​Advertir a los practicantes que experimentan pruebas de ye de enfermedad

(Minghui.org) Leí un artículo sobre si deberíamos advertir a los compañeros practicantes de Falun Dafa que experimentan pruebas relacionadas con el ye de enfermedad. Esto me recuerda mis experiencias pasadas y el artículo del Maestro Li Hongzhi (fundador de Falun Dafa) "Palabras de advertencia" de Escrituras esenciales para mayor avance.

Me gustaría compartir mis entendimientos sobre el tema de advertir.

En mi entendimiento del Fa, creo que es apropiado que ayudemos a otros practicantes en su cultivación, advirtiéndoles, pero eso depende de cada situación, y la advertencia debe darse desde la compasión.

Una advertencia no debe ser sarcástica, tampoco como un golpe que inicia una pelea. En realidad, es desde la compasión, porque un practicante es responsable de otros practicantes y del Fa. A veces, damos advertencias a los compañeros practicantes para que su conciencia principal pueda estar alerta y fortalecida. De esta manera, podemos ayudarlos a despertar y volver al camino correcto.

A veces, los practicantes que experimentan pruebas de ye de enfermedad pueden darse por vencidos fácilmente. Si les dices que estudien el Fa, escuchen el Fa, envíen pensamientos rectos y crean en Shifu y Dafa, se les crea resentimiento, ya que creen que ya saben estas cosas, pero no pueden tolerar más la tribulación.

Si les pides estudiar el Fa junto con ellos, o les recomiendas que asistan al estudio del Fa en grupo, probablemente rechazarán tu sugerencia. Su conciencia principal es demasiado débil y está controlada por el ye. Sufren pasivamente e incluso si les ayudas enviando pensamientos rectos, no funcionará. A veces, si estudias el Fa con ellos puede funcionar, pero una vez que los dejas solos, se entregarán a la interferencia.

Una vez conocí a una practicante que había aflojado en su cultivación. Casi pierde la vida cuando las viejas fuerzas la persiguieron. Bajo la misericordiosa protección de Shifu, ella vino a mi casa. Estudiábamos el Fa, hacíamos los ejercicios, enviábamos pensamientos rectos y compartíamos nuestras experiencias.

Noté que era floja y acostumbraba dormir mucho. No era estricta consigo misma y acumuló karma, lo que agregó más tribulaciones a su cultivación. Sin la misericordia del Maestro, ella pudo haber muerto.

Después de pasar un tiempo juntas, regresó a su ciudad natal. Antes de que se fuera, le recordamos que fuera diligente, no considerara la cultivación como un juego de niños y sea estricta consigo misma. Ella prometió que lo haría.

La siguiente vez que vino a mi casa, nos dijo que le dolían mucho las piernas y que no podía ponerlas en posición de meditación. Yo estaba muy sorprendida, ya que la última vez, pudo hacerlo muy bien.

Durante nuestra conversación, dijo que volvió a cometer algunos errores. La última vez que vino a nuestra casa, dijo que había matado animales ya que quería comer pescado y pollo. Cuando regresó a su casa, volvió a matar. Como resultado, no pudo cruzar las piernas para meditar. Cuando la escuché me enojé un poco y le pregunté: "¿Has pensado en la cultivación?".

Ella dijo que sí.

Le pregunté: "¿No habíamos hablado de no matar? ¿Por qué no tomaste la cultivación en serio? Sin Shifu sufriendo por ti, es posible que ya hubieras perdido la vida. ¿Sabes cuánto ha sufrido el Maestro por nosotros? ¿Sabes cuánto ha sufrido el Maestro por cada prueba de enfermedad que experimentamos? ¿Por qué quieres que Shifu sufra por ti porque no puedes elevar tu xinxing? ¿Acaso el Maestro te debe algo? ¿No has decepcionado al Maestro? ¿Por qué no piensas en el Maestro?".

Me detuve, sintiéndome ahogada y enojada. No pude controlar mi temperamento. Lloré por todo el sufrimiento que Shifu había soportado por ella. También me puse sentimental porque la practicante no se había cultivado diligentemente.

Más tarde me calmé y le dije: “Mi xinxing no es bueno hoy. Estoy preocupada por ti. Cuando regreses a casa, si tienes una prueba similar, espero que no cometas el mismo error, quiero que mis palabras sean un recordatorio para ti”.

La practicante no estaba enojada y no perdió los estribos. Dijo que sabía que lo estaba haciendo por ella.

Esta vez, la obligué a memorizar "Lunyu". Lo hizo, párrafo por párrafo. Después de mi advertencia, cambió mucho. Comenzó a memorizar el Fa y su condición mejoró.

Después que ella se fue, miré hacia adentro y descubrí que todavía tenía muchos problemas en mi cultivación.

Esta practicante me llamó más tarde y me dijo que podía hacer la meditación sentada con las piernas cruzadas durante una hora. Le agradecí a Shifu y supe que el Maestro había despejado la interferencia y la había fortalecido. Al mismo tiempo, Shifu me ha mostrado mis propios problemas en la cultivación para permitirme ser más diligente en la cultivación.

En el momento crítico, le damos a un compañero practicante una advertencia para que no proceda en la dirección equivocada. Entonces, debemos aprovechar la oportunidad para estudiar el Fa y enviar pensamientos rectos, para mejorar juntos basados en el Fa. Si nos preocupa que el practicante no tenga la capacidad de aceptar nuestras palabras, si tememos herirlo, entonces el compartir en la cultivación puede no ser efectivo.

Compartir entre practicantes fortalece nuestros pensamientos rectos pero no nuestras nociones humanas. Nuestros pensamientos rectos por un compañero practicante disolverán los factores malignos que están atrás de él, minimizará su persecución y podría hacer que su consciencia principal pueda estar alerta. Aunque el practicante no acepte lo que le hayamos dicho, puede ser que piense sobre ello más tarde, lo que sería una cosa positiva.

De hecho, sabemos que el ye es quien realmente sufre, no el practicante. El proceso del sufrimiento es eliminar el ye.

He ayudado a dos practicantes más dándoles advertencias cuando aflojaron en su cultivación y habían estado experimentando ye de enfermedad durante mucho tiempo. Ahora, tienen fuertes pensamientos rectos y sus condiciones han mejorado.

No podemos forzar a los practicantes a pasar sus pruebas, ni debemos decirles que vayan o no a un hospital, que tomen medicamentos o no. Solo podemos decirles lo que Shifu ha dicho y dejar que ellos decidan por sí mismos.

En resumen, debemos estar lo más posible en compasión para ayudar a otros practicantes que sufren ye de enfermedad.

[Nota del editor: El artículo representa únicamente la opinión del autor y está destinado a compartir entre los practicantes según la enseñanza del Fa: “comparte en el aprendizaje y comparte en la cultivación…”. (Cultivación sólida, Hong Yin)]

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