(Minghui.org) Perdí el interés en los entretenimientos del mundo ordinario el día que comencé a practicar Falun Dafa. Dejé de mirar la televisión y en su lugar dediqué mi tiempo a leer el Fa.

Alentada a cultivarme

Shifu nos dijo:

"¿Sabes que para salvarte el Fo una vez mendigo por comida entre la gente común? Hoy día, una vez más he abierto la gran puerta y les enseño este Dafa para salvarles de nuevo. Nunca he sentido amargura por las incontables adversidades que he padecido. Entonces, ¿qué tienes que aún no puedes renunciar? ¿Podrás llevarte contigo al reino del Cielo las cosas que en lo profundo de tu corazón no puedes renunciar?" (Cultivación genuina, Escrituras esenciales para mayor avance).

Cuando leí este Fa del Maestro justo después de que se publicara, mi rostro se cubrió de lágrimas. Sabiendo que el Maestro ha pasado por tantas dificultades para salvarnos, debemos ser diligentes en nuestra cultivación.

Recuerdo que una noche me quedé dormida y vi un Falun grande y colorido girando en la esquina suroeste del cielo, tan real y hermoso; fue tan estimulante que me hizo reír. Mi esposo me despertó y me preguntó qué me pasaba; le conté sobre el Falun. Cuando me volví a dormir vi el mismo colorido Falun. Mi esposo me despertó otra vez, diciendo que no dejaba de hacer ruido.

Han pasado veinte años desde ese día y, sin embargo, el recuerdo aún sigue fresco. Yo era una practicante nueva entonces, así que le pregunté al coordinador qué significaba. Dijo que estaba siendo alentada para que fuera diligente.

Durante un período de tiempo, en el que aflojé en la cultivación, soñé que Shifu venía a mi casa. Me alegré y lo invité a entrar. El Maestro se sentó y comenzó a escribir algo en un papel. Aunque no podía ver lo que estaba escribiendo, lo sentí: "El tiempo para la cultivación real de Dafa es limitado"(Despertarse sobresaltado, Escrituras esenciales para mayor avance).

Después de despertar, entendí que Shifu me estaba iluminando, dadas mis recientes omisiones en la cultivación. No estaba a la altura de sus expectativas. Ahora entiendo el significado de lo que Shifu decía: "La cultivación no es un juego de niños. Es más seria que cualquier asunto de la gente común..." (Practicando la cultivación después de la jubilación, Escrituras esenciales para mayor avance).

Eliminando mi apego

Amo a mi esposo y como Dafa es tan precioso, quería que él también lo practicara. Por verme feliz, empezó a hacer conmigo los ejercicios sin estudiar el Fa; poco después también dejó de hacer los ejercicios conmigo. Yo era nueva en Dafa y no sabía mucho sobre cultivación. Me alegré cuando practicó, pero me sentí decepcionada cuando dejó de hacerlo.

Shifu dijo:

"Si un practicante no quiere hacerlo de corazón, ningún problema podrá ser solucionado. En cambio, aparecerán conflictos. Si esto no se corrige, los conflictos se intensificarán y así el aprendizaje del Fa será dañado gravemente" (Cómo dar asistencia, Escrituras esenciales para mayor avance).

Abandoné este apego después de aprender este principio del Fa.

Mi esposo me contó sobre un sueño que tuvo en la mañana del 24 de diciembre de 2015: "Fue tan real y aterrador. Hubo una grana explosión, la gente corría y se escondía en pánico. Yo también corría con nuestro hijo en la espalda, pero no encontraba ningún lugar donde escondernos. Justo en ese momento, vi las palabras 'Falun Dafa' escritas en una tabla que salió volando tras una explosión que ocurrió delante de mí. Mi único pensamiento fue que Falun Dafa podría salvarme".

Le dije: "Es una pista que Shifu te dio para alentarte a practicar. Hoy en día, la moral humana se ha deteriorado a tal extremo. Cuando llegue la catástrofe, ¡la magnitud del horror será enorme! ¡Shifu es muy compasivo y usa un sueño para iluminarte y salvarte del sufrimiento! Deberías ponerte al día".

Aunque comenzó a estudiar el Fa a partir de ese día, no era muy diligente, y seguía mirando la televisión cuando tenía tiempo; yo me sentía ansiosa cada vez que lo veía mirando televisión; me sentía infeliz y no podía controlar mis emociones. A ratos lo animaba, otros lo ignoraba o hacía algunos comentarios sarcásticos. Como no conseguí manejar mi actitud, se fue a vivir con su hermano por un tiempo. Me sentía mal y no sabía qué hacer.

