(Minghui.org) Recientemente experimenté irregularidades en mi ciclo menstrual. Mi período este mes se retrasó más de dos semanas, y duró casi 20 días. Estos 20 días fueron una prueba para mí, así que pasé por una profunda evaluación de mi estado y nivel de cultivación.

Cuando no tuve la menstruación durante los dos primeros días, no le di importancia. Sin embargo, me preocupé un poco cuando se retrasó una semana. Cuando se retrasó dos semanas, no lo traté desde el punto de vista del Fa. En cambio, busqué en Internet y leí muchos artículos sobre trastornos menstruales. Me consolé pensando que podía ser la menopausia, ya que tenía casi 41 años. Entonces compré algunos suplementos dietéticos en Internet.

Al cabo de dos semanas, noté unos síntomas menstruales muy poco habituales. Y este estado continuó durante casi 20 días. Empecé a preocuparme y a contar los días de una y otra manera.

Encontrando nociones profundamente arraigadas

Empecé a mirar hacia dentro. Descubrí que tenía una noción profundamente arraigada: siempre temía tener alguna "enfermedad". En otras palabras, mi fe en el Maestro Li (el fundador de Falun Dafa) y en el Fa tambaleaba. Miré más hacia adentro y me di cuenta de que había brechas.

Por ejemplo, desde hace tiempo, no llovía en mi zona, y este constante clima seco me ponía ansiosa. Incluso pasaba mucho tiempo pendiente de las noticias meteorológicas diarias. Sabía que todo en la tierra está en manos de Dios. Pero, cuando me imaginé los inconvenientes sin agua, no pude encontrar una razón para la falta de lluvia. Incluso culpé equivocadamente a los dioses, y pensé que se habían olvidado de hacer que lloviera. Cuando pensé en esto, me arrepentí. ¿Cómo podía un discípulo de Dafa culpar a Dios y quejarse del Cielo? ¡Qué gran pecado había cometido!

Luego continué examinando mis otros pensamientos. Encontré que desarrollé una búsqueda de comodidad, y no quería sufrir ni hacer sacrificios. Por ejemplo, nunca limpiaba los baños en casa porque no me gustaba el trabajo sucio.

Lidiando con el apego a la lujuria

También encontré mi apego a la lujuria. Además del deseo de llamar la atención de los hombres, incluso veía videos pornográficos en Internet. Me di cuenta que no eran cuestiones menores.

En las historias tradicionales, los dioses les quitaron la fortuna y la fama a muchas personas porque tenían pensamientos lujuriosos. Algunos incluso sufrieron la desgracia a causa de la lujuria. Los dioses examinan cuidadosamente los pensamientos y las acciones de cada ser. Nuestra práctica está relacionada con un gran número de seres de innumerables cuerpos cósmicos. Como practicante, aunque no hiciera el acto, los seres divinos pueden ver mis pensamientos lujuriosos, entonces ante sus ojos los pensamientos lujuriosos serían vistos como algo grave.

Debido al apego a la lujuria, gasté tiempo y dinero en ropa y maquillaje. Presté especial atención a la forma de vestir de mi joven colega. Incluso gasté mucho tiempo haciendo ejercicios, con la esperanza de mantener una buena figura. En un intento de antienvejecimiento, incluso compré alimentos nutritivos, con la esperanza de parecer más joven tomándolos.

En el pasado, siempre negaba con la cabeza cuando practicantes tomaban suplementos alimenticios. En aquella época, sentía que esas cosas contaminaban el cuerpo puro de un practicante. También era una manifestación de no creer en Shifu y en el Fa. Sin embargo, cuando tuve una ligera desviación en mi cultivación, no me medí con el estándar del Fa. Empecé a experimentar con los suplementos alimenticios. Poco a poco me acostumbré a tomarlos, y al final, no me di cuenta que hubiera algo malo al tomarlos.

No hay nada malo en los suplementos dietéticos. Sin embargo, si desarrollamos el apego de mantenernos en forma a través de estos productos nutritivos, no somos verdaderos practicantes. Olvidamos que Shifu, ha purificado nuestros cuerpos desde el principio.

