(Minghui.org) Durante los últimos 21 años, los practicantes de Falun Dafa nunca han dejado de esforzarse por desenmascarar la persecución que sufren su fe por parte del partido comunista chino (PCCh). Muchos policías han llegado a entender la ilegalidad y la brutalidad de la persecución y han apoyado a los practicantes de varias formas.
A continuación presentamos dos historias que recibimos recientemente en Minghui.org.
Saludos de los oficiales de policía
El 13 de Mayo es el Día Mundial de Falun Dafa y también coincide con el cumpleaños del Sr. Li Hongzhi, fundador de la práctica. En este día especial de este año, escuché que alguien llamaba a mi puerta.
Cuando la abrí, vi a un policía de la comunidad y a su compañero. "Hoy es el cumpleaños del Maestro Li y estamos aquí para desearle un Feliz Cumpleaños al Maestro Li", dijo el oficial. Nos sonreímos y los invité a entrar.
A este oficial de la comunidad le asignaron que me vigilara por más de 10 años. Hace varios años le hablé sobre Falun Dafa y sus principios: Verdad-Benevolencia-Tolerancia. También le di un software anticensura para que leyera información sin censura. Después de leer la información, se dio cuenta de que el PCCh ha estado reprimiendo a gente inocente, incluyendo a los practicantes de Falun Dafa, así que renunció a la organización de la liga juvenil del PCCh a la que se había unido cuando era niño.
Parte del trabajo del oficial es controlarme en períodos sensibles, como el Día Mundial de la Falun Dafa, los aniversarios de la persecución y los días de fiesta importantes. La mayoría de las veces, solo hablaba conmigo por teléfono. En ocasiones pasa por aquí y cuando viene siempre llega con personas diferentes para que les hable sobre Falun Dafa.
Cuando alguna de las caras nuevas que trae parece dudar sobre si renunciar o no a ser miembro de las organizaciones del PCCh, les pregunta: "¿Por qué no?", añadiendo, "renunciar a las organizaciones del PCCh te traerá buena suerte". Entonces, los demás oficiales aceptaban hacerlo. Esto sucedió varias veces.
El año pasado, el 13 de Mayo, vino con una administradora de la comunidad. Tan pronto como entraron en mi casa, empezó a hablar, de la guerra comercial entre EE. UU. y China, y de los engaños del PCCh. Posteriormente, mencioné que el PCCh había estado mintiendo durante décadas y había dañado a muchas personas inocentes, incluyendo a los practicantes de Falun Dafa, durante numerosas campañas políticas.
Después de escuchar que varios miembros de mi familia habíamos sufrido por mantenernos fieles a nuestra creencia en Falun Dafa, la administradora de la comunidad señaló que conocía todas aquellas cosas, pero que estaba demasiado asustada para hablar sobre eso. La insté a renunciar al PCCh y el oficial de policía también se hizo eco de mis sentimientos.
La administradora accedió alegremente. Me dio las gracias varias veces.
"Detenidos" solo en el papel
Hace varios días, dos practicantes fueron arrestados y llevados a una comisaría de policía en el norte de China.
Al llegar allí, compartieron con la policía cómo la práctica de Falun Dafa había mejorado su salud y les había ayudado a convertirse en mejores ciudadanos. Tienen unos 70 años y ambos parecen mucho más jóvenes que su edad.
"No queríamos arrestarlos. No teníamos opción porque alguien los había denunciado", dijo un policía de mediana edad.
"Si alguien de la oficina de seguridad nacional viene a interrogarlos, pueden decirle que no llevan consigo las llaves de su casa, así no iremos a registrar sus hogares", dijo otro oficial en voz baja. "Cuando alguien los denunció la última vez, tampoco registramos sus casa, aunque sabemos dónde viven", agregó.
Más tarde, a cada practicante le entregaron un pedazo de papel. "Hay una pandemia en este momento, y no disponemos de un sitio para detenerlo", explicó uno de los oficiales. "Su multa de 500 yuanes también queda anulada. La detención de 10 días se llevará a cabo [solo] en el papel".
Cuando los practicantes miraron el papel, vieron que era el aviso de la liberación de la detención.
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