(Minghui.org) La educación siempre ha sido un importante campo de batalla para el partido comunista chino (PCCh) en su búsqueda por consolidar su control sobre el pueblo chino. Es tan crucial, de hecho, que Mao Zedong comentó una vez que: "La educación debe servir a la política proletaria". En otras palabras, debe servir a los intereses del PCCh.

Recientemente, la "educación roja" se ha infiltrado en los planes de estudio de las escuelas públicas de toda China, comenzando desde los jardines de infancia y las escuelas primarias. Los siguientes son solo algunos ejemplos.

Un jardín de infantes en la provincia de Hebei una vez le dio a cada estudiante una "insignia del presidente Mao" en memoria del "gran salvador del pueblo chino", quien de hecho causó la muerte de decenas de millones de chinos durante su regencia.

Los estudiantes que asistían a un jardín de infancia en el condado de Yongxiu, en la provincia de Jiangxi, se reunieron en una ceremonia de izamiento de la bandera, en la que un maestro los guió para que juraran su lealtad imperecedera al PCCh y a sus dirigentes.

Un hombre que regresó a China desde los Estados Unidos dijo que también estaba bastante decepcionado con la forma en que se les lavaba el cerebro a los niños en la escuela. Su hijo nació en Estados Unidos y ya era un niño de primaria cuando la familia retornó a China.

La nueva escuela de su hijo en China requería que todos sus estudiantes vieran películas, como Tunnel Warfare (Guerra de túneles) y Landmine Warfare (Guerra de minas terrestres) para impulsar el patriotismo y su amor por el PCCh, a la vez que incitaba al odio contra los invasores extranjeros. Los niños también tenían que recitar poesías con alabanzas al PCCh.

"En menos de dos años, el cerebro de mi hijo ya se ha vuelto igual al de los otros niños chinos", aseguró el hombre.

"Cuando me escuchó compartir mis opiniones sobre el coronavirus de Wuhan (que eran un poco diferente de lo que los medios de comunicación oficiales propagaban), se volvió a su madre y le preguntó: '¿Cómo es que papá no ama a China?'. En la escuela, se les enseña que si dices algo bueno sobre los EE. UU., significa que "no amas a China".

Otro jardín de infantes en la provincia de Jiangxi requería que todos los niños se pusieran los uniformes del "Ejército Rojo" o del "Ejército de la Octava Ruta" para un evento. Sus padres también debían llevar uniformes militares, así como ropa de obrero y de campesino, para restaurar el espíritu del movimiento de producción a gran escala en Yan'an (una prefectura de la provincia de Shaanxi, que sirvió como base del cuartel general del PCCh de 1935 a 1947).

La administración de la guardería afirmó que tales actividades tenían como objetivo enseñar a los niños a escuchar al partido y seguirlo desde la infancia.

Se están impulsando y promoviendo campañas similares de "educación roja" en toda China para inculcar el sentido de "patriotismo" del PCCh en los niños pequeños.

Los padres se sorprendieron durante un evento de padres e hijos, organizado por el jardín de infantes de Jinshan en Jiangxi, cuando un pequeño niño con una pistola de madera gritó fuertemente: "¡Voy a matar a todos los japoneses!".

"A los niños se les enseña a odiar a tan tierna edad. Tal 'educación roja' no les ayuda de ninguna manera", manifestó un padre preocupado.

Otro padre dijo: "Un 'patriotismo' tan extremo es el tipo de lavado de cerebro más malvado".

Lamentablemente, a pesar de que muchos padres no aprueban este tipo de educación para sus hijos, sacar a sus hijos de este entorno educativo es muy difícil para una familia de ingresos medios. Como resultado, con el tiempo estos niños se vuelven más y más extremos en sus pensamientos y se tornan incapaces de ejercer un pensamiento independiente y crítico.

En la China actual, controlada por el PCCh, muchos creen que el coronavirus de Wuhan fue traído a China por los estadounidenses, ya que eso es lo que los medios de comunicación del PCCh han dictado como la verdad.

