​Mis problemas de visión desaparecieron la primera vez que practiqué los ejercicios de Falun Dafa

(Minghui.org) Ahora tengo 14 años. No fue hasta que asistí al jardín de infancia cuando tenía 4 años que mi familia se dio cuenta de que tenía problemas de visión. No podía ver lo que mi profesora escribía en la pizarra. Mis padres me llevaron a un hospital y descubrieron que sufría esotropía (bizquera y miopía). Tenía que llevar gafas correctoras de 700 grados para el resto de mi vida.

Los médicos me recetaron que realizara 30 minutos de ejercicios oculares cada noche con un instrumento para ayudar a corregir mis problemas de visión. Lo hice durante dos años, pero no sirvió de nada.

Mi tía abuela vino a visitarnos en noviembre de 2011, cuando yo tenía 6 años, y rara vez nos visitaba porque vivía lejos. También había sido encarcelada durante muchos años por perseverar en su creencia en Falun Dafa y acababa de ser liberada. Aunque era la primera vez que la veía, me sentí cercano a ella. Cuando se enteró de mi situación, me dijo que repitiera sinceramente: "Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno, Falun Dafa es bueno".

Hice las cinco tablas de ejercicios de Falun Dafa con ella. Aunque me sentía tan cansado que lloré cuando hice el segundo ejercicio (la postura de pie), no bajé los brazos. A la mañana siguiente no me puse las gafas, pero no sé por qué.

Nadie se dio cuenta de que no llevaba las gafas hasta que la hermana de la abuela se dio cuenta esa noche. Mis ojos eran completamente normales. La ciencia médica no podía explicarlo. ¡Gracias, Maestro!

La primera vez que leí Zhuan Falun, cuando mamá y yo leímos la Segunda Lección, Sobre el asunto del tianmu (Segunda Lección, Zhuan Falun), mi tianmu (tercer ojo) se abrió. Vi Fo dorados cuyos cuerpos irradiaban rayos dorados. Vi el Fashen del Maestro en cada palabra de Zhuan Falun. Cuando estaba recitando Hong Yin vi al Maestro darme un pulgar hacia arriba en señal de ánimo.

Mamá y yo solo teníamos un ejemplar de Zhuan Falun, así que nos turnábamos para leerlo. Una noche, mientras mamá leía, en otra dimensión vi aparecer un ejemplar del Libro que se abrió en la página que estábamos leyendo. Fue asombroso. ¡En ese momento toda la habitación se llenó con un Falun giratorio!

La práctica de Falun Dafa también ha abierto mi sabiduría. Mis calificaciones están entre las mejores de mi grado y soy el mejor estudiante de mi clase. Me asimilo con los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia y tengo una muy buena relación con mis compañeros de clase. Mis compañeros dicen que soy una buena persona.

¡Gracias Maestro!

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