(Minghui.org) Durante la actual pandemia de coronavirus, muchos países y personas que están fuera de China han sido testigos de cómo el partido comunista chino (PCCh) ha mentido sobre el brote inicial y el número de casos y muertes infectados que no se han informado.
Lo que la gente en Occidente posiblemente no sabe es que muchos chinos han creído las mentiras perpetuadas por el PCCh, y pensaron que los Estados Unidos y/u otros países tienen la culpa de la pandemia y que China es el salvador del mundo en su lucha contra el virus.
A continuación, se muestra una lista de temas discutidos en las plataformas de redes sociales en China:
¿Es el coronavirus un complot de los Estados Unidos?
¿Es Fang Fang (una escritora en Wuhan que relató la grave situación del encierro en sus diarios publicados en línea) una buena persona o una traidora?
¿Deberían los estudiantes chinos que estudian en otros países regresar a China por su propia seguridad?
¿Están condenados a fracasar los Estados Unidos y Europa muy pronto?
¿Debería China ayudar a los Estados Unidos?
¿Es cierto que China dominará el mundo en un futuro muy cercano?
¿Debería el gobierno chino también entregar cheques de estímulo a los ciudadanos con dificultades? como los países occidentales?
¿Son confiables los datos de coronavirus reportados por el gobierno chino?
¿Deberíamos aprovechar esta oportunidad y ocupar Taiwán por la fuerza?
Aunque sorprende a los occidentales, estas preguntas ilustran lo que se han acostumbrado a pensar los chinos debido al lavado de cerebro por largo plazo del PCCh de su gente con propaganda llena de mentiras.
Cuando la producción de cosechas fue "impulsada" 150 veces
Según David Satter, periodista y autor estadounidense, el Gran Salto Adelante de China a fines de la década de los cincuenta solo cobró la vida de 45 millones de personas. En total, alrededor de 100 millones murieron debido al comunismo, lo que la convierte en "la mayor catástrofe de la historia humana", escribió en un artículo del Wall Street Journal de 2017 titulado "100 años de comunismo y 100 millones de muertos".
En retrospectiva, las muertes infligidas por el PCCh no ocurrieron en un día; más bien, tuvieron lugar con el tiempo cuando el PCCh fabricó una mentira tras otra y siguió ocultando los sufrimientos de sus propios ciudadanos, similar a lo que se ha estado desarrollando en la pandemia de coronavirus en curso.
Entre 2010-2011 la producción promedio fue de aproximadamente 400 kg por mu (o 2.4 toneladas por acre) para trigo y arroz, los alimentos básicos de China. En junio de 1958, sin embargo, una ciudad en la provincia de Henan informó la producción de 1,000 kg de arroz por mu; A medida que otros lugares siguieron su ejemplo, el número de producción de cultivos siguió aumentando. En un momento, el condado de Xushui en la provincia de Hebei afirmó tener una producción de 60,000 kg de trigo por mu (o 360 toneladas por acre).
Cuando el entonces líder comunista Mao Zedong visitó Xushui el 4 de agosto de 1958 y se enteró de esto, quedó muy satisfecho. Después de un tiempo, comenzó a preocuparse: "¿Qué debemos hacer con tanto grano?".
Después de que más de la cantidad normal de grano se regresó al gobierno, debido a la producción "inflada", quedaba muy poco. Mao también exportó 6,800 millones de kilogramos de granos en ese momento, eso solo fue suficiente para alimentar a 34 millones de personas durante un año, a pesar de que los chinos estaban muriendo de hambre.
El PCCh afirmó que la hambruna ocurrió debido a "desastres naturales". Muy pocas personas fueron a verificar el clima en esos pocos años (1959-1961), que resultó ser bastante normal; pero muchos lo olvidaron poco después, y el PCCh fue nuevamente representado como un héroe "luchando" por su gente en esos tiempos "difíciles".
La hambruna fue uno de los muchos ejemplos en que los chinos que fueron perjudicados por el PCCh. Además de la alta producción en la tierra, otros objetivos establecidos durante el Gran Salto Adelante incluyeron: "cada aldea estableciendo plantas de acero", para producir más acero que el Reino Unido en 10 años y los Estados Unidos en 15 años.
