Mi entendimiento de la dependencia humana a los instrumentos modernos

(Minghui.org) Me gustaría compartir mi entendimiento actual de la dependencia de la sociedad humana a los instrumentos modernos.

El Maestro dijo:

“Los gongneng son capacidades latentes del cuerpo humano, pero con el desarrollo de nuestra sociedad humana, el pensamiento del cerebro humano se vuelve cada vez más y más complicado, da más y más importancia a la realidad y depende más y más de los llamados instrumentos modernos; de esta manera, las capacidades humanas innatas se atrofian cada vez más” (Novena Lección, Zhuan Falun).

Los instrumentos modernos aportan una gran comodidad a la gente, mientras que los antiguos parecían toscos y sencillos. A la gente de la antigüedad le costaba más esfuerzo y trabajo hacer las cosas.

Sin embargo, el desarrollo de la sociedad humana está dispuesto por los seres divinos para ayudar a las personas a eliminar el yeli (karma) en el proceso de trabajo duro, y al mismo tiempo restringir los deseos humanos. De esta manera, la virtud de las personas en la antigüedad era mayor que la de las personas modernas. Su cualidad de iluminación también era mejor, y su recta fe en Dios era firme.

Los instrumentos aportados por la ciencia moderna han reducido considerablemente el trabajo humano, lo que ha dado lugar a la acumulación de yeli (karma). Al mismo tiempo, han estimulado los deseos de la gente. En consecuencia, la gente se pierde más profundamente en este laberinto del mundo humano y ha perdido su fe en los dioses.

Los antiguos tenían grandes virtudes y capacidades sobrenaturales. En aquella época había menos instrumentos, pero la gente era más feliz. Era una época en la que coexistían los seres divinos y los humanos, y la gente solía utilizar los poderes sobrenaturales para hacer cosas.

Zhuangzi, un famoso filósofo chino que vivió alrededor del siglo IV a.C., relata una historia en el libro Cielo y Tierra. La historia describe cómo un estudiante de Confucio, Zigong, vio a un anciano trabajando en su jardín. El anciano transportaba agua a mano, lo que le suponía un gran esfuerzo. Zigong le dijo: "Hay una manera de hacerlo con poco esfuerzo. ¿No te gustaría conocerla?".

El jardinero dijo que sí, por lo que Zigong respondió: "Puedes utilizar un mecanismo que tiene peso en la parte trasera y es ligero en la parte delantera. Usando este tipo de palanca, puedes hacer subir el agua rápida y fácilmente".

En el rostro del anciano surgió la ira y dijo: "Mi maestro dijo que quien utiliza herramientas complicadas se esfuerza por encontrar la forma de diseñarlas. En el proceso, desarrollará tácticas en su mente. Una vez que la mente de una persona se vuelve complicada, pierde su simplicidad. Cuando una persona pierde su simplicidad, va en dirección opuesta a su verdadero ser original. Llevo el agua a mano, no porque no conozca la herramienta que has dicho, sino porque no quiero usarla".

No entendí la historia hasta hace poco. Con la aparición de instrumentos cada vez más modernos, los instintos innatos del hombre se han degenerado. Esta degeneración ha sido lenta hasta que aparecieron la ciencia y la tecnología modernas. Ahora parece que los humanos tienen el control de los instrumentos modernos, pero si lo miramos desde otra perspectiva, podemos ver que los instrumentos modernos y los ordenadores controlan a los humanos, porque los humanos no pueden hacer casi nada sin estas tecnologías electrónicas.

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