(Minghui.org) He estado practicando Falun Dafa (también conocido como Falun Gong) durante más de 20 años. El Maestro Li Hongzhi, el fundador, me protegió en todo momento, por lo que estoy eternamente agradecida.
Cuerpo purificado
En el invierno de 1996, mi tío vino de visita y presentó Falun Dafa a nuestra familia. En ese momento, yo tenía 40 años, y tenía que cuidar de mis padres e hijos. Por lo tanto, no presté mucha atención a las palabras del tío. Se quedó con nosotros durante casi dos meses y, justo antes de irse, me dijo: "Éste es el Fa más precioso. Está más allá de tu imaginación. Realmente no deberías perder esta oportunidad".
En 1997, nos visitó de nuevo durante las fiestas del Año Nuevo Chino. Me trajo tres libros: Zhuan Falun, Zhuan Falun (II) y Explicando el contenido de Falun Dafa. Terminé de leer todos los libros en tres días, y todo lo que podía decir era: "¡Guau! ¡Esto es muy bueno!".
Esta vez, el tío pasó ocho días con nosotros. Me dejó guardar los libros de Dafa, y me pidió que los siguiera estudiando. También me mostró los cinco juegos de ejercicios de Falun Dafa.
Mi segunda hermana mayor y su esposo habían estado practicando Falun Dafa por un tiempo, y me animaron a aprenderlo.
Después de leer los libros de Dafa, empecé a toser y a vomitar. Un miembro de la familia me compró unas medicinas, pero mi hermana me dijo: "No necesitarás eso. Shifu está limpiando tu cuerpo". Desde entonces, no he tenido necesidad de tomar ningún medicamento.
Al regresar a casa después de hacer los ejercicios en un sitio de práctica local, decidí tomar una siesta. Una luz dorada iluminó de repente la habitación. Shifu apareció con dos cuencos de borde azul de mi cocina, y los colocó en la cama. Un tazón tenía un pulmón podrido negro, mientras que el otro contenía sangre sucia.
Shifu regresó los cuencos a la cocina. Lo seguí y vi los cuencos en el fregadero, pero estaban limpios. ¡Después, Shifu desapareció! Me quedé muy emocionada y llorando –Shifu había limpiado mis pulmones sucios.
Cuando mis familiares regresaron, les dije que nadie debía tocar los dos cuencos de borde azul. Los hemos guardado durante 20 años. En los meses siguientes, Shifu purificó mi cuerpo cada varias semanas.
Buscando justicia para Dafa
El 22 de abril de 1999, los periódicos de la ciudad de Tianjin publicaron artículos atacando y calumniando a Dafa. Después de que nos enteramos de la noticia, varios practicantes y yo decidimos ir a Tianjin. Queríamos buscar justicia para Dafa.
Tomamos el tren esa noche y llegamos a Tianjin a la mañana siguiente. Muchos discípulos de Dafa se habían reunido fuera de la oficina del editor, y se había seleccionado a unos representantes para hablar con él y pedirle que corrigiera los artículos. Todos nos sentamos tranquilamente afuera. Algunos estudiaban el Fa y otros hacían los ejercicios. Entonces, escuché a alguien gritando emocionado: "¡Miren! Falun!".
Miramos al cielo y vimos innumerables ruedas grandes y pequeñas girando, apareciendo en el cielo, brillando y luciendo muy hermosas. Juntamos las manos frente a nuestros pechos y, en silencio, le pedimos a Shifu que nos fortaleciera.
Esa noche, hubo un apagón repentino, y llegaron muchos camiones llenos de policía militar armada. Saltaron de los camiones y empezaron a arrestar gente.
Varios de ellos agarraron a una practicante y comenzaron a empujarla. Los detuve, y les dije: "¡Déjenla ir! ¿Cuál de ustedes no tiene padres y hermanas? Son peor que el Kuomintang (KMT)". (Me había engañado la propaganda del partido comunista chino (PCCh) y creía que el KMT era terrible).
Uno de los soldados dijo: "No te metas. No te arrestaremos a ti". Pero insistí en que la liberaran. No tenía ningún miedo. Finalmente, liberaron a esa practicante, pero arrestaron ilegalmente a muchos más.
Luego fuimos al gobierno de la ciudad para exigir su liberación, y nos quedamos allí hasta que fueron liberados. Volvimos a nuestro hotel, y luego regresamos a casa. Sin embargo, no sabíamos que todavía quedaban detenidos más de 40 practicantes.
La situación de los practicantes en China empeoró a partir del 20 de julio de 1999. Las mentiras con las que los medios de comunicación estatales atacaron a Dafa se extendieron tanto que más gente comenzó a odiar a Dafa. Algunos practicantes y yo queríamos ir a la plaza de Tiananmen en Beijing para mostrarles que Dafa es bueno.
El viaje en tren a Beijing duró un día. No llevamos ninguna identificación con nosotros, así que no pudimos reservar cuartos en un hotel. En cambio, nos sentamos en el piso de cemento frente a un hotel durante toda la noche.
