Miembros de alto rango del PCCh en Beijing están despertando a la verdad

(Minghui.org) Muchos practicantes se dan cuenta de que las elecciones de EE. UU. de 2020 son fundamentales en la batalla entre el bien y el mal: la interferencia detrás de escena proviene del espectro del partido comunista chino (PCCh). Para eliminar estas sustancias negativas es muy importante aclarar los hechos a la gente en la fuente. Me gustaría hablar de mis experiencias mientras llamaba a Beijing.

Funcionarios de alto nivel creen que el Cielo eliminará el PCCh en cualquier momento

Cuando llamaba antes a los funcionarios del PCCh en Beijing, eran arrogantes y groseros. Sus actitudes han cambiado recientemente. Debido a las elecciones, los practicantes locales decidieron coordinar sus esfuerzos. El primer día en que casi todos los practicantes locales llamaron por teléfono, nueve personas decidieron renunciar al PCCh. Bromeé con otro practicante de que era raro escuchar a tanta gente decir "¡Gracias!" en un día.

La mayoría de los números a los que llamé pertenecían a la agencia central del PCCh. Al principio, no me centré en animarlos a que renunciaran al PCCh. Pensé: "Es muy difícil que accedan a renunciar al PCCh por teléfono". Despertar la conciencia de estos funcionarios de alto nivel limpiará aún más los espectros del PCCh que los están controlando. Esto también ayudará a desmantelar los factores del PCCh que interfieren con la reelección del presidente Trump". Después de que mis llamadas telefónicas se realizaron, me sorprendieron con la guardia baja por sus respuestas.

Cuando llamé a las primeras personas y las saludé, estaban muy tranquilos, y dijeron: "¡Hola!". Me sorprendió que cada uno de ellos fuera tan educado. O bien escuchaban en silencio, o rápidamente decían, "¡Gracias!". Más tarde ajusté mi tono para que sonara más decidido. Como resultado, algunos estuvieron de acuerdo en renunciar al PCCh.

La mayoría de estos miembros de alto rango del PCCh tienen una mejor comprensión de la situación actual, tanto en el país como en el extranjero, que la persona promedio. Así que un enfoque directo es mejor. Si somos firmes y no dejamos lugar a dudas, entonces sus verdaderos pensamientos estarán en control y estarán dispuestos a renunciar al PCCh.

Hubo algunos casos interesantes: Accidentalmente llamé a algunas personas y terminé ayudando a la gente a renunciar al PCCh. Una vez, dije el nombre de alguien incorrectamente. Al principio, escuchó en silencio, pero cuando me dirigí a él y le dije "¡Hola!", pareció sorprenderse. Sentí que no era la persona a la que pretendía llamar. Cuando miré mi expediente me di cuenta de que había cometido un error. Le dije: "Lo siento mucho. Me equivoqué de nombre". Dije: "Sr. fulano de tal, ¿cómo está?". Hizo una pausa y luego dijo impaciente: "¿Qué pasa?". Le dije: "Llamé para decirle por qué millones de chinos están renunciando al PCCh".

Le dije: "Nuestros antepasados siempre respetaron al Cielo y a los dioses. ¿Podría usar "respetar el Cielo" como seudónimo para ayudarte a dejar el partido y asegurar tu seguridad?". Inmediatamente respondió: "¡Claro!". Luego le dije que mucha gente se siente bendecida después de decir: "¡Falun Dafa es bueno! ¡Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno!". Él lo repitió y luego me agradeció antes de colgar.

Sentí una resistencia inicial de él porque no dijo nada cuando tomó la llamada. Pero después cambió. Me di cuenta de que una razón era porque mi tono era muy respetuoso y pacífico. Bajó la guardia y se relajó y pude hablar con su verdadero ser.

Una vez, le dije a otro funcionario: "¡Hola señor!". Entonces oí una voz femenina poco amistosa que decía: "¿Quién es?". Dije: "¿Es usted tal y tal de un cierto departamento?". Ella dijo: "No. No soy". Le dije: "¿Pero eres su colega?". Ella se quedó en silencio. Levanté la voz y dije: "Llamé para transmitirle este buen mensaje, pero te lo diré a ti". Luego hablé brevemente con ella sobre renunciar al PCCh.

Parecía haberse convertido en una persona diferente, y su tono se volvió amigable. Cuando le dije que mucha gente había renunciado al PCCh y le sugerí un seudónimo, ella inmediatamente respondió: "¡Claro!". Cuando le pedí que transmitiera el mensaje para ayudar a su familia a renunciar al PCCh y recordar la frase, aceptó.

