Madre e hijo encarcelados 11 años por su fe en Falun Dafa

(Minghui.org) Madre e hijo, residentes de la ciudad de Yangquan, Shanxi, cumplieron 11 años de estar encarcelados, de 2008 a 2019, simplemente por su fe en Falun Dafa, una antigua disciplina espiritual de ejercicios y meditación que ha sido perseguida por el régimen comunista chino desde 1999.

La Sra. Wang Lanfang comenzó a practicar Falun Dafa, y su hijo, el Sr. Song Licheng, se unió en 2000, cuando tenía 19 años. Estudiaron las enseñanzas de Falun Dafa e hicieron los ejercicios juntos. En su tiempo libre, usaron varios medios para concientizar sobre la persecución a Falun Dafa.

Un grupo de oficiales irrumpió en su casa en la noche del 16 de marzo de 2004 y arrestaron a la Sra. Wang. El Sr. Song, que entonces tenía 23 años, se vio obligado a vivir lejos de su casa para evitar ser arrestado. La Sra. Wang también se escondió después de que se escapara durante un examen médico.

El Sr. Song fue localizado por la policía y luego detenido mientras navegaba por Internet en un cibercafé de su ciudad natal Datong, en la misma provincia, el 19 de enero de 2005. Lo enviaron a Yangquan y lo encarcelaron en el centro de detención.

Los guardias del centro de detención utilizaron todo tipo de métodos para torturarlo, desde insertar palos de bambú bajo las uñas hasta quemarle los brazos con colillas de cigarrillos. Tres cicatrices en sus brazos son aún visibles hoy en día.

El Sr. Song fue condenado más tarde a cinco años de prisión, y debido a que apeló el veredicto, el juez tomó represalias añadiendo cinco años a su condena.

Antes de que el Sr. Song fuera enviado a prisión, escapó del centro de detención el 24 de enero de 2006 y se escondió de nuevo.

Poco tiempo después el Sr. Song y la Sra. Wang se reunieron y rentaron una pequeña casa para estar juntos. Sin embargo, fueron arrestados de nuevo en su casa el 1 de diciembre de 2008 después de ser rastreados por la policía. El Sr. Song fue golpeado en el centro de detención. Su cabeza angró y fue obligado a usar grilletes que pesaban casi 40 kilos durante más de diez meses.

El tribunal de Kuangqu condenó a la Sra. Wang a un período de 11 años en 2009, y añadió otro año y medio a los 10 años anteriores del Sr. Song, como castigo por su fuga.

Ambos fueron liberados a finales de 2019. Cuando tomaron el tren de regreso a Datong el 3 de julio de 2020, el personal de seguridad de la estación detuvo a la Sra. Wang y le preguntó si practicaba Falun Dafa. La Sra. Wang le dijo que acababa de estar 11 años en la cárcel debido a su fe. El guardia de seguridad la dejó ir después de confirmar la información con la policía en Yangquan.

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