(Minghui.org) El 7 de junio, el gobernador de Texas firmó la Ley TX SCR3, un proyecto de ley que "condena la práctica de la sustracción involuntaria de órganos en China", después de que fuera aprobada tanto por el Senado como por la Cámara de Representantes del estado.

Este proyecto de ley se presentó en el Senado estatal en enero de este año. Se aprobó en abril en el Senado, y en la Cámara de Representantes en mayo.

"Durante dos décadas, el régimen comunista de China se ha dedicado a la vil práctica de sustraer por la fuerza órganos humanos para trasplantes", dice el proyecto de ley, que también enumera numerosas pruebas de la sustracción forzada de órganos, e insta al gobierno de Estados Unidos y a la comunidad internacional a detener esta atrocidad. También anima a la comunidad médica a concienciar sobre la sustracción forzada de órganos para que los tejanos no cometan involuntariamente este delito al hacer turismo de trasplantes en China.

Un problema de moralidad

Varios periódicos hicieron eco de esta nueva ley. El Dallas Morning News, el periódico más importante de Dallas, informó de la aprobación del proyecto de ley en la legislatura estatal el 1 de junio. Citando información de medios de comunicación internacionales, el informe decía que el partido comunista chino (PCC) tenía como objetivo a cientos de miles de detenidos para la sustracción forzada de órganos, siendo los practicantes de Falun Dafa el principal objetivo.

The Facts, el periódico más importante del condado de Brazoria, publicó una carta de la Sra. Jiang, residente local, en la que agradecía a los representantes estatales su apoyo a este proyecto de ley. Según Donate Life Texas, el único registro oficial de donantes de órganos y tejidos del estado, cerca del 60% de los residentes del condado de Brazoria se han registrado para la donación de órganos. Sin embargo, se necesitan varios años para encontrar un riñón o un hígado compatible. En China, menos del 0,02% de la población está registrada para la donación de órganos, pero estos pueden obtenerse en dos semanas. Los investigadores descubrieron que los presos de conciencia, incluidos los practicantes de Falun Dafa, habían sido asesinados por sus órganos en China.

Al plantear esta cuestión moral, el SCR3 ayudará a que más personas tomen conciencia de esta tragedia. Antes de ir a China para un trasplante de órganos, la gente debería evaluar la situación y reconsiderar su decisión si los órganos prometidos se tomaran de donantes no consentidos.

El New Braunfels Herald-Zeitung, de la zona de San Antonio, publicó una carta de la Sra. Lamb el 19 de junio. Elogiaba a la SCR3 porque informaría a los tejanos sobre los riesgos de someterse a trasplantes de órganos en China. La sustracción forzada de órganos es un crimen inhumano, y quería agradecer el apoyo legislativo en esta materia.

La Gaceta del Condado de Montgomery, en el área del Gran Houston, publicó el 20 de junio una carta de una lectora llamada Liu Jing. Ella estaba en China cuando el PCCh comenzó a reprimir a Falun Dafa en 1999, y hubo una propaganda de odio masiva contra Falun Dafa. Al no tener acceso a noticias independientes, se creyó la propaganda difamatoria. No supo lo que era realmente Falun Dafa hasta 2004, cuando se trasladó a EE. UU. Un amigo chino le contó la realidad de Falun Dafa y los beneficios que aportaba la práctica. Posteriormente, comenzó a practicar Falun Dafa.

Debido a su propia experiencia, la Sra. Liu sabía que muchos chinos han sido engañados por el PCCh. Como resultado, ha estado trabajando con otros practicantes informando tanto a los chinos como a los estadounidenses sobre Falun Dafa y la persecución. Cree que la supresión llegará a su fin cuando más gente conozca la brutalidad y las mentiras del PCCh.

Declaración de testigos

Austin American-Statesman, el principal periódico de Austin, publicó el 16 de junio una carta del residente local William Yu. Agradeció a los legisladores la aprobación de la SCR3, diciendo: "El derecho a buscar tratamiento a través del trasplante no debe cambiarse por el derecho a la vida de otra persona".

El padre de William, el Sr. Yu Xinhui, fue uno de los testigos que declararon en la audiencia legislativa. Por practicar Falun Dafa, el anciano Sr. Yu fue condenado a seis años y fue torturado en prisión. "Mientras estuvo allí, fue sometido a exámenes físicos y análisis de sangre que, obviamente, no eran para su salud, ya que también fue torturado, sino que eran para saber si era compatible con los órganos solicitados por otras personas", escribió William.

