​Ayudar a una practicante también me permitió cultivarme

(Minghui.org) A lo largo de los años, algunos practicantes ancianos de nuestra zona experimentaron tribulaciones graves de yeli de enfermedad y algunos de ellos fallecieron. Muchos de los practicantes locales enviaron pensamientos rectos de forma persistente para esos practicantes. No obstante, me di cuenta que eso podía no ser suficiente. Descubrí que algunos de esos practicantes necesitan una ayuda específica y meticulosa.

Acogiendo y ayudando a un practicante que desarrolló un tumor

La practicante Liang, a la que no había visto durante mucho tiempo me llamó a principios de mayo del 2020, estuvo llorando antes de poder hablar. Finalmente me dijo que tenía un bulto grande y duro, lo que sugería que quizás tenía cáncer.

Le pedí a Liang que viniera a mi casa. Estaba demacrada, tenía la cara de color gris, y parecía que le dolía. Dijo que le dolía el cuello, el hombro, las costillas y que a veces no podía levantar los brazos a causa del dolor. Recientemente descubrió que tenía un bulto en su cuerpo. Revisé el bulto con mis manos, en efecto había un bulto del tamaño de un huevo. Era irregular, duro, rugoso, no se podía mover y tenía los ganglios linfáticos inflamados.

Conocí la historia de Liang: Durante los últimos ocho o nueve años, desde que fue puesta en libertad de la cárcel, siempre sintió en su corazón la sospecha de que era perseguida. Tenía miedo de ser perseguida nuevamente y rara vez estudiaba el Fa. Especialmente después de ser abuela, dedicó tres años a cuidar de su nieto, dedicó al niño casi toda su energía y atención. Como consecuencia su xinxing cayó y tuvo muchos conflictos con sus familiares. El apego al resentimiento y a contender era particularmente fuerte y valoraba mucho sus intereses personales. Casi se había convertido en una persona común.

Desde que descubrió el bulto, tenía miedo de que si iba al hospital y le diagnosticaban cáncer, no la pudieran curar. Tenía miedo a morir, y no quería ir al hospital para que la examinaran y la trataran. Quería probar otros métodos pero no encontró ninguno. Estaba muy preocupada. Debido al dolor, finalmente decidió llamar a los practicantes, incluyéndome.

Sabía que, para ayudarla, debería primero ayudarla a estudiar el Fa. Entender el Fa es la clave para mejorar en la cultivación.

El Maestro dijo:

“El Fa puede revelar todos los apegos, el Fa puede erradicar todas las perversidades, el Fa puede exponer y eliminar todas las mentiras y el Fa puede fortalecer los pensamientos rectos” (Eliminen la interferencia, Escrituras esenciales para mayor avance).

No obstante, además de hacer las tareas de la casa y cuidar a su nieto de tres años, ella usaba constantemente su celular para hacer negocios por Internet. Este no era un entorno favorable y no podía seguir el ritmo de estudio del Fa, por lo que pensé que sería mejor que se quedara en mi casa. En mi casa solo estamos mi esposo y yo, y tenemos una habitación de más y un ambiente tranquilo.

Cuando le sugerí que viniera a mi casa a estudiar el Fa se preocupó. Dijo que no le había explicado a su marido su problema de salud. Dos de sus familiares tenían los mismos síntomas y fueron diagnosticados de cáncer. Fueron al hospital para ser tratados y más tarde fallecieron. Era consciente de sus dolorosas experiencias y tenía miedo que le sucediera lo mismo. Sabía que si se lo explicaba a su esposo y a sus hijos, estos le pedirían que fuera al hospital. Si se negaba e iba a mi casa, la familia no lo entendería y podrían tener una idea equivocada de Dafa.

De hecho, yo también estaba preocupada. Tenía miedo que la gente pudiera pensar que la práctica de Falun Dafa prohibía a la gente ir al hospital para recibir tratamiento. No obstante, yo tenía tiempo libre y el ambiente era adecuado para ella. ¿Cómo podía ser eso un hecho accidental? Debía haber sido arreglado por el Maestro.

El Maestro dijo: “...con el Maestro y el Fa aquí, ¿a qué le pueden temer?" (Exponiendo el Fa en Sidney).

