividad y lujuria. Todos estos apegos y nociones humanas provenían del egoísmo. A medida que pasaba el tiempo, podía sentir que mi campo de energía se aclaraba y mi competitividad y resentimiento se volvían cada vez más débiles.

Deshaciéndome de la lujuria

Una vez que vi realmente la situación, me quedó claro que la "lujuria" proviene del comunismo. La sociedad está llena de lujuria y sexo casual fuera del matrimonio. Los altos funcionarios del PCCh eran todos pervertidos o tenían aventuras. El espíritu del PCCh intenta arrastrar a la humanidad al infierno con este poderoso deseo.

Los malos pensamientos de mi marido se reforzaron y solían interferir conmigo. El hecho de que fuera capaz de llegar a mí significaba que todavía tenía esas sustancias en mi campo. Todavía me gustaba juzgar a la gente por su aspecto; prefería la ropa bonita; envidiaba a los practicantes casados con otros practicantes, especialmente cuando los maridos eran capaces y amables con sus esposas. Si no me deshacía de estos apegos y mantenía fuertes pensamientos rectos, no podría eliminar completamente la lujuria.

Después de hablar con otros practicantes que habían tenido tribulaciones similares y de leer muchos artículos en Minghui, decidí que enviar pensamientos rectos durante largos periodos de tiempo era la forma más eficaz de deshacerse de la lujuria. Inspirada por otros practicantes, me concentré en este pensamiento mientras enviaba pensamientos rectos: "Soy discípula del Maestro Li Hongzhi y no reconozco ninguna otra disposición. Solo sigo el camino dispuesto por el Maestro. Eliminar la lujuria y todo el yeli en mi campo. Eliminar todos los malos pensamientos relacionados con la lujuria. Eliminar el qing entre marido y mujer. Cultivar mi corazón y cortar la lujuria".

A veces también concentré mis pensamientos rectos en una sola persona. Eliminé las viejas fuerzas y todos sus arreglos para esta persona, limpié su campo de energía de todos los demonios de la lujuria y el sentimentalismo, y me deshice de todos los seres y sustancias que se desviaban del Fa. Dediqué algunos días solo a enviar pensamientos rectos. Algunas sesiones duraban una hora y otras media hora. Seguí enviando pensamientos rectos y vi buenos resultados. Había menos interferencias y la tensión entre mi marido y yo disminuyó.

Finalmente, pude rectificarme en el Fa, lo que me trajo cambios positivos física y mentalmente. Con muchas cosas malas eliminadas, me encontré teniendo más compasión hacia los demás. Incluso tuve un avance y medité en la posición de loto completo durante una hora entera. Muchos de mis síntomas de enfermedad persistentes, como la arritmia cardíaca, el tinnitus y el asma, desaparecieron.

Disolviendo una gran tribulación

Un día estaba memorizando el Fa cuando surgió un pensamiento repentino: "¿Es porque no me he cultivado bien que mi marido no obtiene el Fa? ¿Tal vez su conciencia principal está deseosa de obtener el Fa?". Al día siguiente, mi esposo vino a mi habitación tres veces y se quedó sin decir nada. Le pregunté si buscaba algo y me dijo: "¿Estás leyendo tu libro?". Le dije: "Si quieres leerlo, puedes leerlo primero". Así que lo tomó.

Al día siguiente me dijo que había terminado la Primera Lección y que quería continuar. Le di mi ejemplar de Zhuan Falun. Leyó el libro tres veces, escuchó las conferencias del Maestro sobre el Fa varias veces, y leyó más de una docena de folletos de aclaración de la verdad.

El día del Año Nuevo Chino, mi esposo se encontró con un amigo que le dijo que quería aprender más sobre Dafa. Mi marido se apresuró a tomar unos cuantos folletos de aclaración de la verdad y los llevó a casa de su amigo. Por primera vez, ayudó a dos personas a renunciar al Partido y a sus organizaciones juveniles. Desde entonces, lleva consigo materiales de esclarecimiento de la verdad allá donde va. Ha repartido más de 200 folletos y volantes y ha ayudado a más de 140 personas, en su mayoría miembros del Partido, a renunciar a él. Pero aún no ha empezado a practicar.