En su testimonio, el anciano Sr. Yu dijo que muchos reclusos conocían sobre la sustracción de órganos y que los guardias la utilizaban a menudo para amenazar a los reclusos que desobedecían las órdenes. Un médico de la prisión era de la misma ciudad que el Sr. Yu y lo confirmó. El médico dijo que los practicantes de Falun Dafa están muy sanos y que sus órganos son los mejores. Los reclusos a menudo se drogaban o eran alcohólicos, por lo que sus órganos a menudo eran inadecuados. El médico también insinuó que si el Sr. Yu no abandonaba su práctica de Falun Dafa, sus órganos internos podrían ser tomados para un trasplante, incluyendo su corazón, hígado, bazo y pulmones.

El Sr. Yu era de la ciudad de Guangzhou. Después de empezar a practicar Falun Dafa en 1994, se curó la grave enfermedad gástrica que le molestaba desde hacía muchos años. Esto le dio esperanza de vida.

Después de que el PCCh comenzó a perseguir a Falun Dafa, empezó a hablar a la gente de su entorno sobre los hechos de Falun Dafa. Fue detenido en 2001 y recluido en la prisión de Sihui, en la provincia de Guangdong, durante seis años, en los que fue torturado, golpeado, humillado e inyectado con drogas desconocidas.

El Sr. Yu dijo que la prisión trasladaba a algunos detenidos, de una a varias docenas, cada año. Nadie sabía adónde los llevaban. Un día de 2006, a medianoche, llegaron varios vehículos, entre ellos autobuses, vehículos militares y vehículos de emergencia médica. Muchos agentes de policía armados entraron en la prisión y dijeron a los detenidos que no miraran, que no hablaran y que se quedaran en la cama de cara a la pared. Cualquiera que fuera llamado por su nombre debía marcharse sin llevarse ninguna pertenencia. Todos los que estaban en la celda estaban asustados y desesperados, recordó el Sr. Yu. Tres detenidos fueron llamados en ese momento. También se enteró de que se llevaron a algunos detenidos de otras celdas. Sus pertenencias fueron abandonadas y nunca volvieron.

Al final de su testimonio, el Sr. Yu expresó su esperanza de que más personas ayuden a detener el crimen de la sustracción de órganos, para que se puedan salvar vidas inocentes.

Apoyo unánime

Tras la aprobación unánime en el Senado estatal el 15 de abril, la SCR3 también fue aprobada por unanimidad en la Cámara de Representantes estatal el 20 de mayo. El gobernador Greg Abbott la convirtió en ley el 7 de junio de 2021.

El proyecto de ley comenzó citando las conclusiones del Tribunal Independiente de China en 2019 y describe el turismo de trasplantes en China. "Falun Dafa, una práctica espiritual centrada en los valores de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, se hizo inmensamente popular en la década de 1990; en julio de 1999, el partido comunista chino lanzó una persecución intensa a nivel nacional diseñada para erradicar la práctica espiritual", escribió. "Freedom House informó en 2015 que los practicantes de Falun Dafa son las principales víctimas de la sustracción forzada de órganos y se enfrentan a un riesgo elevado de morir o ser asesinados bajo custodia".

Además, citaba los compromisos del exsecretario de estado Mike Pompeo. "Hacemos un llamamiento al gobierno de la RPC para que ponga fin inmediatamente a sus abusos y maltratos contra los practicantes de Falun Dafa, libere a los encarcelados por sus creencias, [...] y rinda cuentas sobre el paradero de los practicantes desaparecidos. Veintiún años de persecución a los practicantes de Falun Dafa es demasiado tiempo, y debe terminar", dijo el 20 de julio de 2020.

"La 87.ª Legislatura del Estado de Texas condena enérgicamente la práctica china de la sustracción forzada de órganos", escribió la ley. Además, la legislatura "anima a la comunidad médica a educar a los tejanos sobre los riesgos de viajar a China para los trasplantes de órganos para ayudar a prevenir que los residentes de Texas se involucren involuntariamente en el asesinato en forma de sustracción forzada de órganos de prisioneros de conciencia".

En conclusión, la legislatura "insta respetuosamente al Congreso y al Presidente de los Estados Unidos a que aprueben leyes y adopten medidas que prohiban la colaboración entre las empresas médicas y farmacéuticas estadounidenses y cualquier contraparte china vinculada con la sustracción forzada de órganos, que prohiban la entrada en los Estados Unidos de quienes hayan participado en la sustracción no ética de tejidos y órganos humanos, y que prevean el enjuiciamiento de esas personas".

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