Pensé que era una oportunidad para cultivarnos y mejorar. Si no podía ayudarla a calmarse y a estudiar el Fa, esto se convertiría en un gran problema. Le dije a Liang: “¡Tu problema también es mi problema! Mi casa es tu casa. No te preocupes por venir a mi casa, deja que convenza a tu familia. Tienes la bendición del Maestro y lo haremos bien”.

Fui a su casa, le pedí a su esposo que habláramos a solas en otra habitación. Le expliqué lo del bulto de su esposa y dijo que su esposa debía ir al hospital lo antes posible. Dije: “Si va al hospital la posibilidad de que se confirme el cáncer es muy alta y podría estar en una fase muy avanzada o terminal. Tu esposa no quiere operarse ni recibir quimioterapia. Le pregunté si quería ir al hospital y me dijo que no, no es porqué practique Falun Dafa que no quiere ir al hospital. Falun Dafa no impide a la gente que vaya al hospital si están enfermos, ella dice que el hospital no podrá curar su enfermedad, ya que dos de sus parientes tuvieron cánceres similares y que sufrieron en el hospital. Así que dijo que prefería morir que ir a un hospital y sufrir como ellos. Ya conoces su carácter, no hay manera de obligarla a nada”. Su esposo dijo: “Es como dices, tiene carácter”.

Continué: “Parece que tu mujer tiene la intención de retomar la práctica de Falun Dafa, esta puede ser la mejor opción. Sabes que dejó de estudiar el Fa y de hacer los ejercicios por miedo a ser perseguida de nuevo por el partido comunista chino (PCCh), por lo que no ha sido una verdadera discípula de Dafa. Dijo que antes de 1999 eligió practicar Falun Dafa porqué tenía una grave artritis y una enfermedad reumática que no se pudo curar durante muchos años. Solía cultivarse de forma muy diligente y tú fuiste testigo de que su artritis y su reuma desaparecieron milagrosamente después de comenzar a cultivarse.

Viendo mi sinceridad, el esposo de Liang dijo inmediatamente que no tenía objeción a que practicara Falun Dafa y dijo: “No ha practicado los ejercicios en los últimos años y ha estado muy malhumorada”.

“Me encargaré de convencerla que deje de navegar por Internet”, dijo. “El hecho de que navegue hizo que su salud empeorara. La animaré para que estudie el Fa y la cuidaré, puedes estar seguro. Me pondré en contacto contigo si surge algún problema, no debes preocuparte por eso”. Por razones de seguridad y para evitar que hubiera malentendidos, le pedí que no hablara de esto con nadie más. Aceptó de buen grado.

Cambios fundamentales después de estudiar el Fa

Liang vino a vivir a mi casa, y comenzamos a estudiar el Fa juntas. A través del estudio del Fa y de intercambiar nuestros entendimientos se dio cuenta de que no era capaz de soltar muchos apegos humanos, de que se había desviado de Dafa, que había generado yeli y había sido utilizada por las viejas fuerzas. Antes de practicar Dafa, Liang fue a un adivino que le dijo que viviría hasta los 50 años, que era su edad actual.

Liang se percató que si no estudiaba el Fa, no tendría pensamientos rectos y entonces sería una persona común con pensamientos comunes. El adivino se refería a su vida antes de practicar Falun Dafa, su vida después de practicar Falun Dafa fue arreglada por el Maestro.

Cuando Liang descubrió por primera vez que tenía problemas de salud, intentó considerarse una practicante. También recordó que algunos practicantes que habían estado haciendo las tres cosas también tuvieron yeli de enfermedad, mientras que ella había vuelto a ser una persona común. Se preguntaba: ¿Cómo podía ser posible que el Maestro y Dafa pudieran cuidar de una persona común como ella?

Estudiamos dos lecciones de Zhuan Falun cada día y enviamos pensamientos rectos de manera frecuente. El resto del tiempo estudiamos Colecciones de enseñanzas del Fa, Escrituras esenciales para mayor avance, vimos el vídeo de la "Conferencia en Australia",  entre otros. Enviamos pensamientos rectos durante al menos veinte o treinta minutos durante las horas de envío global.