Cuando me calmé y recordé situaciones en el pasado, me di cuenta de que esto era una desviación del Fa. Me di cuenta que había ido demasiado lejos.

Buscando la incidencia de las cosas pequeñas

Shifu dijo:

"Algunos de nuestros estudiantes no pueden pasar el ye de enfermedad. No tienes que pensar que lo causa algo grande. Dices que no tienes grandes errores, estás muy firme en el Fa. Pero tomas esas cosas pequeñas como si no fueran nada. La maldad perversa sabe aprovecharse de las brechas, muchos estudiantes incluso se fueron por pequeñeces, realmente por cosas muy pequeñas. Debido a que el xiulian es muy serio, es wu-lou (sin brechas), y por un largo periodo no te has cultivado, aunque sean pequeñeces, no les has prestado atención por un largo tiempo, entonces esto es un problema, por eso, mucha gente se fue por esto" (Enseñanza del Fa en el Fahui de la Costa Oeste 2015).

Cuando miré hacia adentro y desenterré mis apegos, me di cuenta que no lo hice bien en muchas cuestiones menores. Por ejemplo, a veces decía mentiras. No lo hice bien en asuntos monetarios. Sentía lujuria al hablar con algunos hombres. Estas escenas reflejaban brechas de las que no era consciente y a las que no le prestaba atención.

Hace unos años, prometí memorizar el Fa e incluso lo escribí. Le dije a Shifu que grabaría las palabras del Fa en mis células. Sin embargo, dejé de hacerlo en la Novena Lección y nunca lo retomé.

Todos esperamos llegar a ser buenos practicantes. Incluso hacemos promesas de que nos cultivaremos diligentemente. Pero, debido a la tentación de la sociedad de la gente común, no hacemos bien las tres cosas y dejamos de lado las promesas. Yo aún guardo mis promesas en un rincón profundo de mi corazón, pero no las cumplí. Sin embargo, aunque nos olvidemos de estas promesas, Shifu no olvida lo que dijimos, y los dioses no olvidan lo que prometimos.

Me sentí avergonzada y arrepentida cuando me di cuenta de estos apegos. Descubrí que durante mucho tiempo no había tomado en serio mi cultivación. Perseguía la supuesta felicidad de la gente común. Escondí mis apegos, no quise enfrentarme a ellos y no quise eliminarlos.

También me di cuenta que no hacía bien el envío de pensamientos rectos. Me olvidaba de enviar pensamientos rectos, me dormía o estaba distraída.

Cuando me di cuenta de todas estas brechas, empecé a enviar pensamientos rectos con una mente concentrada. Ahora puedo sentir la poderosa energía cuando envío pensamientos rectos.

Regresando a la verdadera cultivación

Durante estos 20 días, vi varias veces los vídeos de las conferencias de Shifu y regresé a la cultivación verdadera. Sentía que las capas de barro que habían cubierto mi verdadero ser comenzaban a desprenderse, y mi verdadero ser comenzaba a brillar.

La hemorragia de 20 días se detuvo cuando miré continuamente hacia adentro y me rectifiqué. Pensé en ir al hospital y me deprimí. Pero nunca olvidé que era una discípula de Dafa. Sabía que los discípulos de Dafa no pueden seguir otro camino. Solo podemos recorrer el camino de la cultivación sin desviarnos y alcanzar incondicionalmente el estándar de un cultivador.

Esta experiencia no solo me hizo profundamente consciente de la seriedad e importancia de la cultivación, sino que también me ayudó a entender más las enseñanzas de Shifu, y a profundizar mi fe en Él y en el Fa.

Quiero agradecer a Shifu por no haberme abandonado, y por haberme despertado para que pueda seguir transitando el camino de la cultivación en el tiempo que Shifu ha extendido para mí. Cultivaré firmemente mi corazón, y aprovecharé cada momento del día para lograrlo. ¡Gracias, Shifu!

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