Ayudando a las personas a mantenerse seguras en plena crisis del coronavirus

(Minghui.org) Me llamo Fenfang, y empecé a practicar Falun Dafa en 1996.

Cuando el partido comunista chino (PCCh) comenzó a perseguir a Falun Dafa en julio de 1999, fui a Beijing en el año 2000 para apelar a la justicia por la práctica. Fui arrestada y detenida en un campo de trabajos forzados durante un año y siete meses.

A pesar del encarcelamiento, nunca dudé de mi fe en Falun Dafa, al haberme beneficiado personalmente tanto de esta. A los 63 años de edad, mi vista sigue siendo tan buena como cuando era joven y mi mente sigue siendo aguda y clara. Puedo trabajar muy bien en la computadora como mis compañeros más jóvenes. Gracias a Falun Dafa por haberme dado una buena salud, me siento obligada a exponer la persecución del PCCh.

Hablo con la gente sobre Falun Dafa siempre que puedo. También los insto a que renuncien al PCCh y les digo que si recitan sinceramente estas dos preciosas frases: "Falun Dafa es bueno. Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno" les traerá bendiciones.

Al estallar la epidemia de coronavirus en diciembre pasado, utilizo principalmente dos métodos para difundir información sobre Falun Dafa: la conversación cara a cara y la distribución de materiales de aclaración de la verdad en las zonas residenciales cercanas. Encontré que estos dos métodos son muy directos y también me ayudan a tener una comunicación instantánea con la gente y aclarar sus malentendidos de inmediato.

Mis familiares

Mi nuera llevó a su hijo pequeño a ver a sus padres a principios de enero. La llamé tan pronto como salió la noticia del brote de coronavirus. Les recordé que recitaran las frases: "Falun Dafa es bueno. Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno", que ya les había dicho antes y todos respondieron positivamente por teléfono.

Conozco a la madre de mi nuera desde hace más de cuatro años y la he visto varias veces. Cada vez que la veía le aclaraba la verdad y le decía que recordara: "Falun Dafa es bueno. Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno".

Me alegró mucho que ella recordara lo que le había dicho antes.

También me di cuenta de que la gente recordaría lo que les habíamos dicho en momentos críticos.

Alrededor del 80% de mis amigos o parientes se han enterado de la verdad sobre Falun Dafa, y tengo confianza en que se mantendrán a salvo y superarán la crisis del coronavirus.

Mi nuera me llamó a principios de febrero, diciendo que la familia de su vecino había estado en Wuhan y que los tres habían dado positivo. Me dijo que el hombre de la familia había estado en el patio de sus padres y había charlado con ellos, y ninguno de ellos llevaba una máscara facial en ese momento.

Entonces me dijo con confianza: "Todos estaremos bien porque estamos protegidos".

De hecho, todos los miembros de su familia han permanecido sanos y salvos.

Aclarando más la verdad a la gente

Soy una funcionaria pública. He aclarado la verdad a mis compañeros anteriormente y algunos también han renunciado a las organizaciones del PCCh. A pesar de ello, siento que necesito recordarles qué hacer en medio del brote epidémico.

Como no siempre es conveniente hablar con ellos, escribí lo que quería decirles en pequeñas hojas de papel: "El camino para superar la plaga, el desastre y la infección -Recitar sinceramente 'Falun Dafa es bueno. Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno'".

Cuando mis compañeros vieron lo que había escrito, la mayoría de ellos dijeron, "Bien" con una sonrisa. Algunos también dijeron: "Por supuesto. Es muy bueno en primer lugar".

Puse un papelito en el escritorio de una de mis compañeras y le dije: "Por favor, echa un vistazo y compártelo con tu marido y tu hija".

Al día siguiente me dijo: "Mi esposo puso tu nota en su bolsillo y dijo que es un amuleto salva-vidas".

Su hermana menor también trabaja en nuestro lugar de trabajo y le aclaré la verdad hace más de diez años.

Un día, la hermana vino a nuestra oficina, así que puse un papelito en mi escritorio y le dije: "Mira esto".

Mi compañero le dijo: "Ponlo en tu bolsillo. Es un amuleto salva-vidas".