Cuando las fuerzas de seguridad del PCCh volvieron a detener a los practicantes el pasado julio, mi esposo dejó de aclarar la verdad por miedo. Pero ha aprendido que Dafa es bueno. Ahora, si alguien en el mercado le da un folleto, lo toma y se lo da a otra persona. Cuando compra productos a los vendedores, ya no elige los buenos ni regatea. La gente a veces lo confunde con un practicante de Dafa.

A veces seguimos teniendo conflictos. Mi resentimiento y mi competitividad afloraban a menudo y a veces con mucha fuerza. Pero sabía que esto es el proceso de cultivación. Ahora encuentro fácil pasar estas pruebas siempre que siga verdaderamente los requisitos del Fa, mire constantemente hacia adentro para examinarme y rectificarme, y permanezca diligente con pensamientos rectos para eliminar todos los rastros de mis apegos restantes. Finalmente, me siento confiada al decir que he superado el gran obstáculo y he disuelto la gran tribulación de las relaciones familiares.

Mi naturaleza dominante y mi odio provocaron la mayor tribulación en mi cultivación. Nuestros más de 20 años de matrimonio problemático fueron como un iceberg que finalmente se desmoronó a la luz de la compasión ilimitada de Dafa. Una situación aparentemente desesperada cambió. El Maestro ha puesto tanta esperanza y tanto esfuerzo para ayudarme a lo largo del proceso. He tardado demasiado en iluminarme y he defraudado al Maestro. Quiero decirle al Maestro: "Gracias, Maestro. Gracias, Maestro".

Cultivándome sólidamente y salvando a más gente durante la pandemia

Ahora que tengo un esposo que me apoya y un buen ambiente de cultivación, me cultivaré aún más diligentemente y haré las tres cosas aún mejor. He mantenido una rutina de aclarar la verdad por las mañanas y estudiar el Fa por las tardes. Cuando estoy caminando, siempre recito el Fa. Intento tener siempre presente el Fa para que otros pensamientos y la cultura del Partido no puedan interferir. En este momento crítico de la historia, el último tramo de la rectificación del Fa, no tenemos tiempo que perder, tenemos que cultivarnos bien y salvar a más personas.

Cuando la pandemia de COVID comenzó en 2020, nuestra comunidad residencial y los pueblos de los alrededores estaban todos cerrados. ¿Cómo puedo salvar a la gente si no pueden salir? Estoy aquí para salvar a la gente. Estaba tan preocupada que mi pelo se volvió gris.

Primero aumenté el tiempo de estudio del Fa, y luego me aventuré lentamente a salir a mi propia comunidad. Hice pequeñas pegatinas con información sobre Dafa y las coloqué en los ascensores. A todos los que encontraba les decía que la gente se curaba del virus recitando "Falun Dafa es bueno". Les di amuletos y les dije lo importante que es alejarse del PCCh.

Unos cuantos practicantes locales se reunieron y todos estuvimos de acuerdo en que no podíamos quedarnos en casa. Teníamos que hacer lo que pudiéramos para salvar a la gente. Nos dividimos las tareas y yo me encargué de hacer folletos de aclaración de la verdad y los demás los distribuirían.

Descargué del sitio web Minghui folletos trípticos, pegatinas, cuadernillos, folletos individuales y boletines informativos e hice todas las copias que pude. En cada paquete, incluí un folleto de aclaración de la verdad, un tríptico con el desarrollo más reciente de la pandemia y el código QR para evitar el cortafuegos del PCCh. Para distribuirlos, dos practicantes aparcaron su coche en la calle cerca de las comunidades residenciales y esperaron a que la gente pasara por allí para entregarles los materiales de aclaración de la verdad. Repartieron unos 200 kits al día y ayudaron a muchas personas a renunciar al Partido.

También me asocié con otro practicante para distribuir estos paquetes y los dejé en los parabrisas de los coches. Cuando tenía tiempo libre durante el día, salía y hablaba con la gente en persona. No reconocimos el estricto bloqueo impuesto por el PCCh y seguimos salvando a la gente como es debido.

