(Minghui.org) Después de ser arrestado y liberado varias veces, un maestro jubilado de 82 años en la ciudad de Shenzhen, provincia de Hebei, fue sentenciado a 10 años en enero de 2021 por su fe en Falun Gong.

Falun Gong, también conocido como Falun Dafa, es una antigua disciplina espiritual de ejercicios y meditación que perseguida por el régimen comunista chino desde 1999.

El Sr. Li Dengchen fue arrestado por primera vez en su casa el 22 de octubre de 2018. La policía registró su residencia y confiscó sus objetos de valor por una suma de 150.000 yuanes. Debido a su presión arterial alta, el centro de detención de la ciudad de Shenzhen se negó a admitirlo y fue liberado.

El Sr. Li regresó a la comisaría de policía local al día siguiente y exigió la devolución de sus bienes confiscados, pero fue en vano.

Días después, el Sr. Li notó que alguien había escalado su cerca y entró a su casa mientras él estaba afuera. Sospechaba que fue la policía la que intentó encontrar más artículos relacionados con Falun Gong en su casa. Decidió vivir fuera de su casa para evitar una mayor persecución.

Solo un mes después, el 23 de noviembre, fue arrestado nuevamente y admitido en el centro de detención de la ciudad de Shenzhou. Antes de su segundo arresto, la policía extorsionó a su familia por 1.700 yuanes alegando una supuesta "tarifa de examen físico".

El Sr. Li desarrolló una condición médica crítica en los pulmones y fue tratado a una unidad de cuidados intensivos en 2019. Fue puesto en libertad bajo fianza el 26 de abril. Para entonces, se había vuelto demacrado, incontinente e incapaz de cuidarse solo. También tenía las piernas hinchadas.

Después de reanudar la práctica de Falun Gong en casa, se recuperó gradualmente. Sin embargo, las autoridades no dejaron de atacarlo.

A fines de julio de 2020, el Sr. Li recibió una notificación para comparecer ante el tribunal por su caso. Volvió a vivir fuera de casa durante un mes para esconderse de la policía.

En enero de 2021, fue arrestado una vez más y se le impuso directamente una sentencia de diez años. Ahora lo han llevado a la prisión de Baoding para cumplir una condena.