La máquina "de mentiras" del PCCh sigue funcionando
Cuando se recuerda a los chinos las tragedias mencionadas, a menudo lo consideran una broma y lo descartan como historia antigua. Sin pensar en la causa raíz subyacente, sin embargo, es posible que no se den cuenta de que la máquina que ha provocado tantas tragedias en el pasado, el comunismo, sigue funcionando a toda velocidad. Sin embargo, la única diferencia es que la máquina bien engrasada ahora es más poderosa que nunca, lo que significa que es más dañina.
Peng Dehuai, uno de los más conocidos generales chinos y Ministro de Defensa (1953-1959), fue etiquetado en 1959 como líder de una "camarilla antipartido" por criticar el movimiento Gran Salto Adelante y despojado de todas sus posiciones. Más tarde vivió en la oscuridad y murió en prisión en 1974.
Han pasado décadas y la supresión de la verdad continúa en China. Yuan Longping, agrónomo chino conocido como el "Padre del Arroz Híbrido" por los medios chinos, afirmó en la televisión central de China, el 8 de julio de 2019, que China estaría en grandes problemas si otras naciones dejaran de exportar arroz a China. Recientemente, el 9 de abril de 2020, People's Daily citó a Yuan diciendo que la producción de arroz de China es totalmente autosuficiente y que no se espera escasez. Tales declaraciones contradictorias hacen que la gente se pregunte si Yuan estaba bajo presión para retractarse de su declaración anterior.
Mientras que algunas personas como Yuan se vieron obligadas a decir mentiras, muchas más se han acostumbrado a decir mentiras como una forma de vida en China. Luckin Coffee es el mayor competidor de Starbucks en China. Los medios de comunicación informaron recientemente que el CEO de la compañía y algunos de los principales líderes habían fabricado transacciones de 2.200 millones de yuanes para aumentar sus ingresos, eso llevó a detener el comercio de Luckin Coffee (listado como LK en el Nasdaq Exchange).
Mentir es un componente clave del comunismo. Leonid Brezhnev, secretario general del comité central del partido comunista gobernante de la Unión Soviética (PCUS) entre 1964 y 1982, dijo a su hermano: "¿Qué comunismo? Todo es una charla vacía para seducir a la gente".
"En mi estudio de las sociedades comunistas, llegué a la conclusión de que el propósito de la propaganda comunista no era persuadir, convencer o informar, sino humillar; y por lo tanto, cuanto menos correspondiera a la realidad, mejor", reflexionó Theodore Dalrymple, editor y alto funcionario del Instituto Manhattan, "cuando las personas se ven obligadas a permanecer en silencio cuando se les dice las mentiras más obvias, o incluso peor cuando se ven obligados a repetir las mentiras ellos mismos, pierden de una vez por todas su sentido de integridad".
El camino adelante
Cuando las mentiras están contenidas en China, las personas en otros países no sienten el impacto. Sin embargo, una vez que las mentiras del PCCh cruzan las fronteras nacionales, muchos países y sus ciudadanos también se han convertido en víctimas. A partir del 13 de abril de 2020, el coronavirus ha causado casi dos millones de infecciones en todo el mundo, con alrededor de 120,000 muertes.
"La crisis del coronavirus demuestra que el comunismo sigue siendo una grave amenaza para todo el mundo. Si Beijing hubiera sido honesto, la pandemia podría haberse evitado", escribió Marion Smith, directora ejecutiva de la Fundación a Victimas del Comunismo, el 5 de abril en un artículo de USA Today titulado "Culpe al partido comunista chino por la crisis del coronavirus".
Un sistema que genera mentiras también produce productos falsos. Las autoridades holandesas recibieron recientemente 1.3 millones de máscaras faciales de China para su distribución a proveedores de atención médica. Las máscaras venían con etiquetas de certificación N95, pero no cumplían con los estándares de calidad. Después de que una segunda prueba falló, se retiraron alrededor de 600,000 máscaras.
Del mismo modo, España anunció el 26 de marzo que los kits de prueba rápida comprados a una empresa china solo tenían una tasa de detección de coronavirus del 30%. Como resultado, se devolverían 640,000 kits.
El mayor daño de las mentiras del PCCh podría ser su erosión de los valores morales y el desprecio por la vida humana, tanto en el país como en el extranjero.
A medida que el PCCh está aumentando su influencia en el escenario internacional, es hora de que la gente haga una pausa y piense en cómo no dejarse engañar por las mentiras del PCCh y cómo defender nuestros principios.
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Categoría: Opinión y análisis