Cuando se levantaron las restricciones, los practicantes locales se unieron para ir al campo a difundir la verdad sobre Dafa. Otro practicante y yo trabajamos bien juntos. A veces repartíamos más de 60 kits en solo medio día y ayudábamos a más de 20 personas a renunciar al Partido. Los seres conscientes están esperando ser salvados; algunos nos pidieron los kits de aclaración de la verdad y otros incluso nos ayudaron a distribuirlos.

Los seres conscientes están esperando a ser salvados

Una vez vi a un grupo de más de una docena de personas comprando albaricoques a un vendedor, así que saqué algunos folletos e intenté repartirlos. Cuando el grupo dudó, una mujer de mediana edad me los arrebató de la mano y puso uno en la mano de cada persona: "¿Por qué no quieren todos una información tan buena? ¿No tienen miedo de que este virus llame a su puerta? Tómenlo. Tómenlo. Renuncien a los Jóvenes Pioneros". Aproveché la oportunidad y les ayudé a renunciar al Partido.

Una vez iba caminando por una calle y vi a un miembro del PCCh parado frente a su puerta. Lo saludé y le entregué un folleto de aclaración de la verdad y un ejemplar de El propósito final del comunismo. Parecía nervioso y no los tomó. Le dije: "No tengas miedo. Te los he entregado en tu puerta. Puedes usar un apodo para renunciar al Partido, así tu privacidad está protegida. El PCCh pronto tendrá que rendir cuentas por sus crímenes. ¿Por qué no eliges la seguridad?". Dijo: "Bendiciones entregadas directamente en mi puerta, ¡las aceptaré! Por favor, ayúdame a renunciar al Partido. Gracias".

Muchas personas se sintieron conmovidas tras conocer la verdad y nos dieron las gracias una y otra vez. Una persona me dijo: "En tiempos tan caóticos, solo los practicantes de Dafa intentan ayudarnos". Una persona mayor me preguntó: "¿Todos los practicantes tienen una coraza protectora? ¿Has venido hasta aquí para darnos libros gratis? ¿Cuánto dinero ha costado?". Le dije: "Queremos salvar al mayor número de personas posible. Si no condujéramos, no tendríamos tiempo suficiente. Merece la pena si todos se mantienen a salvo durante la pandemia".

Después de ayudar a cada persona a renunciar al Partido, les recordamos antes de despedirnos: "No olviden recitar 'Falun Dafa es bueno'. Les deseamos a usted y a su familia felicidad y seguridad". También aclaramos la verdad al funcionario de turno en la entrada de cada pueblo al salir. La mayoría de ellos son miembros del Partido, pero se alegraron de renunciar a él y nos dieron las gracias en repetidas ocasiones.

Soy el ser más afortunado del universo

Mi marido me apoya ahora para que vaya al campo a difundir la verdad sobre Dafa. Se ha hecho cargo de la mayoría de las tareas domésticas, como cocinar, lavar la ropa y limpiar. También me ayuda a transportar material de papel pesado, a doblar y encuadernar folletos. A veces incluso ayuda a repartirlos. Le gusta comprar fruta para ofrecerla a la foto del Maestro, y está sano y feliz.

A veces, a altas horas de la noche, pienso: "No tengo muchos ahorros; no tengo joyas de oro o de diamantes; no tengo ropa cara. Cuando me canso, no tengo un hombro en el que apoyarme y nunca he recibido ningún regalo de cumpleaños. Pero lo que tengo es el inmenso honor de un practicante de Falun Dafa codiciado por innumerables seres superiores del universo. Soy un ser que el Maestro eligió y guió específicamente como su discípulo. Un día me convertiré en el rey de mi propio reino. Estoy ligado a la prosperidad del universo y los innumerables seres que hay en él son mi riqueza. El mundo humano es un escenario para mi cultivación y los miembros de mi familia están aquí para ayudarme a cultivarme. Todos ellos son seres que necesito salvar. ¿Qué más puedo pedir?".

Mientras escribía este artículo, miré hacia atrás en mi viaje de cultivación y sentí que me había elevado a un nivel aún más alto.

Pido a otros practicantes que tengan la amabilidad de señalar cualquier cosa que sea inapropiada.