Con más estudio del Fa, me di cuenta de que una cultivación forzada, no era una verdadera cultivación. Tenía que eliminar mi impaciencia. ¿Estaba yo molesta por mis sentimientos hacia mi esposo? ¿Mi comportamiento no estaba dando el resultado opuesto? Ya había obtenido el Fa, y Shifu se haría cargo de él. ¡Todos tienen su propio destino!

Shifu dijo:

"… no eres capaz de intervenir en las vidas de los demás ni de manipular sus destinos, incluidos los destinos de tu esposa, hijos, padres, hermanos, ¿acaso eso ya cuenta porque tú lo dices?" (Cuarta Lección, Zhuan Falun).

Diez días después me disculpé cuando mi esposo regresó de estar con su hermano. Le dije que no debí exigirle que se comportara acorde a mis estándares, y que no había considerado sus sentimientos, le aseguré que corregiría mi comportamiento.

Posteriormente solté muchos apegos, ¡y mi esposo también cambió! Dejó de ver la televisión, estudiaba más el Fa, memorizaba Lunyu, completaba los ejercicios la mayoría de los días y, a veces, aclaraba la verdad a la gente sobre Dafa.

Despertar las conciencias de las personas

La misión de los practicantes de Dafa es validar Dafa y despertar las conciencias de las personas. Cada ejemplo de buen comportamiento de un practicante de Dafa puede crear una oportunidad para aclarar la verdad. Dejé de ser quisquillosa al comprar verduras, y siempre pagaba el precio marcado sin quejarme. Les hacía saber que entendía que estaban trabajando duro para ganarse la vida. Dijeron que era raro ver a una persona tan agradable hoy en día. Les dije que era practicante de Falun Dafa y les aclaré los hechos sobre Dafa. Por lo general, se mostraban felices de hacer las tres renuncias del partido comunista chino (PCCh).

Una mañana, cuando compraba verduras, escuché a una vendedora decir que tenía mucha hambre. Le compré dos bollos grandes. Ella se conmovió mucho y se ofreció a pagármelos, pero me negué. Me dio las gracias con una gran sonrisa. Le dije que era practicante de Falun Dafa y le transmití los hechos sobre Dafa. La animé a recordar: "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". Me dijo que creía lo que le había dicho.

Tengo más de sesenta años, pero cuando viajo en el autobús, ofrezco mi asiento a las personas mayores que yo, a las personas con discapacidades e incluso a los niños. Una vez ofrecí mi asiento tres veces a otras personas. Todos en el autobús se conmovieron. Cuando un asiento se quedó libre, una de las pasajeras me lo ofreció. Me dijo: "Es usted tan amable". Le dije que practicaba Falun Dafa y que nos enseña a pensar en los demás. Le conté por qué la llamada "autoinmolación" en la Plaza Tiananmen fue un engaño fabricado por el PCCh para difamar a Falun Dafa. Le comenté: "Todo en la televisión sobre Falun Dafa es una mentira". Entendió la verdad y renunció al PCCh.

Shifu quiere que aclaremos la verdad, y quiero hacerlo lo mejor que pueda, así que guardo folletos de clarificación de la verdad y amuletos de Dafa en mi mochila. Cuando hablo con alguien sobre Dafa, les doy un folleto o un emblema y les pido que les trasmitan a sus familias lo que les dije. Me concentro en la calidad de lo que digo en lugar de la cantidad. Si consigo que una persona sepa la verdad, esta puede trasmitirla a más personas.

Han pasado ocho años desde que comencé a usar un teléfono celular para aclarar la verdad. Comencé con mensajes cortos, seguidos de mensajes multimedia, marcación automática y luego conversaciones directas. Hablar por celular creó buenas oportunidades para cultivar mi virtud. Algunas personas aprecian escuchar lo que les digo, mientras que otras me insultan. Peor aún, algunas personas me maldicen en lugar de escucharme cuando les explico cómo ponerse a salvo.

Al principio, mi mente a menudo se perturbaba y mi corazón comenzaba a latir con fuerza. Durante el proceso de aclaración de la verdad, descubrí muchos de mis apegos, incluidos el resentimiento, una mentalidad competitiva y la impaciencia. Cuando la gente aceptaba lo que decía, mi mentalidad de ostentación y de mostrarme emergían. Me sentía envidiosa cuando veía que otros practicantes convencían a más personas para que hicieran las tres renuncias. A través de la cultivación constante, he podido eliminar muchos de estos apegos.

¡Practicantes, trabajemos juntos para mejorarnos, salvar a más personas y cumplir nuestros votos prehistóricos!