(Minghui.org) Hace dos años, una noche pasé una prueba de vida o muerte.
Mi nieta estaba durmiendo en mi habitación. De repente estalló en lágrimas sin razón a las 2 de la mañana. Lloró muy fuerte durante mucho tiempo como si estuviera queriendo despertarme. Extrañamente, sus padres no escucharon sus llantos en absoluto. Ahora que lo pienso, creo que el Maestro dejó que mi nieta me despertara porque yo estaba en medio de una gran tribulación.
Me desperté poco a poco al oír su llanto acercándose a mí. Me dije: "Levántate rápido. Mira qué le pasa". ¡Pero no podía moverme! ¿Qué estaba pasando? Descubrí que ya no podía mover mi brazo ni mi pierna derecha. ¿Qué fue lo que sucedió? ¿Cómo es que no podía mover mi brazo ni mi pierna? Mi lado derecho se sentía como si estuviera siendo presionado por una gran piedra mientras que mi lado izquierdo permanecía normal.
Con mi brazo izquierdo moví mi brazo derecho. Mi brazo derecho se sentía tan pesado como si estuviera sufriendo un derrame cerebral. Pensé: "¡Esto no se ve bien! Es mi brazo, es mi pierna. Yo los controlo. No acepto que no sigan mis órdenes". He practicado Falun Dafa por casi 20 años. El Maestro purificó mi cuerpo hace mucho tiempo. Es imposible que esté presentando estos síntomas. Creo que es a causa de las viejas fuerzas.
Mi nieta dejó de llorar una vez que me desperté y, como si hubiera terminado su tarea, se quedó dormida. Quise sentarme, pero el lado derecho de mi cuerpo se sentía tan pesado como una gran roca. Me esforcé durante mucho tiempo y hasta sudé por todo el cuerpo, sin embargo, todavía no podía moverme. Seguía diciendo: "¡Falun Dafa es bueno! ¡Maestro, ayúdeme!". Seguí intentando sentarme. Después de aproximadamente 40 minutos, finalmente me senté. Dije entre lágrimas: "¡Gracias Maestro, por salvarme de nuevo!".
Traté de enviar pensamientos rectos después de sentarme. Sabía que no tenía ninguna enfermedad y que era imposible que me enfermara. La razón por la que estaba experimentando estos síntomas debía ser que algunos seres malignos estaban interfiriendo conmigo y querían hacerme daño. Así que debía enviar pensamientos rectos. Pero no podía cruzar la pierna derecha ni levantar la palma derecha. No acepté lo que estaba sucediendo. Levanté la palma de mi mano derecha con la izquierda. Aunque no podía cruzar la pierna derecha, la seguí moviendo hacia el cuerpo. Seguí haciéndolo lo más que pude. Creía en el Maestro y también creía que podía hacerlo. Cuanto más continuaban los síntomas, más decidida estaba a eliminarlos, y más firmes se volvían mis pensamientos rectos. Pedí la ayuda del Maestro otra vez. Quería validar que Falun Dafa es bueno y que un cultivador no tiene ninguna enfermedad.
Tomé una decisión: No dejaría de enviar pensamientos rectos ni bajar las piernas a menos que mi cuerpo volviera a la normalidad. Envié pensamientos rectos durante tres horas y media desde las 2:40 hasta las 6:10 de la mañana. ¡De ser incapaz de cruzar mi pierna derecha a sentarme con las dos piernas cruzadas, y de ser incapaz de levantar mi palma derecha a ser capaz de levantarla, mi cuerpo fue completamente restaurado en tres horas y media!
Después de enviar el pensamiento recto de las 6:10 de la mañana, me levanté de la cama como hacía habitualmente y preparé el desayuno para mis hijos. Comieron y se fueron a trabajar como de costumbre.
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Categoría: Enviando pensamientos rectos