​Anciana desarrolla enfermedad grave en prisión

(Minghui.org) Una mujer de 66 años desarrolló una afección cardíaca y presión arterial alta mientras cumplía condena por su fe y por practicar Falun Gong, una disciplina espiritual de ejercicios y meditación perseguida por el régimen comunista chino desde 1999. Sin embargo, las autoridades penitenciarias impidieron que su familia solicitara su libertad condicional por motivos médicos exigiendo una fianza elevada.

La Sra. Tang Gemei, residente del condado de Pingjiang, provincia de Hunan, se quedó en la casa de su hijo en la ciudad de Shunde, provincia de Guangdong para ayudar a cuidar a su nieto en 2019. En su tiempo libre, salía a distribuir material informativo sobre Falun Gong y a crear conciencia sobre la persecución.

El 16 de mayo de 2019 fue denunciada a la policía y seguida por agentes vestidos de civil en su camino a casa. Los agentes saquearon el lugar de su hijo y la arrestaron. Primero fue detenida en el centro de detención de Ronggui y luego trasladada a un hospital después de que desarrolló algunas condiciones desfavorables de su salud. A su familia se le permitió verla una vez a través de una videoconferencia cuando estaba en el hospital.

Durante la audiencia virtual, las autoridades encontraron a una mujer que se hacía pasar por ella. Solo después de que su hijo señaló que la mujer en el video no era su madre, las autoridades finalmente mostraron a la Sra. Tang acostada en la cama del hospital.

Posteriormente, fue sentenciada a 3,5 años de prisión con una multa de 5.000 yuanes.

Desde que fue llevada a la prisión de mujeres de la provincia de Guangdong el 10 de mayo de 2020, su familia no ha podido visitarla ni una sola vez. En una carta enviada por la prisión en diciembre de 2020, su familia se enteró de que había desarrollado una afección cardíaca grave, presión arterial alta y aterosclerosis carotídea (el endurecimiento de las arterias carótidas).

La familia de la Sra. Tang ahora está muy preocupada por su salud y las posibles complicaciones de sus síntomas. Tenían la intención de solicitar la libertad condicional médica para ella, pero las autoridades de la prisión exigieron una fianza de 100.000 yuanes antes de aprobar la solicitud. Al no poder pagar el dinero, su familia tuvo que abandonar la solicitud.

Persecución en el pasado

La Sra. Tang solía trabajar en una compañía eléctrica antes de jubilarse. Se inició en Falun Gong en octubre de 1997 y reconoce que la práctica mejoró enormemente su salud. Después de que el régimen comunista ordenara la persecución en 1999, fue arrestada y detenida varias veces por defender su fe.

En octubre de 2001 fue arrestada por primera vez, después de que la denunciaran a la policía por intentar impedir que los funcionarios de su lugar de trabajo escribieran mensajes difamatorios sobre Falun Gong. Durante su detención de 37 días en el centro de detención del condado de Pingjiang, las guardias la mantuvieron en confinamiento solitario durante tres días y le vertieron agua fría en el cuerpo tres veces, después de descubrir que hacía los ejercicios de Falun Gong. Su familia pagó más de 1.000 yuanes como multa y 400 yuanes por su comida a cambio de su liberación.

Nuevamente fue arrestada en agosto de 2002 y saquearon su casa. La policía abrió la puerta de su casa. En la oficina de seguridad nacional, la policía la interrogó durante cuatro días. No le permitieron dormir ni sentarse y la obligaron a ponerse de pie o arrodillarse. Cuando ella se negó a obedecer, el oficial Li Jianzhou la golpeó con un garrote de madera. Cuando ella todavía se negó a arrodillarse, Li la golpeó con un garrote más grueso.

Esta vez, fue detenida durante siete meses y liberada el 27 de febrero de 2003. La obligaron a pagar 1.000 yuanes por la comida y una multa de 1.500 yuanes.

Fue arrestada y su casa fue saqueada nuevamente el 4 de noviembre de 2003. Las autoridades la mantuvieron en el centro de detención del condado durante 30 días y a menudo la esposaron y encadenaron.

Después de su siguiente arresto en diciembre de 2006, la Sra. Tang fue sentenciada a tres años en la prisión para mujeres de la ciudad de Changsha y sometida a varios métodos de tortura por negarse a renunciar a Falun Gong.

***

Todos los artículos, gráficos u otros contenidos publicados en Minghui.org están protegidos por los derechos de autor. Al reimprimir y redistribuir el contenido para uso no comercial, se pide indicar el título del artículo y su enlace original.