Al principio, Liang echaba de menos a su nieto, cuando llovía se preocupaba por una gotera que había en el balcón de su casa y se acordaba de las tareas domésticas. Tenía muchas interferencias mientras estudiaba el Fa y hacía los ejercicios. No estaba atenta, se dormía y no paraba de bostezar en cuanto comenzaba los ejercicios. Cuando hacía la meditación sentada a la media hora se movía debido al dolor y también durante el segundo ejercicio, le resultaba difícil mantener la rueda del Fa durante una hora. Después de ver su estado miré adentro y vi que yo también quería estar tranquila.

“Has llegado al límite del peligro” le dije. “Con esta oportunidad, ¿no puedes dejar de lado los pensamientos de gente común y concentrarte en estudiar el Fa como una discípula? ¿Te estás comportando como una discípula de Dafa? ¿Eres digna del Maestro?”. Ella lloró y se arrodilló frente al cuadro del Maestro para decirle que podía y lo haría bien y le pidió ayuda.

Tan pronto como mejoró su entendimiento respecto a su situación basándose en el Fa, el estudio y la realización de los ejercicios mejoraron. Cuando envió pensamientos rectos los estados erróneos que tenía anteriormente desaparecieron, pudo centrarse y hacerlo durante más de una hora. Cuando estudiábamos el Fa, mucha parte del tiempo podía sentarse con las piernas cruzadas. Ahora es capaz de hacer la meditación sentada durante más de una hora y media. Dijo que vio a otros practicantes sentados en la posición de doble loto mientras estudiaban el Fa y que realizaban la meditación sentada durante mucho tiempo. Ella pensó que nunca sería capaz de hacer eso, pero no esperaba que pudiera conseguirlo tan rápido. Entendió el principio del Fa enseñado por el Maestro: “Tan alto es el xinxing, tan alto es el gong” (Primera Lección, Zhuan Falun).

Liang está muy agradecida al Maestro por no haberse dado por vencida. Ella también se preguntó sobre el impacto en los seres conscientes.

El Maestro dijo:

“…ya que yo habría estado transformando todo lo que los Dafa dizi adeudan en compensaciones benevolentes para los seres conscientes, y todos hubieran recibido la mejor compensación. Si él no hubiera podido hacerlo, entonces Shifu lo hubiera ayudado a hacerlo” (Exponiendo el Fa durante el festival de la linterna 2003).

Enviamos pensamientos rectos y pensamos en aquellas vidas que fueron dañadas por Liang.

Al enviar pensamientos rectos, vi el tumor de Liang desde otra dimensión, este era un nido con forma circular con serpientes negras y marrones en su interior. La escena fue muy clara, una vez que envié los pensamientos rectos, cuatro o cinco serpientes salieron rápidamente una detrás de la otra.

Cuando acabamos de enviar pensamientos rectos, Liang dijo que sentía su cuerpo más relajado. Cuando le expliqué lo que vi, dijo que esas cosas eran producidas por la lujuria. En ese momento, se dio cuenta del daño que genera el no dejar la lujuria. También vi un pequeño dragón que no quería irse. Liang recordó inmediatamente que el signo del zodiaco de su yerno era el dragón. Estuvo viviendo en su casa después de casarse con su hija. A lo largo de los años hubo conflictos entre su yerno, su familia política y ella. Durante los conflictos, ella se consideró como una persona común y no recordó mirar adentro. Ella tenía resentimiento y quejas hacia ellos y no les había aclarado la verdad sobre Dafa. Dijo que fue el Maestro quién utilizó este método para ayudarla a darse cuenta de la gravedad del problema y que la siguiente vez que esto suceda se comportará mejor con su yerno y sus familiares, resolverá los conflictos y les aclarará la verdad.

En nuestro entorno de cultivación pura, Liang cambió rápidamente y su estado mental y su semblante mejoraron rápidamente. No obstante, de repente un día descubrí que su reacción no era correcta. Cuando le pregunté sobre ello, me dijo: “Estoy muy arrepentida con el Maestro”. Le pregunté qué era lo que ocurría, dijo que inconscientemente se tocó el bulto y que notó que este parecía que se había hecho más grande de nuevo. Dijo que sabía que no era cierto, pero no había conseguido abandonar el miedo.