Recientemente, se publicó un poema en la "Guía del Estudiante de Secundaria", un periódico para estudiantes de circulación nacional. En el poema, el "virus" antropomórfico decía que lamentaba haber venido a China y que tenía que regresar a los EE. UU. ya que no era rival para el gobierno chino (PCCh) y sus trabajadores de la salud.

Volviendo a la “Revolución cultural”

Lo que está pasando en el sistema educativo de China, a mucha gente le recuerda al movimiento de los "Guardias Rojos" durante la "Revolución Cultural". El entonces líder del PCCh, Mao Zedong, saludó a millones de Guardias Rojos en la Plaza de Tiananmen y los alentó a seguirlo como su "Comandante en Jefe Rojo" en la nueva etapa de la revolución proletaria. El culto fanático de los Guardias Rojos a Mao alcanzó un nivel sin igual en ese momento, creyendo ciegamente que Mao los estaba dirigiendo hacia una nueva revolución y que haría de China una verdadera sociedad comunista en 15 años.

Sin embargo, un par de años más tarde, Mao cambió su tono y alentó a los jóvenes educados, incluidos los Guardias Rojos, a ir al campo y a las zonas montañosas para recibir "reeducación de los pobres y los campesinos de clase media-baja". Esto, cuando menos, fue un gran golpe para los apasionados Guardias Rojos de Mao.

El drástico cambio de ambiente también ofreció a los jóvenes una oportunidad de reflexionar y pensar sobre los temas desde una perspectiva diferente.

Una persona recordó la "gran conmoción" que experimentó cuando el secretario de la brigada de producción del partido en el pueblo les dijo: "Labrar la tierra es para nosotros".

"Me sorprendió mucho oír esto, y pensé: todo lo que hacemos, incluyendo ir a la escuela, es para la 'revolución', ¡cómo se puede decir que labrar la tierra es para nosotros!".

Otro dijo: "Empezamos a hacer preguntas: ¿Qué papel podemos desempeñar realmente, trabajando la tierra en los campos? ¿Debemos permanecer en el campo por el resto de nuestras vidas? Estábamos confundidos y no sabíamos qué hacer".

No fue hasta unos años más tarde, cuando se revelaron algunos documentos secretos, que se enteraron de que Mao los envió al campo como un modo de "reforma a través del trabajo".

Los jóvenes educados habían sido utilizados durante la "Revolución Cultural" por Mao y el PCCh como herramientas violentas para deshacerse de sus rivales y en la destrucción de la cultura tradicional y los valores éticos; una vez que el PCCh logró sus objetivos, los jóvenes fueron arrojados a las zonas remotas para recibir "reeducación", como una forma de resolver el difícil problema del empleo causado por la masiva agitación política y la destrucción social y económica durante la Revolución Cultural.

Fue una amarga lección. Toda esta generación perdida pagó con su juventud el catastrófico desastre impuesto al pueblo chino por el PCCh.

Lamentablemente, las ideas de la "Revolución Cultural", que una vez fueron reconocidas oficialmente como una "catástrofe" en la década de los ochenta, se están reproduciendo y promoviendo y fermentan de nuevo en las escuelas y jardines de infantres de toda China, y el pueblo chino se enfrenta una vez más a un grave peligro

Rechazando la “Educación roja” y abrazando la Verdad

Aunque algunas personas fueron víctimas de las décadas de educación roja del PCCh, existe un grupo de personas en China que se han liberado de las fuertes garras del PCCh y están utilizando sus vidas para defender sus principios.

Estas personas son practicantes de Falun Dafa que se niegan a cantar la misma melodía del PCCh; en cambio, piensan independientemente y buscan la verdad y el significado de la vida conduciéndose de acuerdo con los principios universales de "Verdad-Benevolencia-Tolerancia", mientras mejoran tanto su bienestar físico como mental.

