(Minghui.org) Cuando la Sra. Li Mei acababa de cumplir 28 años, fue cremada viva después de perder el conocimiento por las salvajes palizas que recibió por mantener su fe en Falun Gong.

La policía de la ciudad de Hefei, en la provincia de Anhui, informó a su familia que se había suicidado saltando de un edificio. El 1 de febrero de 2001, su familia vio su cuerpo en la funeraria y encontró que aún estaba caliente y mostraba signos de estar con vida. En lugar de resucitarla, las autoridades retiraron a su familia y ordenaron su cremación.

Su hermana, la Sra. Li Jun, expuso las injusticias de las autoridades en línea. Fue arrestada y murió en prisión 10 meses después, en diciembre de 2001.

Falun Gong, también conocido como Falun Dafa, es una disciplina espiritual y de meditación perseguida por el régimen comunista de China desde 1999.

Arrestos repetidos

La Sra. Li Mei, comenzó a practicar Falun Gong en 1996 y se recuperó del asma y otras enfermedades sin necesidad de buscar ayuda médica. También se volvió optimista y extrovertida. Asumió activamente tareas en el trabajo sin quejarse, y se ofreció voluntariamente a recibir el bono más pequeño para que otros pudieran tener más.

La Sra. Li Mei

Después de que el partido comunista chino comenzó su persecución a Falun Gong, en noviembre de 1999 la Sra. Li y otros 4 practicantes fueron a hacer una petición al gobierno central en Beijing. La policía de Beijing los arrestó y golpeó. La llevaron de vuelta a Hefei y la detuvieron durante 15 días en un centro de lavado de cerebro.

Tan pronto como fue liberada, emprendió otro viaje a Beijing, a pie, para evitar ser arrestada. Después de caminar durante 2 días, 2 mujeres se ofrecieron a dejarla pasar la noche en su casa. Ansiosa por llegar a Beijing, se levantó y se fue a las 3:00 a. m., dejando atrás lo único valioso que llevaba consigo, un par de pantalones de lana, para mostrar su agradecimiento al dueño de la casa. Continuó tranquilamente con su viaje. Las 2 mujeres la alcanzaron más tarde y ayudaron a llamar a su hermana, que decidió unirse a ella con otros 3 familiares.

Las 5 fueron arrestadas en Beijing y transferidas de vuelta a Hefei. Fueron encerradas en el centro de detención de Hefei y luego llevadas a un centro de lavado de cerebro.

Encarcelados y torturados por hacer una pancarta

En abril de 2000 fue arrestada una vez más y detenida durante 15 días por hacer ejercicios de Falun Gong en público. Después de su liberación, fue a Beijing a apelar por Falun Gong por 4.ª vez.

En su camino a Beijing, una persona la denunció a la policía por hacer una pancarta de Falun Dafa. Se puso en huelga de hambre después de ser transferida a un centro de lavado de cerebro en Hefei. Nueve días después, fue llevada al campo de trabajos forzados para mujeres de Anhui sin el debido proceso.

En el campo de trabajos forzados, la Sra. Li fue esposada por hacer los ejercicios de Falun Gong. Una vez fue esposada a la litera superior de una cama doble, dejándola colgada con los dedos de los pies apenas tocando el suelo. Esto le causó un dolor insoportable y le lesionó los hombros y las muñecas. Fue vigilada las 24 horas del día por otros prisioneros y se la privó de comida y sueño. Durante el día, los guardias la obligaban a hacer trabajos sucios y pesados.

El 26 de enero de 2001, su madre y su hermana fueron a visitarla pero un agente les negó la visita. Su hermana preguntó al agente y sospechó que la prisión había torturado a la Sra. Li y por lo tanto no quería que vieran lo terrible que había sufrido. El agente dijo que la Sra. Li era objeto de una estricta vigilancia todos los días y que nadie podía visitarla.

