(Minghui.org) Un tribunal de intermediación de la provincia de Sichuan celebró una audiencia conjunta de cuatro casos de apelación de practicantes de Falun Gong, el 11 de agosto de 2020, después de que un tribunal de primera instancia dictara las mismas sentencias de prisión en una revisión de la causa, que ordenó un tribunal superior.

Los dos abogados declararon inocentes a las cuatro practicantes. Exigieron que el juez a cargo de los casos de apelación revocara las sentencias de prisión de las practicantes y responsabilizara al juez del tribunal inferior por haber violado los procedimientos legales e incriminado a sus clientes.

Una quinta practicante, que fue arrestada y sentenciada junto con las cuatro, falleció a principios de 2019, posiblemente, tras haber sido drogada durante su detención.

Falun Gong, también conocido como Falun Dafa, es una antigua disciplina espiritual de ejercicios y meditación que persigue el régimen comunista chino desde 1999.

Las cinco practicantes, todas residentes en el condado de Huili, provincia de Sichuan tienen entre 60 y 70 años, fueron arrestadas el 30 de enero de 2016 por distribuir material informativo sobre Falun Gong.

El juez Yang Jilan del tribunal del condado de Huili las condenó a las cinco el 29 de diciembre de 2016. La Sra. Ma Lingxian fue condenada a un año y cuatro meses; las Sras. Luo Jiping, Song Xiuqiong y Zheng Qiong fueron condenadas a un año cada una; y la Sra. Shen Jiafeng fue condenada a un año con un año de libertad condicional.

Después de que las practicantes apelaran los veredictos, el tribunal intermedio de Liangshanzhou desestimó las sentencias originales y ordenó que un tribunal inferior revisara la causa el 8 de mayo de 2017.

El tribunal del condado de Huili celebró cuatro audiencias, el 17 de noviembre de 2017, el 26 de octubre, el 29 de noviembre y el 25 de diciembre de 2018, antes de condenar a las practicantes a la misma pena el 24 de mayo de 2019. El juez Yang Jilan impidió repetidamente a Li Xiongbing y Lu Tingge, los dos abogados de las practicantes, entrar en la sala de audiencias con la excusa de que no estaba permitido llevar bolsos ni computadoras portátiles. Los abogados necesitaban la información guardada en sus computadoras portátiles para hacer su trabajo en el tribunal. Así pues, las practicantes no contaron con ninguno de sus abogados para que los defendieran en las cuatro audiencias durante la revisión de la causa.

Las practicantes apelaron las sentencias otra vez. Cuando el tribunal intermedio de Liangshanzhou oyó sus casos de apelación, el 11 de agosto de 2020, habían pasado cuatro años y medio desde que las arrestaran.

Tanto a la Sra. Shen como a la Sra. Dong les retuvieron sus pensiones durante un año. Las pensiones de las Sras. Ma, Zheng y Luo siguen retenidas en el momento de escribir este informe.

La Sra. Shen desarrolló síntomas de diabetes en el centro de detención y se le dio una cantidad inusualmente grande de fármacos. Gradualmente fue quedando paralítica. La transportaron a la sala del tribunal para las audiencias. Falleció el 31 de enero de 2019, poco después de ser liberada.

La Sra. Dong también fue alimentada a la fuerza con drogas desconocidas, y perdió completamente su audición y la mayor parte de su visión.

Durante la última audiencia de los casos de apelación de las cuatro practicantes restantes, sus abogados pidieron al tribunal superior que anulara las penas de prisión y responsabilizara al juez, Yang Jilan, por haber bloqueado repetidamente a los abogados para que no defendieran a sus clientes ante el tribunal.

El juez Yang afirmó que tenía a dos abogados designados por el tribunal para que representaran a las practicantes durante la revisión de la causa. La Sra. Luo replicó que había insistido en ser representada por el abogado Li, pero que el juez Yang afirmó que el poder del abogado Li no era válido.

La Sra. Luo también señaló que solo un abogado de oficio había asistido a sus audiencias, y no dos como afirmaba el juez Yang.

El abogado Li añadió que, según los documentos del tribunal, el abogado Ruan, nombrado por el juez Yang, era todavía un pasante y no había recibido su licencia profesional, por lo que no estaba calificado para la representación legal formal en el tribunal.

Los abogados Li y Lu también acusaron al juez Yang de ordenar a los alguaciles que los registraran y confiscaran sus computadoras, teléfonos celulares, memorias flash y documentos del caso antes de una audiencia en el tribunal, el 17 de noviembre de 2017. El abogado Lu también fue golpeado por los alguaciles.

Además, el hecho de que el juez Yang siguiera impidiendo que los abogados asistieran a las audiencias del 16 de octubre, el 29 de noviembre y el 25 de diciembre de 2018, con la excusa de que llevaban bolsas y computadoras, había causado pérdidas importantes en sus gastos de viaje y su tiempo.

Los dos abogados han presentado docenas de denuncias ante diversos organismos judiciales de la provincia y dijeron que sus esfuerzos por buscar justicia e indemnización distaban mucho de haber concluido.

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