(Minghui.org) El domingo 25 de Abril de 2021, los practicantes de Falun Dafa en Roma realizaron actividades en la Plaza San Silvestro para conmemorar la Apelación del 25 de Abril. Hicieron una demostración de los ejercicios e informaron a la gente sobre cómo el PCCh (partido comunista chino) ha perseguido esta práctica espiritual durante 22 años.

Los practicantes realizaron actividades en la Plaza San Silvestro el 25 de abril de 2021.

Los practicantes demuestran los ejercicios de Falun Dafa como parte de sus actividades.

Los turistas y los lugareños se detuvieron para charlar con los practicantes.

El día era cálido y soleado y muchas personas estaban afuera disfrutando del clima primaveral. Atraídos por la música tranquila y relajante mientras los practicantes demostraban los ejercicios, los transeúntes se detenían a mirar. Leían la información y varios dijeron que no entendían por qué el régimen comunista perseguiría a un grupo de personas pacíficas que siguen los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Varias personas dijeron que apreciaban a los practicantes por contarle al mundo sobre estos importantes temas.

Dos mujeres les dijeron a los practicantes que sabían que el régimen comunista chino siempre encubría la verdad, tal como encubrieron la verdad del virus del PCCh (coronavirus).

Después de hablar con los practicantes, un hombre los animó a seguir contando los hechos a la gente. Deseó a los practicantes éxito en poner fin a la persecución.

Antecedentes

Del 23 al 24 de abril de 1999, oficiales de policía en Tianjin, una ciudad cercana a Beijing, agredieron y arrestaron a más de 40 practicantes de Falun Dafa después de que los practicantes habían ido a la oficina de una editorial para discutir errores en un artículo recientemente publicado que atacaba a Falun Dafa. A medida que se difundió la noticia de los arrestos y más practicantes indagaban a los funcionarios, estos les indicaron que tenían que presentar sus preocupaciones a Beijing.

Al día siguiente, 25 de Abril, unos 10.000 practicantes de Falun Dafa fueron espontáneamente a la oficina central de apelaciones en Beijing, como habían sido instruidos por los funcionarios de Tianjin. La reunión fue pacífica y ordenada. No bloquearon las aceras ni detuvieron el tráfico. Se llamó a representantes de los practicantes para que se reunieran con el primer ministro chino, Zhu Rongji, y su personal. Esa noche, se resolvieron las preocupaciones de los practicantes; los practicantes arrestados en Tianjin fueron liberados y todos se fueron a sus casas.

Después de ese día, el mundo vio a China bajo una luz diferente. Después de la Masacre de Tiananmen una década antes, el hecho de que pudiera ocurrir una protesta pacífica en China y resolverse el mismo día parecía positivo.

Sin embargo, Jiang Zemin, entonces jefe del PCCh, estaba decidido a acabar con Falun Dafa. Encuadró la protesta pacífica como un ataque grupal al complejo del gobierno central del PCCh y lo usó como la principal excusa para comenzar la campaña de persecución en julio de 1999.

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