(Minghui.org) Una vecina de la ciudad de Fuxin, provincia de Liaoning, que cumple condena por su fe en Falun Gong, sigue en coma en una unidad de cuidados intensivos después de sufrir una hemorragia cerebral en la prisión.

Falun Gong, también conocido como Falun Dafa, es una antigua práctica espiritual perseguida por el régimen comunista chino desde 1999.

Cuando la familia de la Sra. Zhang Yuhong corrió al hospital, los guardias de la prisión les impidieron visitarla y se negaron a responder por qué se encontraba en tan grave estado. En cambio, culparon a su familia por no visitarla con regularidad, lo cual "hizo que se enfermara".

Las prisiones chinas a menudo niegan las visitas de los familiares de los practicantes de Falun Gong si se niegan a escribir declaraciones de renuncia a su fe. A la familia de la Sra. Zhang también se le prohibió visitarla antes de su hospitalización.

El médico de la Sra. Zhang dijo a su familia que tenía algunas lesiones en la espalda, antes de que los guardias de la prisión impidieran que el médico les diera un diagnóstico detallado. También dijeron que no se proporcionarían más tratamientos médicos a menos que su familia firmara una exención de responsabilidad de la prisión en caso de que le ocurriera algo.

La Sra. Zhang permanece en la UCI sin recibir ningún tratamiento en el momento de escribir este artículo.

La Sra. Zhang, de unos 50 años, fue arrestada la noche del 7 de noviembre de 2018. Fue sentenciada a cuatro años por el tribunal del distrito de Taiping en julio de 2019. Los guardias del centro de detención de Xindi, donde estuvo detenida desde su arresto, le impidieron apelar el veredicto porque se negaba a renunciar a su creencia en Falun Gong.

Los guardias del centro de detención esperaron hasta que su tiempo para apelar expirara antes de permitirle presentar su apelación. Solo después de que su familia buscara que se le hiciera justicia en la corte intermedia, un juez aceptó su caso.

La corte intermedia de la ciudad de Fuxin confirmó su veredicto a principios de septiembre de 2019 y fue transferida a la prisión de mujeres de la provincia de Liaoning, el 24 de septiembre.