A las 5:00 a. m., caminamos hacia la plaza de Tiananmen. Los policías vestidos de civil y la policía militar estaban por todas partes. Nos pidieron que dijéramos algunas malas palabras sobre nuestro Maestro para probar si éramos practicantes de Falun Dafa o no. Nos negamos, así que nos empujaron a una furgoneta de policía y nos llevaron al estadio Fengtai.
Allí, vi a unos policías golpeando a alguien. Les grité que se detuvieran. Uno de los oficiales se dio la vuelta y dijo: "A ti no te golpearemos".
Esa noche, empezó a llover. La policía llevaba impermeables. Aunque fue una lluvia fuerte, ninguno de los practicantes se mojó. Escuché a algunos policías comentando que los practicantes de Falun Dafa no le temen a la lluvia. Sabíamos que Shifu nos estaba protegiendo.
La policía de nuestra ciudad natal nos recogió al día siguiente y nos detuvo durante 30 días.
Tres de nosotros fuimos a Beijing de nuevo el 1 de octubre de 2000. Llevamos un cartel con las palabras: "Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". Llegamos a la plaza de Tiananmen al mediodía y desplegamos el cartel. Yo era la más alta entre nosotros, así que me paré en el medio. Una mujer que pasó por allí preguntó en voz baja: "¿Es Falun Dafa?".
Le contesté: "Sí".
Tres agentes de policía vestidos de civil llegaron pronto, agarraron el cartel y nos arrastraron a su auto. Uno de los oficiales usó el cartel para limpiarse el zapato. Le dije: "No hagas eso, o tus pies se pudrirán". Murmuró algo y dejó el cartel.
Nos trasladaron a una furgoneta de policía y nos metieron adentro. Vi a varios oficiales de policía arrastrando a una practicante por su cabello a la camioneta y la empujaron dentro. La hicieron pararse y siguieron golpeándola. Sostuve a la practicante en mis brazos para protegerla.
Un oficial de policía de nuestra ciudad natal vino a recogernos. Luego me enviaron a un campo de trabajo forzado durante tres años.
Los compañeros practicantes a menudo me visitaban en el campo para animarme a no renunciar a mi fe. Lloré porque me faltaban los libros de Dafa. Mi marido se las arregló para conseguirme el libro Zhuan Falun de mi cuñado. Realmente vio mi sinceridad para cultivarme, así que trajo el cuadro de Shifu y los libros de Dafa que solía tener y los puso de nuevo en nuestra casa. Los había llevado a la casa de un pariente para guardarlos después de que me habían enviado al campo de trabajo.
Creando conciencia sobre Dafa
Shifu dijo:
“Validen Dafa con razón, esclarezcan la verdad con sabiduría, difundan el Fa y salven a la gente con benevolencia…” (Racionalidad, Escrituras esenciales para mayor avance (II))
Una vez, vino a mi casa un oficial de policía responsable de la seguridad de nuestras residencias. Le dije: "Dafa es una vía recta que pide a la gente que sea buena. Si trata a Dafa amablemente, será bendecido".
A menudo, venía a mi casa para escucharme hablar de Dafa, y protegía a los practicantes en secreto.
Mi nieta tiene 14 años. Nació prematuramente, tenía parálisis cerebral y su pierna no funcionaba. La llevé a Beijing para una cirugía. Se acostó en la cama del hospital en silencio. Dijo que, cuando sintió el dolor, recitó "Dafa es bueno" y el dolor desapareció.
Otros niños de la misma sala lloraban y gritaban cuando sentían dolor. Hablé con sus padres y ayudé a nueve personas a renunciar al PCCh.
Salimos del hospital, y estábamos listas para irnos, cuando una enfermera corrió hacia nosotras para despedirse. Aproveché la oportunidad para decirle que renunciara al PCCh y a sus organizaciones juveniles. Ella estuvo de acuerdo.
Mi esposo se beneficia por apoyar a Dafa
En 2005, cuando los Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista se distribuyeron por primera vez en China mi esposo, hija y yerno renunciaron inmediatamente al PCCh después de leerlo.
Mi esposo también se negó a pagar las cuotas de membresía del PCCh en su lugar de trabajo. Cuando se enfrentó a la perspectiva de ser expulsado del partido, dijo: "¡Está bien para mí!".
Respeta mucho a Dafa y al Maestro, y no permitirá a nadie que hable mal de Dafa.
Ha sido bendecido por sus pensamientos y acciones rectas.
Una vez, un camión grande se estrelló contra la parte trasera del coche que conducía. Recitó: "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". Por consiguiente, no resultó herido.
Tuvo un derrame cerebral e ingresó al hospital. Tres días después volvió a casa y estaba bien. No ha tenido la necesidad de tomar ningún medicamento en los últimos diez años.
Recordando mi cultivación al comienzo de la persecución, solo sabía que tenía que salvaguardar el Fa, pero no sabía cómo. Tampoco podía entender el Fa desde la perspectiva del Fa, y tomé muchos desvíos en mi camino de cultivación. Sin embargo, con la protección de Shifu a lo largo de estos años, he sobrevivido y madurado.
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Categoría: Caminos de cultivación