Debido a su independencia, Falun Dafa y sus practicantes han sido perseguidos por el PCCh desde julio de 1999. Un sinnúmero de practicantes, jóvenes y viejos, hombres y mujeres, han sufrido arrestos, detenciones, torturas y encarcelamientos ilegales. Muchos han perdido la vida a manos de la policía.

Pero incluso ante esta tiranía sin precedentes, los practicantes de Falun Gong han respondido con gran benevolencia.

Para dar un ejemplo: la Srta. Liu Zixuan, una practicante de Falun Gong de 27 años de edad, que perdió a su madre y fue criada por sus abuelos, creció sin mancha de esta educación roja.

La Srta. Liu fue arrestada ilegalmente por la policía el 7 de agosto de 2019, junto con su compañera de cuarto, también practicante de Falun Gong. Su casa fue registrada y sus pertenencias confiscadas.

La policía trató de obligarlas a escribir una "declaración" de renuncia a su fe y les dijo que alguien las había denunciado porque se las vio en la cámara de vigilancia entrando y saliendo de los edificios residenciales distribuyendo materiales de Falun Gong.

Cuando su abuelo fue a verla a la comisaría, le dijo a la policía llorando: "Mi nieta es una buena chica. Se graduó en una prestigiosa universidad, y siempre se esfuerza por ser una buena persona siguiendo los principios de "Verdad-Benevolencia-Tolerancia". Está mal perseguir a Falun Dafa. Espero que puedan diferenciar el bien del mal; no pueden enviar a la gente buena a la cárcel".

"No se preocupen por mí", les pidió la Srta. Liu a su abuelo y a su padre: "Por favor, no se molesten con la gente que me denunció. Lo hicieron porque no sabían la verdad. Por favor, trátenlos con compasión".

Diez jóvenes practicantes de Falun Gong de Beijing, pertenecientes a la generación Z, publicaron recientemente un artículo en el sitio web de Minghui, titulado "Cultivación por practicantes nacidos en la década de los noventa". En este artículo, escribieron sobre cómo habían cambiado de ser individuos egocéntricos a personas consideradas, que siempre tratan a los demás con amplitud de miras y tolerancia.

"Todos nacimos en los 90, y como la mayoría de los jóvenes de nuestra edad, solíamos ser egocéntricos y competitivos. Nos gustaba ir al cine y disfrutar de los juegos de ordenador; teníamos miedo de perder la cara ante los demás e intentábamos validarnos, y por supuesto, siempre procurábamos estar al día con las nuevas modas y apariencias. Defendíamos a nuestros compañeros y discutíamos con nuestros padres, albergando mucho resentimiento hacia cualquiera que se interpusiera en nuestro camino", comentaron.

"Sin embargo, en cada una de nuestras diferentes situaciones, todos llegamos a saber la verdad sobre Falun Dafa y aprendimos que ¡Falun Dafa es bueno!"

Cuando estos jóvenes aprendieron la verdad por parte de su maestro favorito o descubrieron que sus mejores amigos son practicantes de Falun Gong, comenzaron a reflexionar sobre sí mismos y sobre lo que ocurría a su alrededor en la sociedad.

Entonces se decidieron a empezar a practicar también, y desde entonces, han cambiado completamente para mejor tanto física como espiritualmente, mientras que han sido bendecidos siguiendo los principios de "Verdad-Benevolencia-Tolerancia".

"Durante el actual brote de coronavirus, cuando toda la sociedad está experimentando cambios sin precedentes, no nos sentimos temerosos, tristes o desesperanzados como muchas personas a nuestro alrededor, y simplemente seguimos haciendo lo que debemos hacer de manera tranquila y realista", afirmaron.

Epílogo

Los jóvenes son la esperanza de una nación. Cuando el PCCh inyecta su "educación roja" a la juventud de China desde que están en el jardín de infancia, está convirtiendo a muchas de estas mentes juveniles en guerreros acérrimos de su régimen. Estas mentes jóvenes saldrán al mundo con un odio tremendo hacia otras naciones mientras se les priva de los valores universales y de la capacidad de discernir entre el bien y el mal.