Hay otra compañera. Le aclaré la verdad hace unos diez días. Sé que también tiene una hermana y le dije que me gustaría hablar con ella si la veía.

"No te molestes", dijo la compañera. "Mi hermana menor es miembro del partido. No va a renunciar".

No mucho después, su hermana menor vino a verla. La animé a renunciar al PCCh, y para nuestra sorpresa, aceptó inmediatamente.

Me di cuenta de que los seres conscientes no han olvidado lo que los practicantes de Dafa les han dicho durante todos estos años, y están todos lúcidos en el momento crítico independientemente de la propaganda del PCCh.

El confinamiento no puede impedirnos salvar a la gente

El tiempo apremia y necesito más materiales de aclaración de la verdad, así que fui a casa del practicante que suele imprimirnos los materiales.

A pesar del guardia de seguridad en la entrada de su barrio, entré como de costumbre sin ningún problema. Fui a la casa del practicante una vez más para conseguir más materiales, y nadie me detuvo en la puerta.

Distribuyendo una variedad de materiales de aclaración de la verdad

Hay seis zonas residenciales cerca de donde vivo, con hasta 10.000 hogares. Mi hermana menor y yo solíamos ir a distribuir materiales de aclaración de la verdad en estas zonas en el pasado.

Incluso durante el confinamiento, pude entrar en estas zonas para distribuir materiales de aclaración de la verdad.

Llevaba una variedad de materiales conmigo para ayudar a la gente a saber de la verdad sobre Falun Dafa, el movimiento de "renunciar al PCCh", y cómo mantenerse a salvo en medio del brote de coronavirus, etc. Tales materiales inspiran pensamientos amables a la gente, y son útiles para ellos aunque ya hayan entendido los hechos de Dafa.

Durante el mes de confinamiento, mi hermana y yo nos las arreglamos para distribuir más de 400 conjuntos de materiales de aclaración de la verdad.

No dejándome influenciar por los fenómenos en la superficie

Aunque he aclarado la verdad a la mayoría de mis compañeros en el trabajo, seguimos teniendo puntos de vista muy diferentes en muchos temas porque hay mucha propaganda del PCCh en WeChat que leen todos los días. Tienden a creer lo que escuchan y leen sin cuestionar. Tampoco pueden diferenciar entre China y el partido comunista chino, y a veces me resulta bastante difícil ayudarles.

Son conscientes de que el PCCh dice mentiras porque ellos mismos tienen que escribir informes falsos de acuerdo con los requerimientos de los superiores, pero no saben cuál es la verdad ya que todo lo que ven y leen son mentiras dichas por el PCCh.

Tampoco pueden compartir libremente sus opiniones en WeChat, porque la gente solo puede publicar lo que el PCCh permite que la gente vea y cada usuario de WeChat tiene que firmar algún tipo de compromiso para prometer que no dirá nada que esté en desacuerdo con la dirección del partido.

Hay diecisiete personas en mi sección, y nosotras somos cinco empleadas que compartimos una oficina. Dos son relativamente nuevas, ya que fueron degradadas a trabajar en nuestra oficina el año pasado.

Pensé que podría convencerlas de que renunciaran al PCCh ahora que habían sido degradadas, pero cada vez que intentaba hablar con ellas, se enojaban mucho y mostraban resentimiento hacia mí.

Así que decidí darles algunos materiales de aclaración de la verdad para que los leyeran primero. Una de ellos aceptó el material, pero la otra lo rechazó. La que aceptó el material aún se negó a renunciar al PCCh.

Las otras dos compañeras creen en lo que les dije, aunque todavía siguen con la propaganda del PCCh a nivel superficial. Me dijeron que lo hacen solo con palabras, lo que significa que creen en Dafa y renuncian al PCCh de corazón. Entendí que no me dejaría influenciar por lo que mis compañeras hicieran en la superficie, como mostrar lealtad al PCCh.

Me preocupaba que las que habían renunciado al PCCh pudieran cambiar de opinión bajo la influencia de la propaganda del PCCh. Entonces me di cuenta de que no necesito preocuparme porque el PCCh no puede cambiar a la gente a nivel microscópico donde su lado que sabe ya ha aprendido la verdad.