Cuatro días después, el 30 de enero, las autoridades informaron al padre de la Sra. Li de que se estaba muriendo. Cuando su familia llegó al hospital del ejército de liberación popular nro. 105, un médico les dijo que tenía una lesión cerebral y un fallo en un órgano. Sus signos vitales eran débiles. A su familia solo se le permitió ver a la Sra. Li desde lejos con las manos atadas por la policía. La cara de la Sra. Li estaba hinchada y le salía sangre de los ojos, los oídos, la nariz y la boca. Un pedazo de tela fue envuelto alrededor de su cuello, y estaba cubierta del cuello hacia abajo.

El 1 de febrero, las autoridades enviaron un vehículo policial y llevaron a la familia de la Sra. Li a una funeraria. A la familia se le dijo que la Sra. Li se había suicidado saltando de un edificio y que debía ser cremada inmediatamente. Su madre se preguntó: "¿No se la vigilaba de cerca todos los días? ¿Cómo pudo saltar de un edificio?".

Los agentes ordenan su cremación mientras estaba viva.

La familia de la Sra. Li insistió en que un forense le hiciera un examen médico para saber cómo había muerto. La policía exigió que no tomaran fotografías, audio o video del proceso. Para poder verla por última vez, la familia accedió. Por la misma época, el gobernador de la provincia de Anhui ordenó a docenas de vehículos policiales que bloquearan todos los caminos hacia la funeraria.

A la familia se le dijo que la Sra. Li dejó de respirar a las 6:05 a. m. Para cuando su hermana trajo ropa para que se cambiara a las 9:00 p. m., su cuerpo aún estaba caliente a pesar de haber estado sentada en el frío invierno durante 15 horas.

Su hermana gritó: "¿Por qué la creman? ¡Todavía está viva!". Los otros familiares tocaron el cuerpo y también sintieron el calor. Una agente extendió su mano para tocar el cuerpo e inmediatamente retrajo su mano, luciendo horrorizada. Su voz tembló: "¡Está caliente!". Mientras ella hablaba, todos los agentes se fueron a otra habitación.

La hermana de la Sra. Li y otros familiares aprovecharon la oportunidad para examinar de cerca su cuerpo. Encontraron una puntada fresca de 2 pulgadas de largo bajo su barbilla. Su abdomen tenía varias manchas del tamaño de un cigarrillo. Las lágrimas bajaron por las caras de los familiares. Al llorar, su padre gritó: "¡Habrá una retribución kármica! En lugar de revivirla, la pusieron en una funeraria. ¡No tienes conciencia!". Varios agentes se pararon a un lado y se burlaron de la familia.

La policía echó rápidamente a la familia de la Sra. Li.

La hermana fue asesinada después de exponer su historia

Tan pronto como la hermana de la Sra. Li, la Sra. Li Jun, regresó a casa, escribió cómo fue detenida la Sra. Li y las heridas y cicatrices que encontraron en su cuerpo en la funeraria. Demostraron que la Sra. Li había muerto por tortura. Ella publicó la información en Internet para revelar los crímenes cometidos por el partido comunista chino contra Falun Gong.

La Sra. Li Jun y su esposo, el Sr. Wu Xing, salieron rápidamente de Hefei hacia Shanghái para evitar represalias de las autoridades.

Durante la reunión de la APEC celebrada en Shanghái los días 20 y 21 de octubre de 2001, la policía hizo una búsqueda puerta a puerta de los disidentes para asegurarse de que nadie causara problemas y expusiera las violaciones de los derechos humanos del régimen durante la reunión. La Sra. Li Jun y el Sr. Wu aprovecharon la oportunidad para contar a la gente la persecución a Falun Gong y la brutal tortura a la que se enfrentan los practicantes. Ambos fueron arrestados más tarde.

Pronto la familia se enteró de que la Sra. Li Jun fue hospitalizada con hepatitis severa. La Sra. Li Jun siempre había gozado de buena salud, y su familia no creía que pudiera enfermarse gravemente en circunstancias normales. Antes de que la familia pudiera llegar a Shanghái para verla, las autoridades les dijeron que había sido trasladada al hospital de enfermedades infecciosas de la ciudad de Hefei. Cuando su familia finalmente llegó al hospital, la Sra. Li Jun estaba al borde de la muerte. Falleció a principios de diciembre de 2001.

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