Después de colgar, cuando busqué el nombre en el archivo, aún me parecía que era un nombre de hombre. Quizás porque me disculpé con ella, se relajó. Aunque parecía un error al azar, podría no ser tan accidental. Por este "error" fui capaz de contactarla a ella. Durante el proceso, también seguí eliminando mis nociones y otros apegos.

El nombre de un hombre era similar al de una mujer, así que me dirigí a él como "Sra. fulana de tal". Después de aclarado eso, en un minuto pude despertar su conciencia, y aceptó renunciar al PCCh. Entonces colgó.

Me di cuenta de que la mayoría de las personas a las que llamé aceptaron renunciar al PCCh. Algunos estaban preocupados por proteger sus propios intereses, o dudaban porque pensaban que sus teléfonos estaban intervenidos y no se atrevían a hablar. Cuando entendieron por qué los llamábamos, se relajaron y estuvieron dispuestos a renunciar al partido. Me pregunté por qué las llamadas telefónicas que hice por error, o cuando me dirigí incorrectamente a la persona, resultaron ser personas que fácilmente renunciaron al PCCh. Sentí que fue porque les hice sentir que yo era optimista y amable -tal vez fue más personal y nos acercó más.

El segundo día experimenté algunas interferencias que afectaron mi capacidad de hacer llamadas telefónicas efectivas. Tuve que recordarme que si no me cultivaba bien, eso afectaría directamente a la salvación de mis seres consientes.

Respeto y gratitud para los practicantes

Cuando llamé a un funcionario del gobierno, oí un ruido de fondo. Dije: "Sr. Wang, ¿podría por favor ir a un lugar tranquilo? Quiero decirle algo muy importante". Después de un rato, no pude oír ningún ruido de fondo, así que dije su nombre otra vez. Cuando respondió, empecé a hablar.

Pensando en ello, normalmente no puedo recordar lo que dije exactamente. Pero puedo sentir que Shifu me da sabiduría. Es lo que pasó ese día. Solo hablé unos minutos, y él aceptó renunciar al PCCh y a sus organizaciones afiliadas.

Le dije: "Señor, un día cuando nuestra nación china vuelva a la tradición y se renueve, usted será parte de ella. ¡Debería sentirse feliz por usted mismo! Por favor, comparta esta información con sus seres queridos". Fue como si hubiera sido revivido. Habló mucho más fuerte y siguió diciendo: "¡Claro! ¡Claro! ¡Gracias! ¡Seguro que lo recordaré!".

Una señora a la que llamé trabajaba para el departamento de publicidad. Ella ya sabía sobre la persecución y por qué la gente renunciaba al PCCh. Pero no estaba segura sobre Falun Dafa. Entonces Shifu me insinuó que le contara la historia del arca de Noé. También le hablé de la relación entre la civilización prehistórica y la decadencia de la moralidad.

Ella me elogió y me dijo: "¡Ustedes los practicantes trabajan tan duro!". Al final, le dije: "Tal vez tenemos una relación predestinada. Eres una buena persona. ¿Qué tal si uso 'Arca' como seudónimo para ayudarte a dejar el partido? Espero que te conviertas en uno de esos afortunados que se embarcarán en el arca de la nueva era. ¿De acuerdo?". Ella dijo felizmente, "Claro, claro. Gracias".

Había algunas historias inspiradoras. Algunas personas no estaban listas para renunciar al PCCh, pero aún así dijeron sinceramente: "¡Gracias!". A través de estos años de aclaración de la verdad, puedo ver que algunas personas que trabajan en el sistema del PCCh están despertando a la verdad. Tengo un entendimiento personal: Aunque este grupo de personas parece indiferente, si todavía tienen un poco de conciencia se sienten incómodos. Aunque disfrutan de una buena vida, en el fondo están sufriendo. Ellos vinieron al mundo humano por su fe recta en Dafa, pero se equivocan y defienden al partido. Así, ellos son verdaderamente dignos de ser salvados.

Actitudes positivas al conocer la verdad

Cuando llamé por teléfono a los ciudadanos normales de Beijing durante unos días, pude sentir que las viejas fuerzas no tenían tanto control sobre ellos. La mayoría de la gente estaba muy tranquila, y nadie me gritó o me insultó. Algunos dijeron: "Ya sabía de esto". Un hombre dijo "Ya sabía sobre esto. No necesitas decírmelo". Me imaginé que era reacio a decirme que ya había renunciado al PCCh por teléfono. Después de eso, dejé de llamarlo.