(Minghui.org) Durante el mes pasado, el gobierno australiano relajó las restricciones de las actividades públicas y los practicantes de Falun Gong empezaron a recolectar firmas pidiendo el fin a la persecución del partido comunista chino (PCCh). La petición recibió un gran apoyo del público.
Desde que inició la persecución el 20 de julio de 1999, el número confirmado de muertes de practicantes de Falun Dafa debido a la persecución ha llegado a 4.543 casos. Según el sitio web de Minghui, 5.312 practicantes fueron arrestados en China y 39 fueron asesinados solo en la primera mitad de 2020. Sin embargo, esto solo representa una parte de las cifras reales debido a la censura del PCCh.
El público australiano condenó las atrocidades del PCCh y pidieron al Gobierno australiano que trabajara con otros gobiernos de todo el mundo para ponerle fin a los crímenes del PCCh.
Australianos firmando una petición para apoyar a Falun Dafa
Ryna y su esposo firman la petición en el Barrio Chino de Melbourne
Ryna, una profesora universitaria, y su esposo estaban tristes por la persecución. Ryna dijo que los 21 años de persecución eran completamente inaceptables. Ella sabía que Falun Dafa es una creencia pacífica y que la propaganda del PCCh es ilógica.
"Verdad, Benevolencia y Tolerancia son valores universales y grandes principios morales. Creo que el pueblo chino ha sido completamente engañado por la propaganda", dijo.
El esposo de Ryna dijo que le contó a su familia y amigos sobre la persecución de Falun Dafa en China. La pareja dijo que les gustaría que el gobierno australiano presionara abiertamente a China para que ponga fin a la persecución. Dijeron que el público y la sociedad internacional deberían unirse para presionar a China.
Lola, una estudiante universitaria, recibió un adorno de flor de loto
Lola, una estudiante universitaria de psicología, firmó la petición y dijo que no podía creer una persecución tan cruel y la sustracción de órganos siguiera sucediendo.
"Es obvio que la persecución debería terminar. Todos los países deben trabajar juntos para detenerla. Esto es exactamente lo que hay que hacer", dijo.
Mathew, un profesor de secundaria, condenó la violación de los derechos humanos por parte del PCCh
Mathew, un profesor de secundaria, y su hija Hannah firmaron la petición. Hannah dijo que todo el mundo debería poder disfrutar la libertad de creencia, porque es un derecho humano básico. Mathew dijo que los australianos deben decidir qué es más importante: ¿los derechos humanos o el dinero? Dijo que los derechos humanos son la base de Australia y que las acciones de las personas deben ser coherentes con sus palabras.
Grant, un residente local, dice que la sustracción de órganos es un crimen contra la humanidad, y que el Gobierno y la gente de Australia se deberían unir contra el PCCh.
Francis firmando la petición
Francis, un profesional de informática, había visto documentales sobre la persecución a Falun Gong. Dijo que admira a los practicantes de Falun Gong por lo que han hecho.
"El partido comunista tiene una ideología completamente diferente a la del mundo libre. Usan los recursos del mundo para su propio beneficio y no consideran las consecuencias. Es muy peligroso. La gente debería rechazarlo", dijo.
Zard, un estudiante de secundaria, y su amigo firman la petición
Zard, un estudiante de secundaria, y sus amigos planearon ayudar a difundir información sobre la persecución a Falun Dafa en las redes sociales.
"He hecho algunas investigaciones sobre el partido comunista chino. Descubrí que no solo ha perseguido a un gran número de personas de su país, sino también a muchos grupos religiosos. Falun Dafa está hablando por todos y difundiendo poderosos y grandes mensajes", dijo Zard.
Kevin mostrando su aprobación a los practicantes de Falun Dafa
Kevin, un residente local jubilado, dijo que le encantaba leer y que le fascinaba la cultura china. Dijo que la revolución cultural en China ocasionó un gran desastre a la cultura tradicional. Se sorprendió al saber que el PCCh había matado a más personas chinas que la invasión japonesa durante la Segunda Guerra Mundial.
"Me solidarizo con el pueblo chino. El partido comunista quiere controlar todo, incluyendo la cultura. Debemos distinguir entre el partido comunista chino y China", dijo Kevin.
Kevin le ha prestado atención a la persecución de Falun Dafa desde que inició. Dijo que el sistema legal en China no ofrece ninguna protección a los derechos humanos, como la expropiación de tierras, las demoliciones forzadas y la persecución a Falun Dafa, y especialmente la sustracción forzada de órganos es muy cruel, más allá de lo que se puede imaginar. Él elogió la resistencia pacífica de Falun Dafa y el trabajo de despertar al público difundiendo la verdad.
“Verdad, Benevolencia y Tolerancia son valores universales. No hay absolutamente nada malo en seguir estos principios. Si todo el mundo pudiera seguir esos principios, los policías y los guardias de seguridad tendrían trabajos más fáciles", concluyó Kevin.
Angela, una novia se toma una foto después de su boda frente a la biblioteca estatal, muestra gran atención por la persecución de Falun Dafa
John firmando la petición
John, otro residente de la localidad, dijo que ha estado observando la situación en China durante muchos años y sabe que el partido comunista chino ha tratado de controlar el mundo. Condenó la violación de la libertad en Hong Kong y elogió los principios de Falun Dafa ya que dan "justo en el punto". Alentó a los practicantes a mantener su gran trabajo en pro de los derechos humanos.
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