Me di cuenta que esta era realmente una prueba de vida o muerte para Liang. De hecho, ¿Cuál era la diferencia entre un bulto pequeño o grande? Dije: "Si tienes algún pensamiento, el mal creará uno falso para ti. ¿No es esto revelar de nuevo tu miedo, tu sospecha y tu deseo?”. La animé para que tratara esto como una cosa buena y que se deshiciera de él rápidamente; que no le siguiera la corriente. Despertó de nuevo, diciendo que dejaría todo en manos del Maestro y que creía firmemente en el Maestro y en el Fa. Recordó las enseñanzas del Maestro:

“Por eso, ¡uno mismo no puede aflojar! Una vez que se afloja, las viejas fuerzas ya tienen pretextos para aprovechar, incluso te quitan la vida. ¡Estos ejemplos, estas lecciones dolorosas son demasiadas!” (Explicando el Fa en Washington D.C. 2018).

Comparado con unos meses atrás, Liang cambió completamente. No tiene miedo de tocar el bulto, el dolor ha desaparecido. Cuando volvió a casa, su esposo la felicitó por haber ganado peso. Los miembros de su familia se alegraron mucho de ver sus cambios.

Después de que Liang regresó a su casa, no solo participó en el estudio grupal del Fa, sino que también estudiaba en casa y enviaba pensamientos rectos más a menudo. Se dio cuenta que debía salir a esclarecer la verdad y convencer a la gente que hiciera las tres renuncias y ser una cultivadora durante el periodo de rectificación del Fa. Al mismo tiempo, encontró los resentimientos hacia su suegra, cuñada, cuñado y hacia otros parientes. Miró adentro y se dio cuenta de cuál era su problema. Con un corazón bondadoso, compró regalos y se disculpó con ellos. Restableció la imagen de un discípulo de Dafa y lo validó. Sus familiares y amigos vieron de nuevo en ella la belleza de Dafa.

Ayudar a Liang mejoró mi cultivación

Mirando atrás, durante años no fui realmente diligente en mi cultivación. Antes de que Liang viniera a mi casa, otro practicante vino a estudiar el Fa y me ayudó a mejorar.

La llegada de Liang me ayudó mucho, ayudarla fue también para cultivarme. Sus apegos humanos eran como un espejo enfrente mío. Los problemas que tenía eran más o menos los mismos que los míos. Algunos eran incluso más serios, como los celos, la envidia, el contender, la búsqueda de fama y fortuna, la hipocresía, autoprotección, el gusto por escuchar cumplidos, no aceptar las críticas y no recordar a Dafa ni al Maestro al atravesar pruebas durante los sueños. Tampoco superé sin problemas las pruebas de lujuria y el deseo.

En casa, antes tenía una actitud muy mala cuando hablaba con mi esposo. Una practicante me dijo que era antipática. Dijo: “Esto no es cultivación genuina, tu comportamiento en casa es tu verdadero yo. En otras circunstancias no lo muestras porque finges ser amable”. Estaba acostumbrada a comportarme así durante mucho tiempo y no me daba cuenta de mis problemas. Esta vez, cuando Liang y otros practicantes me señalaron esto me sentí incómoda, no quise escucharlos y traté de ocultarlos. Sin embargo, inmediatamente me di cuenta que estaba equivocada y miré adentro lo antes posible. También me di cuenta de que esos malos pensamientos no eran mi verdadero yo. Entonces, no los reconocí, no los quise y comencé a eliminarlos con pensamientos rectos.

En el pasado, era egoísta y estaba muy envenenada por el adoctrinamiento del PCCh. Pensaba que siempre tenía razón. Normalmente no reconocía mis errores, incluso si cometía un error, discutía, especialmente con mi marido. Después de cultivarme, muchos de estos apegos siguen existiendo, pero ahora, al final puedo decir: “Lo siento, me he equivocado”.

Un ambiente de cultivación bueno, no solo ayuda a los practicantes a mejorar sino que también es bueno para los demás. También me percaté que la ayuda entre los practicantes debe ser desinteresada y minuciosa. El ambiente de cultivación del estudio del Fa en grupo es la cultivación genuina dejada por el Maestro, así que no debemos dejar este ambiente.

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