(Minghui.org) Después de jubilarme, a menudo salía a aclarar los hechos sobre Falun Dafa a la gente. Ahora, al final de mis 70 años, todavía estoy muy saludable y energético gracias a Falun Dafa, una práctica de cultivación de cuerpo y mente basada en los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia.

Muchas cosas sorprendentes han sucedido cuando la gente entendía los hechos sobre Falun Dafa. A continuación, me gustaría compartir algunas de ellas.

Un veterano se cura de una dolorosa discapacidad

Un día vi a un hombre cojeando y gimiendo en un puente. Me acerqué y le pregunté por qué no había ido al hospital.

Me dijo que era un veterano. Después de dejar el ejército no pudo encontrar un trabajo, y ahora no tenía seguro médico ni otros beneficios. "Mi pierna me está matando ahora, pero a nadie le importa. El costo médico es tan alto que no puedo pagarlo. Si me quejo o hago una petición al respecto, puedo ser golpeado", dijo.

Le sugerí que podía tratar de recitar sinceramente "Falun Dafa es bueno; Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno" y su dolor podría ser aliviado.

Se mostró un poco escéptico y preguntó cómo podría ayudar el recitar estas nueve palabras.

Le dije: "Falun Dafa es una práctica espiritual de la escuela de Buda. Si realmente crees en ello, los seres divinos te ayudarán. ¿Por qué no lo intentas? De todos modos, no tienes nada que perder".

Después de un rato, el hombre corrió hacia mí por detrás. Dijo: "¡Es tan asombroso! Ya no me duele la pierna. ¡Esas dos frases son realmente poderosas!".

"Falun Dafa es realmente bueno"

Me encontré con una antigua conocida en un mercado de agricultores. Parecía estar sufriendo. El lado izquierdo de su nariz estaba hinchado.

Me dijo: "Me han crecido pólipos dentro de la nariz y una cirugía sería considerada de alto riesgo debido a que hay demasiados capilares nasales". Incluso si me opero, volverán a aparecer más tarde. Solo puedo respirar por la boca. Me duele la cabeza. No puedo comer ni dormir bien. Realmente he vivido en la amargura".

También le sugerí que podía intentar recitar: "Falun Dafa es bueno y Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno" y tal vez su dolor se vería aliviado.

Cuando posteriormente nos volvimos a encontrar en el mercado de agricultores, me dijo felizmente que había recitado las dos frases todos los días y que los pólipos desaparecieron. Ya no tenía dolor de cabeza.

"¡Falun Dafa es realmente bueno!", dijo ella.

Un estreñimiento severo es curado

Tengo una tía que vive en un pueblo. Un día del año pasado, su hijo me llamó para que mi yerno encontrara un buen médico para su madre. Dijo que sufría de estreñimiento severo debido a un tumor en su intestino y que tenía que hacer la evacuación de las heces de forma manual cada dos o tres días. Lo cual era extremadamente doloroso.

Le pedí que le pasara un mensaje a mi tía. Le dije que ella estaría bien si recitaba sinceramente: "Falun Dafa es bueno y Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno".

Al día siguiente, mi tía me llamó y me dijo: "¡Tienes razón! Mi estreñimiento ha desaparecido. ¡Me siento de maravilla!".

Los fibromas uterinos desaparecieron

Una mujer de mi ciudad natal sufría de fibromas uterinos. Sabiendo que yo era un médico retirado, vino a mí y me preguntó si podía recomendarle algún tratamiento médico.

Le sugerí que podía intentar practicar Falun Dafa. Ella estuvo de acuerdo.

Comenzó a practicar los ejercicios de Falun Dafa y a leer Zhuan Falun, el libro principal de Falun Dafa. Unos días después, ella expulsó un montón de coágulos de sangre. Le dije que el Maestro Li, el fundador de Falun Dafa, estaba purificando su cuerpo. El sangrado duró ocho días. Ella se sintió muy cómoda después.

Luego regresó al hospital para otro chequeo. El doctor y la enfermera se sorprendieron al descubrir que el tumor había desaparecido. Le preguntaron qué tratamiento recibió. Ella les dijo: "¡He practicado Falun Dafa!".

La policía acepta mis materiales

En una ocasión, junto con otro practicante aclaramos los hechos sobre Falun Dafa a varios oficiales. Mientras que un oficial superior se negó a escuchar, uno más joven aceptó renunciar al partido comunista chino (PCCh) y otro me recibió el libro "El objetivo final del comunismo".

También conozco a un profesor de medicina asociado, que estaba en silla de ruedas, pero se recuperó después de que su hija le leyera el libro "El objetivo final del comunismo". Tres personas de su familia renunciaron más tarde al PCCh.